CSMS: CWFPDLDXGB (2)

Capítulo 242

¿Estás haciendo un berrinche?

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"Va a ser difícil." - Dijo Lu Si con voz cálida mientras retiraba las manos inquietas del hombre.

Xu Jin miró el dibujo frente al otro hombre y lo envolvió aún más fuerte: "Pero Si Bao no ha estado conmigo desde hace muchos días."

"¿Por qué te pasas todo el día pensando en eso, no lo habíamos hecho desde hace unos días?" - Lu Si se sintió bastante impotente: "¿Es eso todo lo que quieres hacer conmigo, no hay nada más que hacer?"

"Pero no entré." - Dijo Xu Jin, besando la cara del hombre: "Bueno, no te pongas así, deja que lo haga enseguida, baja a comer, te he hecho tu comida favorita."

"Bien." -Al oír después las palabras de Xu Jin, a Lu Si se le iluminaron los ojos, sinceramente la cocina de Xu Jin era mejor que la suya.

Xu Jin vio que finalmente se había distraído, y sólo entonces suspiró.

Los dos bajaron las escaleras.

"Xu Jin, tu cocina es tan deliciosa." - Dijo Lu Si mientras comía. En los últimos días había comido la cocina de Xu Jin y toda su cara se había redondeado durante una semana, su nutrición se había puesto al día.

"Come más si está delicioso." - Xu Jin miró a Lu Si con una sonrisa en la cara y, mientras tanto, le echó verduras en el cuenco.

"Mmm, mmm."

Después de terminar la comida.

Xu Jin sacó a Lu Si de la casa.

Justo cuando abrió la puerta, sopló un viento frío y cortante.

"Sal a dar un paseo."

En los últimos días no había caído más nieve del cielo, pero el tiempo seguía siendo tan frío como siempre.

Lu Si levantó los ojos hacia el cielo blanco como la nieve y habló en voz baja: "Qué bonito."

"¿Mmm?" - Xu Jin agarró la mano del joven, esperando a que Lu Si dijera algo más.

Lu Si inclinó la cabeza para mirar al otro hombre y se encontró con sus ojos: "Es raro ver nieve en invierno en la ciudad en la que vivo." - Un toque de melancolía brilló en sus ojos al pensar en el mundo en el que se encontraba.

Ya no es un buen lugar, pero no es el mundo en el que vive.

Es un mundo post-apocalíptico lleno de peligros.

¡Y no hay internet! ¿Quién diablos quiere eso? Es agradable vivir en paz y comodidad.

Xu Jin frunció los labios al escuchar las palabras de Lu Si y envolvió al hombre entre sus brazos: "Piénsalo, sólo puedes quedarte a mi lado y hacerme compañía."

Lu Si asomó la cabeza fuera de sus brazos: "Xu Jin, déjame preguntarte algo."

"No quiero responderte." - Xu Jin pareció adivinar lo que Lu Si iba a preguntar y rechazó su pregunta.

Lu Si agarró la mano del hombre y su tono se endureció hacia abajo: "No. Quiero saber si ¿hay una razón por la que vine aquí para tí?, ¿por qué al principio me eras indiferente...?"

"......" Xu Jin no volvió a hablar.

"Lo digas o no, tengo curiosidad por conocer la situación." - Al ver que no decía nada, Lu Si bajó la mirada.

Xu Jin le soltó la mano y frunció los labios: "No sabía que aparecerías."

Esta vez los dos tuvieron un desencuentro un tanto desagradable.

Lu Si se sacudió de encima a Xu Jin y volvió a entrar en la casa él solo, caminando hasta la habitación en la que se alojaban en el primer piso, entró y luego cerró y atrancó la puerta tras de sí.

Se sentó en la cama, sus ojos echaron un vistazo a los dibujos colocados sobre la mesa junto a la ventana, mirándolos fijamente por un momento, aturdido, se levantó, caminó hacia la ventana, sacó una silla y se sentó, apoyando la espalda en el respaldo, tomando los dibujos que había hecho, los planes que había trazado para la expansión y desarrollo de Xu Jin.

Echando la cabeza hacia atrás, miró al techo, con los ojos desganados, si realmente era él el que Xu Jin había conocido, cuando lo trajeron a este mundo, ¿qué pasaría con su cuerpo original?, ¿habría apestado hace tiempo?, ¿hasta que lo encontró el casero?

¿O tal vez fue sólo un sueño, como la última vez? Pero, ¿por qué había venido la última vez?

Una ráfaga de dudas le dejó perplejo.

Sus oídos se agitaron y no escuchó ningún sonido del exterior, lo que hizo que Lu Si se molestara un poco, ¿por qué Xu Jin no había venido a consolarlo?, él no era el tipo de persona que no escuchaba nada.