Recuerdos del llamado amor imposible: café.

10. Hoy.

Hoy.

Te escribo esto siendo una persona nueva, con más años y experiencias.

Hoy todo es diferente, la corriente llamada vida se ha llevado muchas de las cosas aquí escritas, excepto a tí.

A lo largo de nuestra historia fuimos muchas cosas el uno para el otro.

Héroes y verdugos.

Jueces y defensores.

Guerra y paz.

Luz y oscuridad.

Hoy puedo decir que hay cosas peores que en lo que aquellos años vivimos, que más que nada, me dejaste enseñanzas que he usado para la vida.

Muchas veces te sentí como algo adictivo, destructivo. Otras como un bálsamo, la cura que necesitaba para sanar un corazón roto.

Fuiste muchas cosas, pero siempre has sido mi café, primero uno adictivo, de los que te quitan el sueño y te hacen querer más y más.

Sigues siendolo, pero ahora de manera diferente. Eres un café dulce, de los que te confortan el alma después de un día triste y te hacen sentir cálido otra vez.

Puedo decir eso ahora, que logramos mejorar, madurar, dejar atrás la toxicidad y superar. Sé que tuvimos que dejar todo atrás para llegar hasta aquí: hasta la amistad más bonita que ha podido existir.

Hoy te digo: te quiero, pero de una manera más bonita, más tranquila, como la mejor amistad que perduró por los años, y que a pesar de las adversidades, siempre se mantuvo café.

Nuestro amor imposible quedó en nuestros recuerdos, cómo algo que jamás  fue y que siempre agradeceré.

Hoy, eres mucho más. Con la misma esencia tímida, de sonrisa dulce y lealtad inquebrantable. El café que calienta mi alma.

Somos más, de la mejor manera que hay. Y agradezco las experiencias que me regalaste, las que nos trajeron hasta el punto en el que estamos.

Gracias por enseñarme que debajo de las máscaras hay personas increíbles, que la luna no es tan inalcanzable, que no necesito un caballero de brillante armadura, que se puede sobrevivir a un huracán y que hasta la kriptonita más fuerte puede ser vencida.

Gracias por mantenernos café, porque tú se lo agregas a mi vida.

Con amor, la mejor amiga que te amó, te superó y que hoy te agradece tanto.

Que descubrió que hay otras maneras de querer, y que esas pueden ser mejores de lo que se cree.