Capítulo 2. Colisión

107 11 29
                                    

Gracias por pasarte a leer por aquí y votar, cómo siempre esto es para ti querido lector/lectora/lectorx

Y también quisiera agradecer por el bonito recibimiento a esta historia.

Enjoy!

***
Nada. El universo nos mira,
pero no queda rastro.

Somos los errores repetidos
somos los sueños sin partir.
Nos morimos,
luego,
existimos.

Compartimos momentos,
no la misma órbita.

Si te quedaras, nos extinguríamos,
como cenizas de árbol,
como río sin agua.

Aún quedarían vivencias,
tragedias, ganas y caídas.

Todavía viviría a medias;
aun escribiría con deficiencia.

Morir no significa dejar de latir:
muero cuando te llevas lo que eres,
incluyéndome
a mí.

Y hay colisión. Los átomos empiezan a perderse,
sabemos que todo empezará a contraerse.
Porque el amor es saber que te estrellarás,
contra el universo, y aceleras el paso
sin mirar atrás.

Dann Axkaná

***

Miró su reflejo en el espejo, sin poder dejar de llorar. Pasó la noche en vela, temiendo que en cualquier momento alguien entrara a la habitación y tratara de cobrar su "premio".

Serás la cereza del pastel en mi noche de debut muñeca, le había dicho Louis Tomlinson.

Volvió a sollozar, intentó inútilmente no llorar pero le era imposible, no estaba seguro si volvería a ver a su familia, ni siquiera si viviría para contar todo lo sucedido. La mafia daba miedo, ese mundo retorcido en todo sentido le ponía los pelos de punta.

Dio un respingo cuando escuchó un llamado a la puerta. Tembloroso abrió lentamente, dejando ver apenas medio rostro.

-¿Joven Styles?-le llamó una mujer regordeta de mediana edad, la reconoció de anoche que le ayudó a llegar a esa habitación.

El chico abrió la puerta lentamente.

-El desayuno está servido-dice la mujer con una sonrisa-

-No-no tengo hambre-balbuceó sorbiendo la nariz.

La mujer sonrió de nuevo, se alisó la falda de su uniforme gris.

-Lo que quise decir, joven, es que el Señor Malik lo requiere en el comedor-dijo más firme mirándolo severamente.

Harry asintió, todo su cuerpo está temblando como gelatina, llegó la hora de la verdad. Sabía de quién hablaba, el alfa que lo sacó de aquella jaula le había dicho escuetamente su nombre durante el trayecto a esa mansión.

-Tiene ropa y zapatos limpios ahí -señala una silla al costado de la cama-..por cierto, soy Magda y estaré a su servicio -la mujer hace una ligera reverencia y se marcha.

El chico intenta vestirse sin morir de los nervios en el proceso, quizá ahora sí que aquel alfa pondría sus requisitos y él no está para acatarlos, desde que lo llevaron a ese horrible lugar de subastas se afianzó la idea de luchar por su dignidad con uñas y dientes.

Llegó al comedor lentamente, no sin antes perderse un par de veces entre los enormes pasillos de esa casa victoriana. Harry se quedó estático en el marco de la puerta, con el corazón a galope, las palmas de las manos sudorosas y el ligero pensamiento de salir corriendo por la primer puerta cercana.

Sold soul [Zarry]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora