Capítulo 7

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Y bueno, llegamos al final de esta historia antes de que termine el mes del amor, espero les guste y como siempre gracias por leer.

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-¿Entonces cómo va todo?- le pregunta Elizabeth mientras ella y Merlín están reunidas en la división que dirige la albina.

-Ha mejorado, supongo. Su padre parece estarse cansando de fastidiarme.

-¿Y qué hay de la innombrable?

-De momento no ha hecho nada, aunque esperaba confrontarla de una vez por todas.

-¿En serio? Vaya se ve que Arthur realmente te interesa mucho.

-¿Lo dudabas?

-Supongo, es que tú siempre eres muy esquiva con mis preguntas, no me cuentas mayores detalles... bueno no quiero saber tantos detalles, pero pensé que al ser el primer hombre que te ha interesado, te tomarías el tiempo de conocerlo mejor y talvez incluso te dejaría de gustar. Solías decir que te parecía alguien insoportable.

-Es que sus técnicas de acercamiento no eran las mejores, también llegué a dudar si no estaba simplemente jugando conmigo, pero... sonará cursi y tonto, a veces siento como si nos hubiéramos conocido antes.

-¿En otra época? ¿En otra vida? ¿Por eso te sientes bien a su lado?

-Suena raro, pero algo así, no tiene sentido lo sé, quizás sólo es mi imaginación.

-Aunque no es lógico, tampoco es algo tonto- dice Elizabeth identificando el mismo sentimiento.

-Ok... olvidemos eso por ahora, viaje hasta aquí por otra cosa, necesito ayuda encontrando a un ingeniero para el nuevo proyecto que presentaremos a la junta.

-Bueno, eso es sencillo, tengo a alguien muy bueno, aunque recién se graduó y estuvo viviendo en el extranjero unos años, pero pienso que su perfil puede adaptarse a la propuesta que me enviaste.

-Genial, si puedes mandarlo la próxima semana te lo agradecería.

-Lo contactare hoy mismo- termina Elizabeth.

***

Merlín se encontraba de vuelta en las oficinas del complejo, los planes de Arthur ahora iban mucho más lejos, quería montar su propia oficina, talvez en un edificio pequeño, si bien no quería cortar lazos con sus padres y estaba consciente de que en algún momento todo el corporativo estaría a su cargo, tampoco quería seguir bajo su cobijo.

-Si fracasas perderás una fortuna y tendrás que volver a tu casa de forma vergonzosa- le había dicho uno de sus abogados.

-Agradezco el apoyo y la confianza- ríe sarcástico Arthur, pero aún con todos los riesgos había elegido continuar.

Merlín había hecho cuentas una y mil veces, había buscado ayuda con los mejores inversionistas y estos a su vez habían puesto metas bastante altas para cada proyecto, imposible no sentirse presionados, pero aún así se sentía feliz de apoyar a Arthur.

Alguien toca la puerta, debía ser el ingeniero que Elizabeth había recomendado, le da la indicación de pasar y entonces un joven rubio entra en la oficina.

-¿Usted debe ser Merlín? ¿Es la persona que va a entrevistarme?

-Si- responde mientras lo analiza, sus ojos rojizos le recordaban a los de su novio, igual ciertas facciones de su cara. Parecía tener cierto espíritu rebelde.

-Mi nombre es Lancelot, pero puede llamarme Lance.

-Siéntate- lo invita Merlín- Veo que hiciste prácticas en esta compañía mientras estabas estudiando.

Chocolate (Historia de San Valentín)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora