XI - Higher we go

11 0 0
                                    

Después de las presentaciones y un rico almuerzo, el ahora trío de no tan buenos amigos volvió a sus clases, dispersandose. No se volvieron a ver en todo el día, hasta la salida.

—¡Hey, Draky! – Llamó Bright, pero fue ignorado. —¡Que grosero!

—No me llames de esa forma ¿Que quieres?

—Bueno, aún es algo temprano¿Por qué no vamos a comer algo por ahí?

—No puedo, debo llegar a mi casa.

—¿Acaso no te dejan salir con amigos?

—Al contrario, pero no me interesa. Aparte, cómo ya te había dicho anteriormente, mi casa está demasiado lejos.

—Oh, podemos ir a...

—No gracias. – Y sin más, Benjamin se fue.

Los hermanastros solo se miraron confundidos y también se dirigieron a su hogar. Llegaron con el tiempo justo para hacer sus tareas y a la hora de la cena, Jack dió la buena noticia de que Charles había hecho un nuevo amigo.

—Me alegra escuchar eso, pero... ¿Es igual a tus compañeros de la otra escuela?

—No creo. Es el alumno becado de este año.

—Oh, ya veo. – Por aquello, Adam tenía la equivocada idea de que sería un muchacho tranquilo y responsable.

Y después de aquella cena tranquila, el resto del día pasó hasta el amanecer siguiente. De nueva cuenta, Jack buscó el acercarse a su nuevo amigo, aunque era mayormente ignorado. Esa rutina se repetía por semanas, hasta que un día por fin encontró algo más con que crear vínculo.

Fue el día en que empezaron las inscripciones a actividades extra curriculares. Había muchas y de muchos tipos, y aunque no eran obligatorias, el estar en una te otorgaba créditos extra en todas las asignaturas. Para atraer a los jóvenes y nuevos alumnos, los miembros de cada "club" se encargaban de pegar pósters y repartir panfletos. De nueva cuenta el grupo de tres se reunía en la azotea, todos con un montón de panfletos de diferentes actividades.

—Quiza entre al club de debate, o al de química ¿Tu que dices Gears?

—En el de debates los harás enojar, y en el de química harás volar la escuela.

—Exactamente por eso quiero alguno ¿Pero tú qué dices Draky? – No hubo respuesta. —¿Draky?

El mencionado estaba viendo fijamente una hoja de papel, y con un rostro serio, pero que denotaba tristeza. Después de un rato solo arrugó el papel y lo metió en uno de sus bolsillos.

—Me da igual.

—Oh, vamos. No seas así.

—¿Que quieres que diga? No importa en que te metas, te terminarán echando por insoportable.

—¡Que cruel!

—Es la verdad. – Benjamin se levantó para bajar de nuevo. —En fin, está a punto de sonar la campana, vamos

Los tres se dirigieron a sus respectivas clases, aunque antes de separarse, Jack robo aquel papel que Kondraki había arrugado. Sonrió al ver de qué se trataba y sin pensarlo mucho se escapó de la vista de su hermanastro para ir e inscribir a su auto proclamado amigo en aquel club, aunque no fue lo único de lo que se encargó.

Pasaron los días sin problemas, hasta que a la clase de Benjamin entro un pequeño grupo a buscar a alguien.

—Buenos días profesora. – Saludaron aquellos alumnos de segundo y último año mientras entraban.

ElysiumDonde viven las historias. Descúbrelo ahora