Me sentía cansada y no me quería mover de la cama por lo cómoda que estaba, pero sentía que alguien me agarraba de los hombros y me empezaba a sacudir.
Como todavía seguía medio dormida y con el libro en la cara no veía que pasaba. Solo escuche la voz de Derek cerca mío. Se notaba agitado por su tono de voz.
Abrí un poco los ojos pero solo veía las paginas sobre mi rostro junto a la oscuridad que había.
—¡Lucia se te hace tarde!¡Despierta de una vez!
—Cinco minutos más, estoy muy cómoda—cerré los ojos pero me entro la luz a los parpados pasando hasta que tuve que abrirlos ya que él me saco el libro de mi cara y luego pude ver como su rostro estaba a centímetros del mío mientras se reía un poco—. Antes que me digas algo, mi alarma no sonó.
—¿No sera porque tu amiga tiene tu celular?—tenia razón, estaba algo dormida y no entendía nada, pero solo volví a verlo algo cansada—. Y si no te levantas de la cama ahora yo mismo lo haré.
Cerré los ojos porque supuse que me levantaría de la cama con sus brazos pero solo sentí sus labios en mi frente porque me dio un leve pero tierno beso sobre ella.
Se alejo de mi y me quede algo confundida por lo que acaba de pasar. Al final moví la cabeza hasta su cama, donde se había sentado y mi vio algo divertido.
—Si piensas que besando mi frente me levantará estas equivocado.
—Se que no te levantara pero si te besó de otra manera quizás si funcione, te doy diez segundos—levanto sus manos y comenzo a bajar cada uno de sus dedos contando.
No supe que decir, solo que me levante lo más rápido posible para sentarme en mi cama. No le quería ver la cara porque sabía que si lo hacía me pondría nerviosa. Por su parte soltó un suspiro algo triste.
—Te dije que haría que te levantes, pero me dejaste con las ganas—se levanto y se sentó junto a mi para poner su brazo alrededor mío pero igual no lo pensaba ver ya que como siempre, me puse roja y nerviosa—. Oye linda, ve que estás llegando tarde a clases.
—No creo que sea para tanto, dame tu celular—pude calmarme y lo mire para que me pueda pasar su celular, que estaba sobre la mesa la mesa. Me lo paso para poder ver la hora—. Vamos Derek, llego solo...¡15 MINUTOS TARDE, MIERDA ME VAN A MATAR!
Me levanté muy rápido para cambiarme la ropa e ir a clases,tome una camisa gris,unos pantalones negros y me dirigí corriendo al baño.
Como me apure no había notado que la puerta del baño no estaba del todo cerrada. Me di cuenta cuando me había quitado la remera porque me di vuelta y vi que estaba Derek de chusma en la puerta.
—¡DEMONIOS!—sus ojos se abrieron como platos y note que se puso todo rojo.
—¡NO MIRES DEREK, ME ESTOY CAMBIANDO!
Tome la camisa y me tape la parte de adelante para que no me pueda ver. Intente cerrar la puerta pero puso el pie y la volvió a abrir, se paro delante mío mientras seguía tapandome con la camisa.
—Deja de ocultar tu cuerpo linda, se porque lo haces y ellos son idiotas por molestar a Afrodita en vida, pero yo la disfruto por tenerla delante mio.
No puedo negar que me gustaba que Derek diga cosas lindas de mi, nadie lo hacía excepto él. Bueno los chicos también me dicen cosas, pero con Derek es diferentes.
Sus palabras se grababan mas en mi que otra cosa, como si eso me pusiera mas alegre de lo que estaba, y él lo sabia muy bien.
No le dije nada pero ya sabe bastante eso. Puse mi mano sobre su rostro para sacarlo del baño y poder terminar de cambiarme y cerré la puerta detrás de mi espalda.
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Perdida en su sonrisa
RomantikLa vida te puede dar algunos problemas y algunas soluciones al querer iniciar de nuevo con todo lo que conoces, no es la excepción de Lucia Miller. Al querer iniciar de nuevo con su vida en la universidad podría tener en cuenta un par de cosas. Lo p...