23. El hospital.

23 2 15
                                    

Mis ojos se abrieron débilmente gracias a un beep que se repetía una y otra vez, se escuchaba lejano, pero desconozco de donde provenía

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Mis ojos se abrieron débilmente gracias a un beep que se repetía una y otra vez, se escuchaba lejano, pero desconozco de donde provenía. Lo primero que vi fue una luz blanca y brillante que me hizo cerrarlos al instante. << ¿Estoy muerto? >> fue lo primero que paso por mi cabeza, la verdad, eso es mucho más creíble a pensar que alguien de la calle se compadeció de mí. No sé cuánto tiempo ha pasado, lo último que recuerdo es haber terminado tirado en la acera, retorciéndome del dolor hasta perder el conocimiento.

Volví a abrir mis ojos parpadeando un par de veces para tratar de acostumbrarme a la luz lo mas rápido posible. << ¿Qué es esto? >> Pensé, pues tengo algo en mi cuello que me resulta algo incómodo porque no me permite moverme como me gustaría y me pone ansioso no poder observar mi entorno. Levante mi mano para tocar esta cosa, no recuerdo como se llama, se lo que es porque mamá solía usar uno cuando papá y ella tuvieron un accidente automovilístico, no supe cómo se llamaba en aquel entonces y creo que tampoco lo se ahora.

Estoy algo confundido, no sé qué paso y tampoco sé cómo llegue aquí. Pensé en llamar a alguien que me explicara pero no lo hice, me quede callado y en ese momento, tuve una visión de lo que pudo haber pasado. Gregory salió a buscarme y me encontró tendido en la acera luego de quedar inconsciente porque nadie me ayudo, él me levanto y me trajo al hospital, entonces, está enojado, esperando que una de las enfermeras le avise que desperté para venir a reclamarme por haberme ido, diciendo algo como: "Mira nada mas como estas, te arriesgaste mucho a que te pasara algo malo." Incluso puedo escuchar su voz en mi cabeza.

Volví a la realidad dando un pequeño brinco gracias a que escuche el ruido de una silla arrastrándose por el suelo, muy cerca de mí.

-Hey, hola... Despertaste. - Comento dulcemente una voz que reconozco perfectamente.

Abrí mis ojos con sorpresa y en pocos segundos apareció en mi rango de visión, estrujando suavemente su ojo derecho. << Estoy alucinando. >> Pensé frunciendo el ceño, recorriéndolo con la mirada para tratar de convencerme de que es real. Es su cabello, su voz, sus ojos; aunque este un poco adormilado, claro que es el.

-Vans. - Murmure como respuesta y él asintió suavemente llevando su mano a acariciar mi cabello.

-Sí, estoy aquí contigo. - Susurro al inclinarse un poco hacia mí.

-¿Q-Qué paso? - Inquirí mirándolo aun confundido. - ¿Cómo llegue aquí?

-Te voy a contar pero tranquilo ¿Sí? - Asentí suavemente como respuesta y el continuo. - Elliot llego a mi depar...

-¿Elliot? - Interrumpí casi de inmediato. - ¿Esta allá?

-Sí, Elliot está en mi departamento, con Demon y Clara. - Afirmo sonriendo.

Enseguida una pequeña sonrisa se formó en mis labios, es que no soy capaz de describir el alivio que sentí en cuando escuche eso, como si todo el miedo y la incertidumbre que tenía solo se fuera esfumado tan rápido como había aparecido. Esta seguro en un lugar donde no le van a hacer daño, eso me tranquiliza.

Elliot. Mi verdadero amor. Donde viven las historias. Descúbrelo ahora