Erick se da cuenta que las cosas no son como siempre pensó, que su perro es más inteligente de lo que parece y sobre todo, que el verdadero amor puede tocar la puerta cuando uno menos se lo espere cambiando toda la realidad en la que antes se vivía...
—¡Erick! — Alcance a escuchar que me llamo desde afuera pero no voltee.
Cerré mis ojos sintiendo como el auto encendía y Gregory comenzaba a conducir. Solo por un segundo, un pequeño segundo, si quise bajarme del auto, quise quedarme pero a fin de cuentas, no lo hice, me quede.
Todo el viaje fue en completo silencio, solo me mantuve mirando por la ventana y contando los autos similares que alcanzaba a mirar por el camino. Mi mente divagaba por todas las cosas que pasaron el día de hoy. Los pensamientos, frases, recuerdos, pasaban por mi mente tan rápido como nosotros rebasando los demás autos estacionados y las personas caminando por las aceras. Lo se, desde el principio lo supe, la cena no era buena idea, no cuando conozco a Gregory pero aun así, solo quise intentarlo, quise confiar, me volví a equivocar.
Estaba tan perdido en mi mismo que no alcance a darme cuenta que habíamos llegado a casa hasta que el fuerte sonido de la puerta del auto cerrándose me hizo dar un brinco. Rápidamente voltee a ver al asiento del conductor notando como se iba caminando hacia la entrada y por lo mismo apresure el paso para bajarme, cerrar la puerta y alcanzarlo para que pudiéramos entrar juntos.
Imagino posibles destinos cuando crucemos esa puerta, desde una bofetada o un puñetazo, tal vez un jalón de cabello o unos cuantos insultos. Son muchas opciones y todas me dan igual de miedo. Sin embargo, ninguno de ellos paso, solo aclaro su garganta y miro hacia mi mientras saca las llaves y su celular de si bolsillo.
—No quiero que vuelvas a ver o hablar con ese idiota. — Ordeno mientras se quitaba el saco.
—Pero es mi amigo. — Las palabras salieron solas de mi boca, como si cada una de ellas tuvieras mente propia o solo soy realmente estúpido.
—Pero no me agrada Erick, le gustas ¿No te importa? — Negué efusivamente porque no creo gustarle a Vans, no es así.
—Estas exagerando Gregory. No todos están detrás de mi — Respondí restándole importancia y mire como lanzo el saco al sofá y yo hice lo mismo luego de quitármelo.
Creo que esta conversación es lo suficientemente importante como para ir a la habitación a dejar todo ordenado, ya luego puedo recoger, no es nada del otro mundo y puedo hacerlo mañana incluso y si Elliot lo ensucia solo lo lavo.
—Eres muy inocente Erick, demasiado para este mundo pero respóndeme algo. — Comento aflojando la corbata. — ¿El te daría todo lo que te he dado yo? Yo te he cuidado, te he mantenido, he mantenido a tu perro, además de pagar el tratamiento y las medicinas de tu padre ¿El haría eso por ti?
Desvié la mirada al suelo, el tiene razón cuando dice eso, el me ha dado todo, incluso ayudar a mi familia cuando lo necesitamos así como pago todos los gastos médicos de mi padre cuando enfermo y los de mi madre cuando se rompió el brazo cayendo de las escaleras pero aun asi no le quise responder.
—¿Verdad que no? — Insistió y volví a levantar la mirada. — Solo te estoy pidiendo una cosa Erick, solo una, que no vuelvas a hablar con el ¿Es tan difícil de hacer?
—Gregory… ¿Por qué tu puedes tener amigos y yo no? — Pregunté frunciendo el ceño jugando con una de las orejas de mi perro. — Yo aquí no hago nada.
—¿Cómo que no haces nada? — Preguntó levantando una ceja, como si no lograra entender bien a que me refiero.
—Tu sales con tus amigos a divertirte, van a beber, a comer, hay veces que sales en la mañana y llegas en la noche ¿Por qué yo no puedo tener un amigo para conversar mientras paseo a Elliot? — Interrogue sintiendo un pequeño nudo en mi estomago.
—Yo soy un adulto Erick, tu eres un niño inmaduro
—Si soy un niño inmaduro ¿Qué haces conmigo? — Pregunte un tanto molesto y el solo abrió sus ojos con sorpresa por obtener esa respuesta de mi parte.
Parece que no le gusto esa respuesta por como su mirada se oscureció ligeramente mientras me miraba, me gustaría saber que esta pasando por su cabeza justo ahora.
—No me hables así Erick, se supone que porque te amo ¿No? — Llevo sus manos a mis mejillas para dar pequeñas caricias con sus dedos pulgares. — No peleemos por favor. — Depósito un beso en mis labios de forma delicada, solo de contacto. — ¿Qué te parece si mañana te llevo a conocer a mis amigos y así te calmas?
Ahora el que abrió sus ojos con sorpresa fui yo, el jamás me ha preguntado algo así, menos porque el se encarga de resaltar la importancia de los limites y la privacidad y eso incluye no conocer a sus amigos así como tampoco revisar su celular, el no revisa el mío así que está bien.
—¡Si! — Exclame de forma impulsiva, aclarando mi garganta segundos después.
Es que aunque no quiera aceptarlo; la idea de que me incluya mas en lo que el hace, en conocer a sus amigos, me emociona y el parece notarlo claramente por la sonrisa que fue marcándose en sus labios.
—Perfecto, mañana después del almuerzo nos vamos. — Me dio otro beso rápido en los labios y me soltó. —Anda a cambiarte tu primero para ir a dormir.
Asentí y me di la vuelta, Elliot muy fielmente va detrás de mi porque escucho sus patitas, el no me deja solo y por eso me frene cuando no escuche mas aquellas patitas.
—¿Qué pasó? — Pregunte caminando hasta el de regreso y acariciando su cabecita, el ladro y camino a la cocina y de regreso hacia mi. — ¿Tienes hambre?
Me ladro y movió su cola mas animadamente, no pude evitar soltar una risa de ver a mi niño tan feliz de comer.
—Pero yo te deje comida. — Suspiré y negué mientras camino dentro de la cocina con el, efectivamente su plato estaba vació así que se comió toda la comida que le dejé.
Me moví a la alacena para tomar un sobre de comida para el, siempre ha sido un niño muy obediente así que espero pacientemente a que la comida estuviera en su plato para comenzar a comer olvidándose de que yo existo.
Negué y solo me levante para no molestarlo así que camine para ir a cambiarme. Desde aquí en la cocina alcanzo a escuchar a Gregory hablando con alguien pero no alcanzo a entender que es lo que esta diciendo, no le di importancia porque seguro les está avisando a sus amigos de que yo voy mañana, seria lo adecuado, así no los toma por sorpresa mañana. Ahora si todo solucionado, seguí mi camino a la habitación para poder quitarme lo que queda del traje.
Muy bonito y todo pero no es práctico y sobre todo, no es tan cómodo como parece, al menos para mi, tal vez porque estoy muy acostumbrado a usar ropa casual que con un traje elegante me siento extraño. Sin embargo, no deja de ser genial.
Me quede pensando un segundo mirando mi armario mientras sacaba mi ropa de manera automática, conocer a los amigos de Gregory me da nervios y emoción y al mismo tiempo me asusta que todo salga mal, me asusta confirmar que Vans tiene razón porque aunque una parte de mi me dice que si, la parte que ama a Gregory y sabe que lo necesito, se niega a aceptarlo.
Veamos que pasa.
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Nota de autor: Yo viendo a Gregory tratar tan amable y cariñoso a Erick:
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Erick parece no aprender de las experiencias, ahí va todo emocionado por la propuesta... espero que esta vez si no salga nada mal. — Se preocupa y olvida que es el escritor. — al menos hoy no termino como pera de boxeo, yo pense que si.
por ahora eso es todo ¿Que tal les pareció el cap?
nos leemos en el siguiente cap (◍•ᴗ•◍)❤ hasta luego.
