࣪ ָ֢ ⋆ Without ִ Makeup ˛˛ HyunHo ''

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Una vez que terminaron de pagar en el supermercado, Hyunjin, Jeongin y Minho salieron a la calle, cargados con las bolsas de la compra, y se dirigieron hacia la casa de Felix. Minho, con una montaña de bolsas que parecían pesar toneladas.

—¿Felix se va a encerrar o qué? ¿Por qué tantos víveres? —Jadeo secando el sudor de su rostro con una de sus mangas, mojandola totalmente.

Jeongin, de mal humor como siempre después de las compras, arrastraba los pies a su lado con unas cuantas bolsas, mientras que Hyunjin llevaba solo un par de bolsas ligeras, siguiendo la sugerencia de Minho de no cargar tanto.

—A Felix le gusta comprar en plan apocalipsis —explicó Hyunjin, poniéndose un poco colorado. No era su ambiente, usualmente sus chistes se basaban en memes de películas de romance adolescente. Pero pudo observar como las comisuras de los labios de Minho subían un poco, tranquilizandole.

Minho noto como Hyunjin hacia una mueca involuntariamente, pero decidió no preguntar al respecto.

Jeongin se plantó de golpe y se dejó caer en la acera con un suspiro pesado.

—Bueno, al menos tendrá comida para el próximo mes entero. Pensé que estaba montando un búnker secreto o algo así —bromeó, mientras acomodaba las bolsas de sus brazos.

Minho también se detuvo, ajustando las bolsas en sus manos, y miró a Hyunjin con ternura.

Hyunjin intentaba sostener las bolsas, demostrando que podía con ellas, aunque una rebelde rompió por el gran peso.

—Te dije que no tenías que cargar tanto. Dame eso —susurró Minho, quitándole las bolsas y rozando ligeramente sus manos.

Hyunjin asintió, sintiéndose su rostro más caliente mientras apartaba la mirada.

—Vale, gracias Minho.

Continuaron caminando, con Jeongin quejándose de cargar las bolsas.

—¡Es injusto que Hyunjin no esté cargando nada! —Hyunjin sacó la lengua, haciendo reír a Minho—. ¡Lo consientes demasiado!

—Ya basta, Innie, no seas envidioso —replicó Minho—. Además, ya casi llegamos.

Jeongin lo miró con desaprobación fingida antes de que sus ojos se iluminaran.

—¿Y si nos invitas a un helado? —propuso con entusiasmo.

—Cómpralo tú —respondió Minho, ajustando las bolsas.

Jeongin suspiró, pero no iba a rendirse tan fácilmente.

—Vamos, Ho, tú eres mayor y tienes más plata que Rico McPato —insistió, Minho le miró extrañado a tal comparación.—¡Hyunjin también quiere!

Minho pareció pensarlo por un momento. Giró la cabeza y miró a Hyunjin.

—¿Quieres helado?

Hyunjin lo miró confundido, con una expresión de duda. No estaba seguro si quería aceptar, en realidad, no le apetecía mucho, pero Jeongin le caía bien.

Después de todo sería su último día con ellos.

Finalmente asintió, escuchando los gritos de felicidad de Jeongin.