All Of The Stars

Capítulo XXVI

Lila abre con desesperación la puerta de su apartamento, y la misma se cierra con un golpe seco. Ella abre su cartera y la voltea dejando caer todas las cosas que tiene dentro, y busca con desesperación el sobre de la clínica que contenía sus análisis.

Cuando lo encuentra, lo abre desesperada y comienza a leer los resultados, mientras siente que su corazón comienza a latir con fuerza.

"Prueba de GCH: Positiva. Embarazo de 3 semanas de gestión"

Lila traga con fuerza. Siente que las lágrimas comienzan a deslizarse por su rostro, y muerde su labio inferior. Cierra sus ojos con fuerza, y comienza a hacer cálculos mentales.

- Ah dios mío. Gareth me va a matar. Dios mío, que gilipollas que soy. - Dice luego de unos cuantos segundos

Lila deja caer las hojas, mientras comienza a llorar desesperada. Se agarra el cabello con sus manos, y golpea el suelo con sus puños. - No puedo ser tan idiota, ¿Por qué mierda no nos cuidamos? -

Ella rebusca su agenda y comienza a buscar desesperada las fechas de sus encuentros con Gareth, ya que siempre los marcaba con un corazón. Se pasa las manos por su rostro frustrada, y suspira, ¿Qué diría Gareth respecto a esto? A tener un hijo con ella.

<<¿Cuándo fue la vez que no nos cuidamos? >> Piensa tratando de recordar.

Y piensa, y lo recuerda. La primera vez que lo hicieron en el hogar de Gareth la noche del clásico, la mañana siguiente. Unas cuantas noches más, y la noche del cumpleaños de Fernando.

- ¡La puta madre¡ Soy una adulta que ni siquiera ha notado que ha estado con un retraso, ¡¿Dónde mierda tengo mi cabeza?! - Se grita furiosa mientras patea las cosas que hay en el suelo.

Lila se pone de pie desesperada, y recoge todas las cosas que ha tirado, y deja la cartera en el suelo. Se acuesta en el sofá llorando y se aferra a su vientre, mientras le dedica suaves caricias.

No cree que es capaz de poder ver a Gareth al rostro, ¿Cómo le diría que serían padres? Por dios, ellos llevaban menos de un mes de noviazgo, y la frutilla de la torta era que ese noviazgo era clandestino.

- Genial Lila, lo has arruinado todo.- Se reprocha mientras que las lágrimas siguen deslizando de por sus mejillas, mientras que su labio inferior tiembla

Su celular comienza a vibrar y a sonar en su cartera y puede oír que es la canción que Gareth le dedicó, por lo que sabe que es él quien esta llamando y decide ignorarlo. Y él insiste con las llamadas tres veces más y luego escribe un mensaje que Lila decide ver.

"Cariad ¿Te encuentras bien? Me preocupas que no me atendieras. Mañana el avión sale por la tarde, así que pensaba que por la noche podrías venir a casa y vamos desde aquí ¿Qué opinas? Te amo."

Ella muerde su labio inferior y siente mareos mientras relee el mensaje. Y piensa unos cuantos segundos la respuesta para él.

"Cariño, hoy mi jefe me ha dicho que no puedo tomarme los días porque Marca no cubrirá el partido y además no hay personal para que me cubra. Es un gilipollas, tendría que haberlo pensado antes que decirme que sí. Lo siento mi amor. Además estoy con mucho trabajo y nos quedaremos aquí para seguirlo. Te amo"

Lila tira su celular nuevamente al suelo, y se abraza a su cuerpo con fuerza. Y se queda viendo el techo en silencio mientras las lágrimas siguen deslizándose por su rostro.

Se pone de pie y camina lentamente hasta la cocina. Se prepara una taza de café caliente y toma su pequeño anotador y una lapicera. Muerde su labio inferior y comienza a escribir.

Fernando:

Sé que soy la persona más cobarde al escribirte esta carta, pero creo que es la manera más fácil que tengo para despedirme de ti. Lo siento, siento tanto haberte hecho tantas falsas esperanzas, cuando mi cabeza estaba claramente centrada en otro hombre. No puedo dejar de agradecerte porque me hiciste feliz el poco tiempo que estuvimos juntos.

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Confió en ti y todo lo que tienes para demostrarle al mundo, y sé que estando en tu casa, en el club de tu vida, volverás a ser aquel jugador que fuiste en el Liverpool. Yo lo sé.

Tienes una familia preciosa, nunca lo olvides. Eres un padre excepcional, no sabes lo afortunados que son tus pequeños de tenerte como padre. Nunca vi a un padre tan enamorado de sus hijos como yo te veo a ti de ellos. Y créeme, que Nora y Leo te tienen como su héroe Fernando.

Me hubiese gustado aprenderte a amar como tú me amabas a mí. Y haber sido felices juntos pero el destino no lo quiso así.

Espero que algún día puedas perdonarme.

Lila.

Lila crea un pequeño sobre con las otras hojas y guarda la carta allí dentro. Escribe el nombre de Fernando, y suspira mientras le da un sorbo a su café. Cierra sus ojos y comienza a escribir una carta a Gareth.

Gareth:

Estoy frente a la hoja de papel y no sé qué decirte, porque hay muchas cosas atoradas en mi garganta. Han pasado diez meses desde el primer día en el que te conocí, y aún puedo recordar cómo me mirabas fijamente mientras hacíamos la entrevista. Aún puedo recordar cómo fue la primera vez que salimos a correr juntos, y también puedo recordar la última porque lo fuimos dejando. Siempre buscaba la excusa para estar cerca de ti, ¿Recuerdas la noche que pasamos en Ibiza en el yate de Ronaldo? ¿Aquella noche en la que dormimos juntos por primera vez? Me quede una hora despierta viéndote dormir, recuerdo como movías tu nariz y te movías de un lado al otro porque hacía calor, pero siempre lo hacías con cuidado porque yo dormía sobre tu pecho.

Aún recuerdo el momento luego de ganar el mundial de clubes. Te abrace con fuerza y casi te beso los labios, y fingí un estornudo. Yo solía controlarme contigo, pero ese día se me estaba siendo imposible no sentirme orgullosa de vos.

Te amo tanto, que siento que duele hacerlo, que es una manera en la que nunca ame y nunca podría hacerlo.

Te amo, y espero que no me odies por desaparecer de tu vida. No sabes cómo me hubiese gustado formar una familia contigo y Alba.

Lila.

Ella suspira, y guarda la carta en su sobre. Acomoda las cosas de la cocina, y apaga las luces mientras suspira. Toma del living su cartera y sus cosas, y sube las escaleras lentamente. Se encierra en su habitación, comienza a hacer las valijas mientras las lágrimas fluyen como rebeldes por su rostro. Conecta sus auriculares a su Ipod y comienza a escuchar música mientras guarda todas sus pertenencias.

Entrada la noche, se acuesta en el pequeño sofá y observa su vacía habitación, mientras piensa en Gareth. Se levanta con dolor, acomoda las valijas y las cajas a un lado y se dirige a dar una ducha de agua caliente.

Acostada toma una taza de té caliente y verifica la hora de su vuelo. A las nueve de la mañana partía su avión a Chelsea.

Una vida nueva en Inglaterra comenzaba para ella. Lila voltea en la cama y abraza su almohada mientras las lágrimas siguen en sus mejillas, y Gareth también voltea en su habitación y abraza a su almohada imaginando que es el cuerpo de su amada.