RESILIENCIA. | MessiOchoa/BottomOchoa! 🍃

☁️ 05 ☁️

— Mierda, no me hagas esto.

Un gruñido sale de su boca al hacer zoom en la foto que se repite en sus menciones de instagram.

Una donde adjuntan los recientes twits de Saúl "El canelo" Álvarez y en la misma una foto del pelirrojo mostrando el abdomen marcado con los brazos bien trabajados flexionados hacia arriba.

Saúl Álvarez.

"El canelo" era uno de los mejores y más famosos boxeadores mexicanos de la actualidad, el mejor pagado si no se equivocaba.

Y el hombre que parecía no dejarle seguir su vida en paz.

Guillermo suspiró con cansancio, la ansiedad regresando en ese nudo apretado en su estómago y la rabia calentando su piel cómo fuego.

¿Hasta dónde pensaba llegar ese imbécil con tal de verle infeliz?

Habían pasado casi cuatro años desde que estuvieron juntos pero el seguía acosandole. Y si bien era cierto que su relación fue intensa y bastante seria, también era verdad que la naturaleza dura del alfa no le había permitido respirar.

Guillermo no se arrepentía de lo pasado, esa relación había funcionado para fomentar sus límites, trabajar en si mismo y dejar de ser ingenuo.

Y es que Saúl solía ser entonces un alfa terco y testarudo, uno que lo había intentado marcar en más de una ocasión y anudarlo con tal de tener hijos.

Un hombre que no temía usar su voz de mando para conseguir que omegas cómo el se postraran sobre las rodillas e hicieran lo que sea que le apetecía.

Uno que le había mentido y usado.

¿Y qué decir de los celos?

El hombre parecía no saber controlarlos, en más de una ocasión lo había hecho sentir triste por no ser como los otros omegas, además de volverlo inseguro y ansioso cuando optaba por culparle de cosas que Guillermo ni siquiera podía imaginarse haciendo estando con él.

Y en una noche fría de agosto cuando Memo ya era lo suficiente inseguro, bastante temeroso y Saúl había roto cada parte del omega en él, las maletas estaban hechas y Álvarez estaba listo para huir sin él.

Memo recuerda que lloró un río, pero se mantuvo fuerte, decidido. Y tiempo después el alfa se caso con una mujer bonita que uso el anillo (que originalmente fue suyo) para darle su primer hija.

Nada termino ahí, Saúl seguía buscándolo e investigando parte de su vida, arruinando sus relaciones y haciendo su vida miserable por momentos.

Pero esto no era un momento, era la posibilidad de estar con su pareja destinada y compartir con ella el resto de sus días. No podía dejar que siguiera arruinando su futuro así.

— Al fin. — La voz de Leo y el golpe de la puerta al cerrarse lo sacaron de sus pensamientos, bloqueó su teléfono e intento poner buena cara. — No sabes la noche que he tenido. ¿Viste los twits?

— Uhm

— ¿Quién hace amenazas por Twitter?

A Guillermo no le parecía una amenaza si no una advertencia, pero se quedó en la cama en silencio.

Aún no sabía cómo confesarle lo que estaba ocurriendo o el como Leo reaccionaría si él decidiera contar porque alguien como Saúl estaba haciendo amenazas públicas y tomándose tan personal un vídeo.