Una chica en busca de su identidad, un chico totalmente incomprendido y una aventura que les ayudará a descubrir los sentimientos del otro .
Es un fanfic de Edmund Pevensie y tú. Prohibido adaptación es una historia mía basada en las películas. Los...
Me encontraba cabalgando con Hades, seguía mi instinto no sabía a donde me llevaría aún así algo dentro de mí me decía que era el camino correcto. A veces mi anillo se iluminaba, mostraba una flecha y me confirmaba mi presentimiento. Frené a Hades necesitaba descansar, me bajé para acomodar el manto sobre el que duermo e hice una fogata. Conseguí entrar en calor y eso me permitió fijarme en el lugar que me rodeaba. Era un bosque precioso, reinaba el silencio y la tranquilidad, te hacía sentirte en paz. Empecé a escuchar los pájaros cantar, pensé en practicar mis poderes aunque no sabía como. En ese instante mi anillo empezó a vibrar, lo rocé con la yema de mi dedo y sentí una corriente eléctrica recorrerme de pies a cabeza.
En ese instante mis dudas se disiparon y supe que hacer. Me transformé en cuervo, miré a los ojos a Hades ; él entendió mi mirada y cabalgó de regreso al campamento. Cuando desapreció entre la maleza, alce el vuelo y volé hacía mi destino con el corazón martilleándome el pecho y la adrenalina recorriendo mi cuerpo. Estaba oscureciendo y las estrellas brillaban, parecían faros guiándome.
Era medianoche cuando llegué; aquel lugar me producía una sensación extraña, ya lo conocía, lo había visto en sueños. El lugar era un pueblo bastante bonito y natural. Volví a mi forma humana, me fije en mi ropa; había cambiado ya no era un vestido lila sencillo ahora era negro y muy elegante. Me llevé las manos a la cabeza pues sentía un peso que antes no tenía; no podía creer lo qué mis manos tocaban parecía una corona- imposible- murmuré. La cogí y la puse a la altura de mis ojos, fue bastante raro porque veía como si fuese de día. La corona era bastante bonita estaba hecha de plata, imitaba las espinas de una rosa tenía obsidianas incrustadas. Las obsidianas eran el centro de pequeñas rosas negras ; nunca vi nada tan majestuoso hasta ese día.
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(El vestido de ______. La foto es orientativa puedes imaginártelo como quieras.)
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( La corona de _____ en vez de cobre es de plata, con las obsidianas en el centro de las flores y las espinas de las rosas. La foto es orientativa en mi imaginación es distinta y es totalmente válido que en tu imaginación también lo sea.)
Avancé un poco; llegué a una especie de plaza, en el momento en el que puse un pie en la plaza unas cuerdas salieron de ningún lado y me atraparon. Vi como unas mujeres me cogían y comenzaron a caminar. Llegamos a un castillo, entramos, avanzaron por unos pasillos y pararon delante de un trono. El trono estaba vacío, a su lado estaba sentada una mujer, me miró y cuando vio mi corona ordenó que me soltaran. Una vez libre desenfunde mi espada y pregunté :
- ¿ Quién sois ?- Apuntaba a la mujer sentada al lado del trono- Necesito respuestas.- Aclaré.
- Soy Ophelia y tendrás respuestas. Mañana se lo explicaremos todo majestad, ahora debe irse a dormir estaré agotada.- Fui a protestar pero me dirigió una mirada haciendo que cerrara la boca y la verdad estaba agotada. Me condujeron a una habitación digna de la realeza, la cama parecía tan cómoda y estaba tan cansada; me tumbé y caí dormida enseguida.
Narra Edmund.
Las tropas de Aslan me liberaron y me llevaron al campamento. Allí Aslan habló conmigo en privado y me fui a descansar; después de hablar con mis hermanas y Peter. Este último me contó lo descubierto sobre ______, la verdad una preocupación me invadió en ese momento. Fui a dormir, aunque lo único que hacía era pensar en _____ y en la Bruja. Conseguí dormirme aún así no pude alejar mis pensamientos. En algunos sueños estaba con ______ en un precioso bosque mientras nos besábamos en otros ella luchaba a muerte con la Bruja. En uno de esos desperté sobresaltado, ya era de día por lo que decidí ir a desayunar. Terminé de desayunar y me ande hacía el campo de entrenamiento.
Narra ______.
Desperté en la habitación del castillo algo desorientada, los rayos del sol me acariciaban la cara mientras los sucesos del día anterior daban vueltas en mi cabeza como un remolino de recuerdos. Llamarón a la puerta, esta se abrió dejando ver a la misma mujer de anoche Ophelia creo.
- Buenos días reina ¿ perdón cuál es su nombre?-
- ______ stone - le respondí confusa por lo de reina. Al parecer la confusión se vio reflejada en mi cara, se acercó, se sentó y empezó a contarme : Usted señorita ______ es la heredera al trono del reino y su pueblo LAS HIJAS DE LA NOCHE . Este es su castillo, el castillo que fue el hogar de sus antepasadas, Aredhel Orion así se llama este lugar. La corona que usted llevaba ayer es la corona real, se perdió hace mucho tiempo o eso creíamos. Al final ha regresado junto a la heredera.- Terminó de contarme; yo trataba de asimilarlo, giré la cabeza y encontré la corona en la mesilla de noche. Ophelia me llevó al comedor donde desayuné y continuó nuestra charla. Me contó todo sobre mi pasado, descubrí mis poderes son: transformación en cuervo algo que ya sabía, control sobre las sombras, control absoluto de la mente, visión nocturna lo cual explica lo de anoche, telequinesis y control sobre los cuatro elementos. Jamás pensé que fuera tan poderosa y mucho menos una bruja reina. También me contó que las brujas viven en armonía con la naturaleza, canalizan su magia y la controlan. Acabó de contármelo todo, yo le conté mi historia y cuando mencioné a la Bruja Blanca vi como apretaba los puños.
Horas más tarde nos preparábamos para ir a la guerra junto las tropas de Aslan. Estaba muy nerviosa, nunca había liderado nada en mi vida y ahora resulta que soy reina de un pueblo y tengo un reino. Ophelia notó mis inseguridades e intentó calmarme. La verdad es que me da mucha confianza, ella desciende de las consejeras de mis antepasadas y quiere lo mejor para mí y para el reino. Creo que en el futuro podremos ser grandes amigas. Me cambié el hermoso vestido por uno más cómo para la batalla. Las brujas son grandes espadachinas a pesar de tener poderes y no necesitar armas, no usan armaduras prefieren estar en contacto con el mundo pues el metal es un aislante del poder que desprende la naturaleza en sí misma. Partimos hacía el campamento de y como somos brujas llegamos bastante rápido.
1128 palabras vale me he pasado un poco pero me encanta escribir este fanfic y estaba inspirada.
