Esa última frase solamente pasaba por la cabeza de Diaval...
-Oye, amigo... ¿te encuentras bien?- dijo Felipe a Diaval.
-¡No lo entiendo! ¡La rara aquí es ella!- dijo el cuervo enfadado.
-Diaval, tranquilízate, ella simplemente está preocupada por ti- dijo Felipe.
-¡La que a cambiado es ella! Antes mataba con la mirada con tan solo una mínima frase que le dijeran y ahora se ríe por ello!? No la entiendo...- dijo él
-Diaval, creo que ella tiene razón, ahora tenéis una hija en común, es normal que haya cambiado, ya a encontrado al hombre que siempre quiso, es normal que haya cambiado- le contestó su amigo.
-Tienes razón pero no tiene porque decirme raro a mi...- dijo él cabizbajo.
-No os enfadéis un día tan especial, ¡vamos! ¿Quieres beber un poco?- le preguntó.
-Tal vez si, así no pienso tanto en lo que acaba de pasar...- dijo él animándose.
-¡Esa es la actitud!- dijo cogiéndole de la mano.
Con Maléfica y Aurora.
-Y por eso lo noto muy extraño últimamente, ni siquiera quiso decirme el porqué estaba tan pensativo!- dijo Maléfica un poco desanimada.
-Tal vez estaba pensado en la bebé, no te desanimes por eso, Hada madrina- dijo la rubia intentando animarla.
-Tal vez pero... creo que se a enfadado por lo que le dije hace unos momentos, no sé...-
-No creo, mira, esas chicas quieren ver a nuestros bebés, vamos!- le dijo agarrándole de la mano-
Horas más tarde.
Felipe y Diaval no estaban nada ebrios, de hecho hasta estaban bailando.
Hasta que una chica joven de unos 20 años se le acercó a Diaval.
-Hola, hola! ¿Tu eres Diaval, cierto?- dijo la chica pegándose a él.
-Lo siento, pero tengo esposa e hija- dijo con voz de borracho.
-Eso no me importa, yo podría ser mil veces mejor que tu esposa...- dijo queriendo besarle.
Diaval intentaba apartarse, pero no podía ya que la chica lo agarraba.
Hasta que una magia verde la apartó.
-No vuelvas a acercarte a mi esposo.- dijo una voz fría.
-¿PERO ERES ESTUPIDA O QUÉ? ¡ME HAS TIRADO LA BEBIDA ENCIMA PEDAZO DE-
Esa misma magia verde hizo que la cogiera del cuello haciendo que no pudiese respirar.
-Mira, entérate bien, vete a buscarte a hombres que no tengan ya a alguien, ¿te has enterado? Y al mío no lo vuelvas ni a mirar- dijo Maléfica seriamente.
La chica asintió ya que no podía hablar, se estaba quedando sin aire.
Maléfica la soltó.
-Guardias, llévensela- dijo Felipe más sobrio.
-Gracias, Lefi- dijo abrazándola.
-¿No estás enfadado?- preguntó.
-¿Por qué debería de estarlo?- preguntó él.
-Por lo de antes...- dijo ella mirándolo a los ojos.
-Claro que no, mi vida, además tenías razón, vamos a ver a Astrid, si?- respondió el cuervo.
Maléfica asintió y fueron.
ESTÁS LEYENDO
Once upon a dream ♡ - Maléfica y Diaval
Action¿Un amor entre un cuervo y una Reina del Mal? Diaval estaba enamorado de su Ama desde hace mucho tiempo, pero nunca creyó que ese amor se fuera hacer realidad después de todo, él sabía como era Maléfica y si se le atrevería a declararse posiblemente...