Historias románticas de vampiros y criaturas mitologicas entre chicos y amores entre chicas, donde cada una de ellas muestra cómo tanto estas criaturas de la noche como así también los humanos pueden llegar a sentir el amor y la pasión en todas sus...
En la época medieval, en un pequeño pueblo rodeado de bosques oscuros y misteriosos, vivía un joven llamado Jacob. Éste era un muchacho humilde y responsable, que se ganaba la vida trabajando en la posada del pueblo.
Una noche, mientras Jacob estaba limpiando las mesas de la posada, un hombre extraño y elegante entró llevando consigo un aire de misterioso peligro. Era un vampiro, un ser mítico que se alimentaba de la sangre de los humanos.
El vampiro se llamaba Nicolás y se había enamorado a primera vista de Jacob. Nicolás se acercó a la barra, usando su aterciopelada voz le pidió a Jacob una habitación para pasar la noche.
Jacob no sabía que Nicolás era un vampiro y, a pesar de su aspecto tenebroso, se sintió atraído por él. El joven humano le mostró una habitación en el piso de arriba y Nicolás la aceptó con agrado. Pero lo que Jacob no sabía es que Nicolás tenía otros planes en mente.
Durante las siguientes semanas ambos jovenes solían frecuentarse comversando hasta altas horas de la noche. Jacob sentía que el tiempo volaba cada vez que estaba con su gran amigo nocturo de quien empezaba sentir algo más profundo que tan solo una simple amistad. Así transcurrieron tres meses, fue cuando Jacob supo que se había enamorado profundamente de Nicolas quién le confesó a Jacob que era un vampiro, pero Jacob no se asustó.
A pesar de las diferencias entre ellos, el amor que sentían era más fuerte que todo lo demás.
Sin embargo, la felicidad de la pareja no duró mucho. Un día, cuando Jacob estaba trabajando en la posada, un grupo de aldeanos entró y lo acusó de tener relaciones con el diablo por estar enamorado de un vampiro.
Los aldeanos amenazaron con quemar la posada si Jacob no abandonaba al vampiro. El joven humano, aterrorizado, corrió a la habitación de Nicolás y le contó lo que estaba pasando.
Nicolás sabía que los humanos nunca aceptarían su amor por Jacob, por lo que decidió dejar el pueblo y huir con él a otro lugar donde pudieran ser felices juntos.
Pero cuando Nicolás y Jacob estaban escapando por el bosque, los aldeanos los encontraron y los rodearon. Nicolás, intentando proteger a Jacob, se enfrentó a los aldeanos y luchó valientemente, pero fue herido de muerte.
Jacob, viendo que su amado estaba muriendo, se arrodilló a su lado y lo abrazó.
Nicolás le dijo a Jacob que lo amaba y que estaba agradecido por haberlo conocido. Jacob lloró y le prometió que siempre lo recordaría y lo llevaría en su corazón.
Con su último aliento, Nicolás le dio un beso a Jacob en los labios y murió en sus brazos.
Jacob, desconsolado, enterró a Nicolás en el bosque y se marchó del pueblo, nunca más volvió.
El amor entre el vampiro y el joven humano había terminado de manera trágica, pero el recuerdo de Nicolás viviría para siempre en el corazón de Jacob.
FIN
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