Little Lupin - 𝙎𝙞𝙧𝙞𝙪𝙨 𝘽𝙡𝙖𝙘𝙠

t h i r t e e n

Noviembre 02 1976

k i a r a

La noticia de que la hermana menor de Remus Lupin y Sirius Black estaban saliendo, corrió por todo Hogwarts como si fuese polvo flu.

Kiara notaba como varias chicas la observaban con admiración y un grupo aún mayor, con envidia y sabía que era porque ella había logrado que el indomable e infame Sirius Black sólo tuviera ojos para ella.

Ya habían pasado tres semanas desde que se había hecho oficial y las personas no paraban de hablar de ello. Murmuraban cada vez que los veían pasar juntos tomados de la mano y aún hacían gestos de sorpresa cuando demostraban su amor en público.

Ahora, Kiara se encontraba bajo un árbol y una pelirroja frente a ella.

—Kia, te prometo que no estoy planeando nada extraño. —dijo Lily al ver como Kiara la miraba con sospecha— Sólo quiero que me acompañes a dejarle mis apuntes al profesor Slughorn.

—Es sábado, ¿no puedes esperar al lunes?
Kiara se encontraba un poco molesta, era su cumpleaños y apenas había cruzado unas cuantas palabras con Sirius.

Lo había visto en el desayuno, le había depositado un pequeño beso en los labios y uno en la frente para luego entregarle un bonito collar de perlas e irse junto con James y Peter a algún otro lado, ni siquiera se animó a preguntar a dónde irían. Esperaba que su novio pasara más tiempo con ella en su cumpleaños y más aún después de que era de lo único que Sirius había estado hablando durante semanas.

Su hermano se había quedado con ella gran parte del día hasta que James regresó al Gran Comedor apurado, diciendo que necesitaba a Remus con urgencia, a lo que Kiara simplemente se encogió de hombros y salió al patio para sentarse debajo de un árbol y leer un poco, hasta hace unos minutos atrás, cuando Lily llegó con una mirada suplicante pidiendo que la acompañara al despacho del profesor de pociones.

—Bien, vamos.

Se levantó con ayuda de Lily y caminaron juntas hacia las mazmorras.

—¿Cómo la estás pasando? —preguntó mientras rodeaba sus hombros con su brazo— Lamento no haber estado contigo, sé que prefieres estar sola o con Remus en este día.

—No te angusties, Lils. —le regaló una sonrisa— Gracias por respetar mis deseos.

—Algo te molesta, ¿no es así?

—No he visto a Sirius en casi todo el día, supuse que estaría conmigo, o por lo menos eso me hizo creer.

Lily hizo una mueca parecida a la que hacía cuando estudiaba para un examen difícil. Había algo que no le estaba diciendo a Kiara, la cual la miró con sospecha.

—Tú sabes algo, te conozco, haces esa cosa con tus labios cuando tienes algo que decir, pero no puedes —dijo deteniéndose en seco en medio del pasillo que llevaba a las mazmorras y con los ojos entrecerrados con una mirada acusadora.

Antes de que Lily confesara lo que tenía entre manos, Kiara volvió a hablar.

—Espera, este no es el camino a la oficina del profesor Slughorn.

—No, me descubriste —se encogió de hombros cuando llegaron a la gran puerta que daba a la sala común de Slytherin.

Justo en ese momento, la puerta se abrió y Regulus salió de ella con un paquete entre las manos y una media sonrisa en el rostro.