Capítulo XV. Un Sacrificio Justo, Parte II

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Mystic Falls: Escuela Salvatore

Habían pasado una horas, Hope había intentado convencer a Alyssa de acabar con ese absurdo plan de desvincular el mundo prisión de Kai, a pesar de que logro convencerla, ya era demasiado tarde. El hechizo estaba hecho, Kai Parker ya no estaba ligado al mundo prisión, por lo que este colapsaría en un par de horas.

Hope busco desesperadamente un modo de sacar a los Saltzman de ese lugar, tenia algunos hechizos en mente, pero en todos ellos, una persona debería quedarse como ancla del hechizo y quedaría atrapado en ese mundo antes de su destrucción, por lo que decidió pedir ayuda a su tía Freya. Saco su teléfono para márcale, camino de un lado a otro por la oficina de Alaric sosteniendo el teléfono. Keelin se quedo unos minutos en la biblioteca con su esposa, pero ella salió para dejarla aclarar su mente por lo que se dirigió a revisar a su hijo, se detuvo al escuchar sonar un teléfono, reviso su bolsillo viendo que era el teléfono de su esposa el cual le había guardado, al ver que era Hope, lo tomo para contestar.

-¿Hola, Hope? ¿Estas bien?­- pregunto mordiendo su labio ansiosa.

-Tía Keelin, hola... No, estoy bien, esta todo bien...- afirmo negando con la cabeza -¿Donde esta mi tía Freya?

-Esta ocupada ahora, por dudo que lo este para nuestra amada sobrina- dijo con alegría soltando una pequeña risa, la cual se borro al notar el rechazo de su parte.

-Se que tienen a mi amiga ahí- afirmo en un tono de decepción -No me importa lo que crean de ella, no es una amenaza y quiero que la suelten ahora mismo- se cruzo de brazos mientras escucha como suspira -Por favor-.

-Haré lo que pueda... Mira...- giro a los alrededores para asegurarme que nadie escuchará -Kol esta furioso al igual que mi esposa, el lugar esta tenso por lo que.... Habrá mucho drama esta noche, pero me encargaré... Lo prometo linda, nada le ocurrirá-.

-Gracias, tia Keelin- agrego aliviada, un pequeño silencio se hizo presente.

-Te quiero Hope- dijo con una sonrisa al recordar cuando Hayley le había ayudado a escapar -Eres tan parecida a tu madre ¿Lo sabias?-.

-Eso espero...- confeso.

-Lo eres... Y también te pareces a tu padre, siempre buscando proteger a los suyos a toda costa...- se endereza en la mesa y sonríe -Estarían orgullosos de ti, de la persona que eres-.

Al escuchar esas palabras, los ojos de Hope se cristalizaron, mordió su labio al sentir un nudo en la garganta, quería hablar pero no sabia como hacerlo sin dejar salir un sollozo por lo que guardo silencio. Keelin pudo notar ese silencio, aun mantenía la sonrisa cuando escucho los tacones de Rebekah acercándose.

-Debo irme, linda... Esto va a comenzar, te quiero-.

-Y yo a ti- confesó antes de colgar la llamada. Recordó un modo de revertir el hechizo y se apresuró a ir a buscar uno de los grimorios de su abuela.

Nueva Orleans

Rebekah camino por el pasillo seguido por su esposo quien le sostenía de la mano, se detuvieron al mirar a Keelin apagar el teléfono.

-¿Todo en orden?- pregunto Rebekah mientras acomodaba su cabello.

-Hope llamo- miro a ambos y suspiro -Sabe que ella esta aquí y quiere que la dejemos libre. Parece estar preocupada y asegura que no es peligrosa-.

El Legado Original (Kol Mikaelson) Donde viven las historias. Descúbrelo ahora