Viaje En El Tiempo 💎

Ilusión Del Sol 💎

Aquello se hacía eterno debido a que todo el panorama era igual, el mismo escenario con lod espejos en los muros de aquel mortal laberinto,en una noche sin fin donde jamás podrían ver la luz.

En verdad necesitaban algo más que valor para salir ilsesos de ese escenario aunque nada dijesen ningúno de ellos.

Sin embargo ahora el mismo Naruto sentía el impulso de obtener el éxtio como los chicos del futuro. Luego de haber experimentado aquello, ilusión o no, había tomado consciencia de lo seria que era su misión.

Sasuke también había llegado a la misma conclusión, tomandose esa travesía desde una perspectiva diferente.

Por el momento Orochimaru y su sed de venganza quedaron en segundo y hasta en tercer lugar. No le interesaba indagar el motivo de dicha decisión.

Ahora era parte del equipo 7 y como tal enfrentaría los problemas y a los adversarios unido a sus compañeros.

De reojo miraba a Naruto sintiendose felíz de volver a compartir con él aquello. Su amigo, más que amigo su hermano aquel que jamás lo traicionaría.

Al ver al nuevo equipo 7 Sasuke tenía la certeza de que todo se solucionará en el futuro, y podrán volver a ser los grandes amigos que una vez fueron. Sasuke se sorprendiò a sí mismo deseando que eso pase y más pronto de lo que en verdad sucedería.

Naruto se le acercó y como era su costumbre empezó a hablarle de todo un poco sin dejar de sonreír. El pelinegro le fue respondiendo sin problemas entablando así una conversación de amigos, alegrando al rubio mas de lo que el mismo emo pudiese llegar a imaginar.

En tanto, Mitsuki iba avanzando con prudencia debido a lo peligroso que en verdad era aquel laberinto. No obstante, sus ojos se cruzaron con una singular imagen en uno de los espejos.

Era la de Boruto brillando con una peculiar luz dorada.

¿Boruto? ¿Qué sucede?

Para cuando el peliceleste se dió cuenta ya era tarde. Había caído en un poderoso genjutsu del cual le resultaría casi imposible poder escapar.

Ahora se encontraba en medio del bosque, frente suyo estaba Boruto mirandolo con cara de inocente. Le sonrió al verlo al tiempo que le decía:

— Mitsuki, al fin llegas amigo — el peliceleste vió cómo una luz dorada emergía del mismo cuerpo de Boruto para envolverlo completamente — ¿Qué pasa amigo? ¿Por qué me miras así?

Mitsuki retrocedía asombrado abriendo enormemente sus ojos, ya que esa luz que irradiaba Boruto iba derritiendolo todo a su alrrededor.

El peliceleste sentía un intenso calor que lo hacía sudar por cada poro de su piel. Y por más que quería alejarse le resultó imposible, debido a que sus pies y piernas habían sido atrapados por lianas que salían de la tierra envolviendolo.

— ¿Qué pasa Mitsuki? ¿Acaso no decías que yo era tu sol? — Boruto sonrió malignamente — Dejame decirte que estabas en lo cierto. Soy tu sol y como tal te quemaré ¿sabes por qué? Porque te acercaste demasiado a mí.

Mitsuki hizo los sellos y tras cerrar los ojos exclamó con desesperación:

— ¡Liberar! — pero no sucedió nada — ¡Liberar!
—¿Qué haces Mitsuki? — dijo Boruto acercandosele — ¿Por qué buscas escapar de mí?

— ¡Liberar! — la desesperación iba aumentando en el pelicelste — ¡Por dios! ¡Liberar!

No solo no funcionaba, sino que empezaba a derretirse sintiendo unos dolores intensos, que sus pulmones no fueron suficiente para los alaridos que empezaba a dar Mitsuki.

Boruto colocó sus manos sobre las mejillas del peliceleste al tiempo que le decía:
— Ven conmigo, es mi poder Mitsuki. Solo ven.

Los intensos dolores amenazaban con enloquecerlo, pero llegó un momento en que todo desaparecía. El calor, los dolores, el bosque, el fuego, la luz. Todo.

Mitsuki fue escuchando la voz de su verdadero sol quien intentaba salvarlo. Sintió el chakra de Boruto fuir en su cuerpo al mezclarse con el suyo propio. Pronto lo vió allí, de pie frente suyo, colocando sus manos en las mejillas del peliceleste.

— ¡Mitsuki! ¡Oye! ¡Mitsuki! ¡Reacciona por dios! — Boruto estaba en extremo proeucpado debido a que podía sentir el intenso dolor de su amigo — ¡Mitsuki!

Mitsuki vio el laberinto de nuevo, detrás de Boruto pudo ver cómo el espejo se agrietaba y la imagen de su interior se desvanecía.

— ¿B-Boruto?
— Mitsuki — el rubio veía cómo su amigo recuperaba sus colores en su rostro, pese a ser naturalmente pálido — Al fin reaccionas — Boruto lo abrazó con ternura mientras las lágrimas humedecían su rostro — Me asustaste Mitsuki.

El peliceleste le respondió aquel abrazo para terminar de alejar de su ser los vestigios de ese genjutsu. Nadie lograría alejarlo de su sol, nadie.

— Tranquilo mi sol
—¿Cómo voy a estar tranquilo si estuviste al borde de la locura total?
—¿Eh? Pero....
— El Jogan me lo mostró todo.

— Boruto — esta vez fue Mitsuki quien lo abrazó con fuerza — Yo jamás me alejaré de tí ¿entiendes amigo? Jamás, no lograron separarnos los Ootsutsukis, menos lo harán los genjutsus de este lugar.

Naruto y Sasuke eran testigos de la intensa unión que Boruto y Mitsuki tenían. Unión que había sido afianzada tras vivir intensas tragedias. Eran una verdadera familia.

Naruto sonreía al verlos ya que eran el reflejo de su gran deseo con Sasuke y Sakura. Ser una familia auténtica y apoyarse de forma incondicional los tres.

Pero se esforzaría para conseguirlo. Al fin de cuentas la presencia de Boruto y Sarada era la prueba de que había tenido éxito.

Cuamdo Mitsuki se hubo recuperado recién Naruto dijo:

— ¿Estás mejor Mitsuki?
— Si, gracias — el peliceleste sonrió como era su constumbre.
— Andando entonces — dijo Sasuke aparentando indiferencia.

Pero Boruto lo sujetó del brazo con fuerza deteniéndolo. Ambos se miraron, el rubio estaba preocupado en verdad.

— Maestro, este lugar es peligroso en extremo. Mitsuki es experto en genjutsus. Jamás habría caído en facilmente en uno y sin embargo casi enloquece....

— No me pasará nada Boruto — Sasuke se hizo soltar — Después de todo tengo el Sharingan

— No eres poderoso maestro, no aún. En la época de donde vengo sí que lo eres, pero ahora no...aún te falta camino por recorrer.

— No moriré aquí Boruto
— Hay cosas peores que la muerte misma maestro — diciendo aquello Boruto le dió una palmada en el hombro derecho a Sasuke — Pero descuida, te protegeré. Ahora sí, andando.

— Boruto...tú... — empezó a decir Mitsuki quien se dió cuenta de lo que su amigo acababa de hacer.

— Andando Mitsuki, no tenemos mucho tiempo. Recuerdalo — lo interrumpió Boruto.

Así los cuatro siguieeron avanzando, ya estaban en la mitad del laberinto de espejos. Sin que lo sepan habían avanzado bastante.