Viaje En El Tiempo 💎

Decepción 💎

Hima aún recordaba el intenso dolor que vio reflejado en el rostro de su hermano al oír la negativa de su padre.

Encima fueron testigos del momento en que Naruto ordenaba no dañar a Kawaki, más bien tratarlo y mantenerlo bajo estricta vigilancia.

Hima sabía que tras la batalla que ese traidor tuvo con su hermano Boruto no solo perdió sino que el rubio eliminó todo rastro de poder Ootsutsuki del cuerpo de Kawaki.

Ahora que Boruto habìa despertado el poder total del Jogan era algo que podía hacer. Kawaki volvía a ser un humano.

En ese sentido se volvió inofensivo. Pero ella y su hermano estaban dolidos por todo el daño que ese traidor les ocacionó.

Si la aldea estaba destruída, en gran medida se debía a las egoístas decisiones que Kawaki tomó en su momento. Ada había perdido el poder de su ojo también gracias al Jogan de Boruto.

Ahora ella era una chica comun y corriente que padecía una condena perpetua en la prisión de Konoha. Si bien eso era lo correcto, Hima y Boruto sabían que ella había re-escrito los recuerdos de todos por causa de Kawaki.

Es más, fue el mismo Kawaki quien uso el poder de Ada para hacer realidad su propio deseo de ocupar el lugar de Boruto intercambiando así los roles.

Naruto lo sabía y aún así eligió seguir siendo Hokage de konoha y proteger a Kawaki.

Aquello ni Boruto ni Hima, ni siquiera Sarada ni ahora Mitsuki quien volvía a ser libre para hacer lo que en verdad él quiería hacer, pudieron entenderlo.

Hima recordó cómo su papá quiso explicarse con todos ellos, en especial con sus hijos pero ni ella ni su hermano quisieron escucharlo.

— Oigan chicos no es que no quiera dejarlo todo e irme con ustedes. Es que no puedo hacerlo, sigo siendo el Hokage y la aldea está en la peor de las situaciones. Entiendan que no es el momento...

—¡¿Y cuándo será ese dichoso momento Naruto?! — exclamó Boruto ya que no podía llamarlo padre — ¡Desde que te hiciste Hokage nos diste la espalda a Hima, a mamá y a mí. Tú familia!
— Boruto lamento tanto lo que pasó hijo....

— No Naruto, no lo lamentas. De hecho no tienes idea lo que tuve que pasar. Tu experiencia fue hermosa en comparación con la mía. Y aunque esto no es una competencia, solo quiero que sepas que una cosa es ser odiado por los de la aldea donde vives y otra muy distinta es ser odiado por el mundo entero.

Boruto lloraba intensamente aquella tarde tras ser dado de alta. Estaba junto a Sarada, Himawari, Hinata , Naruto y Sasuke. No se le acercó nadie más debido al expreso pedido del Hokage.

— Todos, absolutamente todo el mundo shinobi buscaba a mi hermano para matarlo ¿sabes por qué? Por tí Naruto — prosiguió Hima — Porque todos estaban convencido de que él era el extraño que llegó a Konoha y que recibió tu protección. El extraño desagradecido que acabó con tu vida y la de tu esposa.

A Naruto como a Hinata les asombraba y dolía intensamente ver cómo sus hijos ya no les decían papá ni mamá. Todo había cambiado. Absolutamente todo.

— Boruto, Himawari, chicos... — murnuró Hinata llorando — Entiendan a su padre...él..

—¡¿Qué es lo que debemos entender?! — exclamó una furiosa Himawari a su madre — ¡Son ustedes quienes deberían entender!

— Séptimo — dijo Sarada dolida — Boruto tuvo que soportar el desprecio de Mitsuki, aquel que solo vivía para verlo feliz. Quien era su más leal amigo, y ahora solo planeaba matarlo utilizando todo su poder. Cada vez que se encontraban lo atacaba con su modo sabio. No se si llega a entenderlo Séptimo.

— Naruto — dijo Boruto dolido — Quiero recuperar a mis padres, quiero que Hima vuelva a sonreír con la misma intensidad que antes de la llegada de Kawaki a nuestras vidas. Deseo...deseo poder disfrutar de mi papá como solía hacerlo cuando aún no eras Hokage....¿tanto te cuesta dedicar tu tiempo a nosotros...tus hijos?

— Padre — Dijo Sarada mirando a Sasuke — Tú y mamá vengan con nosotros también. Los necesitamos. Boruto te necesita a tì también, después de todo eras su maestro ¿no?

— Lo sentimos chicos pero no podemos dejar Konoha como está ahora e irnos con ustedes — fue la dura respuesta de Naruto — Entendemos todo lo que dicen pero también entendemos las necesidades de la aldea.

— Dennos un tiempo — dijo Sasuke — Un año, para que Konoha se recupere al completo y entomces sí, iremos a donde sea que ustedes quieran

— Exacto — prosiguió Naruto — Necesitaré ese tiempo para reparar todo el daño que Konoha sufrió y preparar a mi sucesor. Luego dejaré el puesto de Hokage y nos iremos juntos donde ustedes decidan. En tanto quedense aquí y ayudennos a reparar a la aldea que nos vió nacer a todos ¿qué dices?

La decepción que tanto Hima como Sarada vieron en el rostro de Boruto les llegó a lo más profundo del alma. Ellas sí podían darse cuenta de los sentimientos del rubio.

Habían desarrollado un lazo de unión tan grande entre los tres durante esos tres años, que se volvieron muy unidos.

Así también habían extrañado sobremanera a Mitsuki, en especial Boruto quien sentía cómo su alma se iba despedazando al tener que esquivar sus ataques mortales cada vez que se veían.

Fue en ese momento en que ellos se decepcionaron de sus padres y eligieron irse de Konoha para siempre, imposibilitandoles a sus padres el poder detectarlos, rastrearlos y encontrarlos durante todo un año.

Hasta que Sarada le permitió a su madre dar con ella hacía unos días atrás. Pero los pensamientos de Hima fueron interrumpidos al llegar a Konoha y darse con menudo espectáculo.

Abrió los ojos enormemente ya que no entendía qué había pasado ahí. Todos estaban convertidos en esculturas de cristal violeta. Todos los habitantes y los edificios.

Aquella era una aldea fantasma donde el único que circulaba por sus solitarias calles era el viento que arrastraba las hojas caídas de los árboles.

—¿Qué....qué pasó aquí? ¿Dónde están? Mitsuki, Sarada...hermanito ¿qué les pasó a todos?