Sentimientos Encontrados [Slayers]

4° parte: explicaciones nocturnas

  Lina estaba embriagada con el aroma que despedía Xeros, y es que éste perfume no se parecía a ningún otro que haya olido jamás, era un aroma indescriptible que la volvía loca, mientras que sus ojos la atrapaban y le hacían perder la cabeza.

  Xeros la observó con mucha atención desde aquellos siete centímetros de lejanía, siete centímetros que impedían que sus labios se unie–... digo, siete centímetros de distancia que había entre su rostro y el suyo, obviamente, enrojeció más que antes.

— Y–ya no puedo… no puedo seguir leyendo en tu interior...

— ¿Q–qué?

  Xeros iba a decir algo más, pero justo en ese momento, se escucharon pasos cerca, quizá muy cerca de la habitación.

— Upss, hora de irme, ¡Adiós Lina! —Xeros se desvaneció rápidamente con una gran sonrisa de satisfacción, dejando vacío en su lugar, pero no un vacío cualquiera, era como si nunca hubiese estado allí.

— ¡Eh! ¡No te vayas! —gritó. Alcanzó a escuchar su característica risa antes de que terminara de desaparecer— ¡Ése Maldito...!

  Al instante Gourry entró estrepitosamente en la habitación, con la preocupación desbordando en el rostro.

— ¿Lina? ¿Qué ha ocurrido? ¿Has tenido una pesadilla?

— ¡G–Gourry! N–no, ¡Digo! Si, algo así –tartamudeo, la pobre chica ya se estaba ruborizando de nuevo, una sensación para nada agradable. Al menos para ella— Me has asus-... sorprendido, idiota!

"Estúpido Xeros, estúpido Gourry"

— Lo siento, Lina, no era mi intención asustarte —el espadachín se sentó a los pies de la cama en la que se encontraba Lina, la cual estaba... aún sentada, cómo no— y... ¿De qué iba tu sueño, pesadilla o lo que haya sido para que gritaras de ese modo?

— N–no, nada de que preocuparse, jaja —la pobre Lina estaba muy nerviosa— Y–ya me siento mejor, ¿Te parece si n–nos vamos a dormir a–ahora?

  Gourry la obser-... no, no la observó, mejor dicho, la escaneó con la mirada— Está bien, recuerda que, si tienes algún problema, puedes decírmelo, ¿Si? Quiero que confíes en mí.

— C–claro Gourry, realmente te tengo confianza, pero ahora estoy muy cansada, así que... ¡Oyasumi!*

— Oyasumi, Lina —una deslumbrante sonrisa fue el sustituto del típico beso en la frente, algo que sonrojó nuevamente a nuestra heroína, esperando que fuese la última vez que la sangre se agolpe en sus mejillas... Al menos por esa noche.

  Gourry salió de la habitación de Lina, a pesar de eso, ésta esperó a escuchar el sonido de la puerta al cerrarse para volver a acostarse para, ahora sí, definitiva y finalmente, dormirse profundamente.

♥♦♥♦

  Gourry se había despertado a medianoche sin motivo aparente, estaba a punto de volver a dormirse cuando escuchó extraños sonidos en la habitación contigua, se levantó lentamente, "sin hacer ruido", se quedó frente a la puerta de Lina y apoyó su oído intentando escuchar lo que estaba ocurriendo allí dentro.

— ¡Eh! ¡No te vayas! —esa era claramente la voz de su pechiplana amiga.

  Fue en ese momento cuando decidió entrar, haciendo más ruido del esperado... aunque, en realidad, era de esperarse viniendo de Gourry.

— ¿Lina? ¿Qué ha ocurrido? ¿Has tenido una pesadilla?

  Al entrar, vio a Lina sentada en la cama con el pijama que le había obsequiado Amelia, a decir verdad, realmente le sorprendió el hecho de que lo haya usado, ya que la parte de abajo era una falda bastante... corrección, una mini falda muy provocativa, quizá por eso decidió no levantarse, para no exponer sus piernas, aunque decidió que sería mejor no preguntar.

   Lina lo miró por unos segundos— ¡G–Gourry! N–no ¡Digo! Si, algo así. ¡Me has asus-... sorprendido, idiota!

   Gourry sonrió ligeramente al ver a su amiga así de... ¿Nerviosa?— Lo siento, no era mi intención asustarte —se sentó a los pies de la cama de su protegida para entablar una pequeña conversación... Agh, a quién engañaba, sólo quería terminar con el pequeño interrogatorio— y... ¿De qué iba tu sueño, pesadilla o lo que haya sido para que gritaras así?

— N-no, nada de que preocuparse, jaja. Y–ya estoy mejor ¿Qué te parece si n–nos vamos a dormir a–ahora?

— Está bien, recuerda que, si tienes cualquier problema, puedes decírmelo, ¿Si? Quiero que confíes en mí.

  La observó de arriba a abajo detenidamente en busca de alguna inquietud, pero no encontró nada... O quizá ella no dejó que viese nada.

— C–claro Gourry, realmente te tengo confianza, pero ahora estoy muy cansada, así que... ¡Oyasumi!

— Oyasumi, Lina —le sonrió tiernamente, haciendo que Lina se sonrojase por última vez en esa noche.

  Dicho esto, nuestro rubio guerrero se fue a dormir sin despertar hasta la mañana siguiente...

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Bien... ¡Capítulo editado! Sé que me hé demorado mucho, pero espero compensarlo.

*Oyasumi: "buenas noches" en japonés*

¡Seguid leyendo!

Nos leemos! >:3