No te enamores de Eleaonor

10

Capítulo 10

(...)

Desperté por el gran grito de mi madre en la cocina. Un delicioso aroma se sentía por todo el pequeño complejo de departamentos. Mi madre era chef así que sin dudas comenzaría el día de forma espectacular. Comiendo delicias....

O eso suponía, ya que mi madre se acercó al sillón y con grito me obligó a levantarme del cómodo sillón grisáceo.

— ¡Eleaonor! ¿Qué te dije de llegar después de las 22:00 a casa? — Me habla, me pegué un gran susto cuando te encontré desparramada en sofá, encima ya es la hora de que entres al instituto, cámbiate rápido o no llegarás.

Ay mamá, si sólo supieras porque llegué tan tarde anoche, puse mis pies sobre el suelo y mis brazos sobre mis rodillas sosteniendo mi cabeza, deseando y pensando que solo había sido un desafortunado sueño o alguna tonta escena que vi en televisión e intenté copiar.

No lo sabía, ni quería saberlo.

— ¡Dios mío Eleaonor! ¿Qué haces? Ya vete.

Y sin darme tiempo a pensar demasiado me tomó del brazo y me sacó del departamento, nuevamente estaba despeinada, sin lavarme los dientes y con toda la ropa arrugada, ¿Por qué me hacen esto a mí?

(...)

Corría por los pasillos del instituto, estaba poblado de gente debo decir, pero aún entre aquella marea yo me dedicaba a correr, debía llegar o rompería mi asistencia perfecta.

Hasta que sí, choqué fuertemente con alguien y caí de trasero al suelo. Me lo sobé por el dolor y abrí mis ojos - los cuales había cerrado al caer - y observé a la persona frente a mí.

— Cat, lo siento muchísimo, no veía por donde venía.

— Ya lo noté — Ríe y me muestra su sonrisa. — ¿De dónde vienes tan apurada? — Pregunta curiosa y yo no sé que responderle

— De... Em... El profesor de física me pidió que le llevara todos los libros de la clase para tomar nota de cada uno — Digo mordiendo mi belfo inferior com fuerza, esperando a que mi mentira fuera lo suficientemente creíble para mi amiga.

— ¡Ohh! Por eso ibas tan apurada.

Una pequeña anotación del profesor de física, es la persona menos paciente que conocerás alguna vez.

Asiento con mi cabeza rápido y me tiro hacia un lado para continuar mi camino, cuando Cat me toma del brazo, deteniéndome.

— ¿Has visto a Chris?

Y me quedé quieta cual estatua en mi lugar

— ¿Por qué habría de verlo? ¡Puff! — Trago grueso y niego con la cabeza

— Tienes razón — Me comenta pensativa.

No podía evitarlo estaba curiosa de qué rayos quería Cat con él.

— ¿Quieres ir a la cafetería? — Pregunto intentando captar su atención.

— ¿No que debías ir con el profesor de física? — Se cruza de brazos y me observa de arriba hacia abajo. — Eleaonor Watson ¿Qué ocultas?

¡Rayos! olvidaba que Cat sabía leerme como un libro abierto.

Rasco mi nuca y observo hacia el costado.

Ella me sigue con la mirada con ojos entrecerrados. Luego de unos momentos su rostro se iluma y una sonrisa macabra aparece en su rostro.

Da un pequeño chasqueo con sus dedos y comienza a reir.

— No me digas — Comienza — ¡No puedo creerlo! ¡Alguien te besó!

Dios mío ¿Tan fácil soy de leer?

Me toma del brazo y comienza a caminar conmigo entre suspiros y griterios.

— Dime ya, ¿Cómo fue? ¿Era lindo? ¿Se te confesó de forma romántica o fue tosco y grotesco?

— Bueno...

— No, no me cuentes todavía, ésto amerita más. — De pronto se para frentre a mí — Tenemos que tener una noche de chicas, una pijamada.

— Cat, ¿Acaso tenemos 10 años o algo así? — Pregunto indignada.

Nos quedamos en silencio por unos segundos mirándonos la una a la otra hasta que un grito se oye a mi espalda.

— ¡Eleaonor!

¡Oh no! Esto es malo.

¿Quién es aquella persona que grita con fervor mi nombre como si fuera que estamos solos en el universo? Es Christopher, claro.

Si había algo o alguien que podía arruinar mis planes era él sin duda alguna. Todavía debía juntarlo con Cat.

— Chris — Susurra mi amiga arreglando su cabello rizado. — Justo estaba buscándote — Empuja mi hombro y se sitúa frente al chico mientras yo chocaba contra los casilleros.

— ¿A mí? — Pregunta él con confusión y ve como ella asiente con su cabeza — Lo siento, tengo asuntos que arreglar con Eleaonor.

— Oh — Susurra — Esperaba que pudieramos pasar un poco de tiempo juntos tal y como ayer — Envuelve su cabello en su dedo medio. — ¿Puedo saber qué asuntos tienes con El?

¿Ayer pasaron tiempo juntos? O sea ¿Estaba jugando a dos puntas? Fruncí mis cejas al instante

— Bueno verás — Comienza — Ella salió corriendo luego de que yo....

Y corro a tapar su boca con ambas manos. Abro grande mis ojos y niego con mi cabeza disimuladamente, ganándome un ceño fruncido.

— ¿Luego de qué...?

Empujo a Chris y me sitúo frente a Cat con una sonrisa forzada y comienzo a reír cual desquiciada.

— Salí corriendo luego de robar su libro de física, él no quería dármelo y yo lo necesitaba para el profesor.

Cat me observa desconfiada.

— Ahora si nos disculpas, nos retiramos.

Y antes de que mi amiga pudiera emitir palabra salgo a correr tirando al alto chico del brazo derecho.

(...)

— Dios ¿Es que acaso no sabes cerrar tu bocota? — Digo luego de soltarlo y pararnos frente a un árbol fuera del instituto.

— Lo siento, ¿Te molesta? — Pregunta rascando su nuca. — Supongo que debe ser molesto de mi parte, no lo pensé así, lo siento.

— Está bien...

Y nos quedamos en un silencio sepulcral mirando el suelo.

— ¿Y vas a darme una respuesta o debo seguir corriendo detrás de ti?

(...)

Holii