No te enamores de Eleaonor

14

Capítulo 14

Demos unos cuantos pasos hacia atrás y recordemos la noche en la que el "suceso" había ocurrido.

Estábamos pegados, con las respiraciones mezclándose y nuestras miradas penetrantes que daban a entender todo.

Dí un suspiro y bajé mi cabeza, es entonces cuando escuchamos a Catherine acercarse a nosotros. Christopher sin querer lanza el cesto de basura, logrando que una rata saliera de allí.

Estuve a punto de pegar el grito de mi vida, claro si hubiera podido, ya que nuestro querido protagonista había ahogado mi grito de puro terror.

¿Cómo?

¡CON SUS JODIDOS LABIOS!

Una de sus grandes manos acarició tiernamente mí mejilla mientras la otra me sostenía fuertemente de la cintura. Primero fue un pico, pero luego se tornó más salvaje, sentí su lengua entrometerse en mí boca y jugar con la mía.

Era un beso que él controlaba. Sentí como me apretó más contra su cuerpo y al instante moví mi rostro hacia un lado y comencé a corresponder su feroz beso, nuestras lenguas hacían un baile sin igual, mordía mi belfo inferior y me controlaba, me enseñaba debo decir.

Sí tenía 17 malditos años y nunca había besado a nadie en mi vida. Era una persona muy tímida y siempre fui la secundaria en los guiones, así que nadie me notaba al menos hasta que enlazaba a los personajes principales.

Por lo que nunca hubiera imaginado que él me besaría, que alguien me eligiera a mí por sobre la protagonista.

Es entonces cuando abro mis ojos con grandeza y empiezo a hacer el beso más suave hasta el punto que acabó. La voz de mi preciada amiga me había sacado de mi ensoñación.

Mientras nosotros teníamos nuestro primer beso en un horroroso callejón lleno de basura, Catherine se encontraba en el medio de la calle gritando por el susodicho.

Hasta que parece que las luces en su cabeza se entendieron y decidió tomar su teléfono.

¡Oh no! Seguramente lo usaría para llamar a Chris y el muy tonto lo tendría en encendido con el volumen al 100 por ciento.

— Tranquila — Susurró en mi oído — Yo te cubro.

Y no sin antes guiñarme el ojo izquierdo - de una muy extraña forma - se alejó a paso lento, intentando fingir que había estado en el comercio de la esquina y no besuqueándose conmigo en un horroroso callejón.

Veo a Catherine comenzar a dar pequeños saltitos e ir corriendo hacia Christopher. Es entonces cuando decido salir con parsimonia del callejón y evitar que me vean subir las escaleras hasta mi departamento. Oigo una voz, una muy conocida voz.

Apretó fuertemente mis manos y tenía una mirada de odio profundo, ¿Así que le gustaba jugar? Bueno, jugaríamos pero con mis reglas.

Me doy media vuelta y doy una brillante sonrisa a ambos, Chris estaba parado con las manos en los bolsillos y una bolsa llena de dulces, mientras que Cat estaba colgada a su brazo y apoyaba su cabeza allí.

Jodida mierda, estaba enfadada ¿Por qué no lo dejaba en paz?

Oigo una carcajada que me saca de mis pensamientos malignos hacia la que se supone que es mi mejor amiga, a quien quiero ver feliz y con una vida plena.

— ¿Qué es tan gracioso? — Ella lo observa y él niega con su cabeza, que le saca un puchero a la anteriormente nombrada.

Cringe...

Y ahí los vi, observarse a los ojos, con una sonrisa que derritió mi congelado - por el frío que estaba haciendo -  corazón.

Allí fue cuando entendí finalmente, que haga lo que haga, al final Catherine terminará junto a él y yo...

¡ESPEREN!

¡¿ACASO YO ERA LA MALIGNA TERCERA EN DISCORDIA?!

Por favor díganme qué no es así, no quiero romper mi amistad por un chico, en verdad todas esas películas que se encargan de mostrar el odio entre mujeres por un patético hombre me parecía absurdo.

Digo, si a tu amiga le gusta alguien y a mí me gusta la misma persona podemos llegar a un acuerdo verbal perfectamente, pero las películas se encargaron de hacernos creer que debemos ser tiernas, pequeñas, prácticamente sirvientas de los hombres.

Sonreí, que se vaya bien a la ******

¡Eleaonor! Me digo a mí misma, que boca tan sucia. Decidida a no entrometerme más en la historia de C&C, sentí como un alivio recorría mis hombros.

Me había sacado un peso de encima. Fingiría demencia y lo trataría como se debe, yo siendo sólo la amiga de su próximo amor.

¿Dolía? Un poco debo decir, aún a mis patéticos 17 años (cumplidos desde que tengo memoria)  saber que jamás sentiría un tacto igual de delicado como el suyo, que ninguna voz me haría estremecer y definitivamente nadie volvería a besarme con tanta pasión.

Miré nuevamente la escena de ellos dos enfrentados hablándose y sin hacer el mínimo ruido me dirigí a mi hogar.

(...)

Me lancé sobre la cama de espaldas y sin notarlo había comenzado a llorar, abracé mis piernas contra mi pecho y dejé que mi agónico llanto se oyera. Hoy me tocaba estar sola en casa así que podía gritar, romper y llorar todo lo que quisiera. 

Estaba enamorada de un chico, pero no de uno cualquiera, si no de uno que le gustaba el juego y justo eso había estado haciendo eso conmigo todo este tiempo, me utilizó como muñeca sin vida para poder molestarme. Pero mí pregunta específica es ¿Por qué?

Digo, no todos los cuentos finalizan de forma en la que esperábamos sin embargo debía ser fuerte y afrontar a ese imbécil, a quien tendría que aguantar solo por tres meses más.

Me dolió el corazón pensar en que quizás estaban caminando bajo la luna llena, agarrados de la mano, dirigiéndose hacia sus hogares.

Pero soportaría, lo haría por Catherine, nada me era más importante que ella y su película, mis sentimientos - buenos o malos - no debían intervenir en mi trabajo de casamentera.

Espera Chris esto solo comienza.

(...)

Al final se está haciendo más larga de lo que pensé.

Sat y gracias a la personita que lee esto

♡♡♡

Luv