Emily se miró en el espejo y suspiró. Estaba a punto de salir de su oficina después de un largo día de trabajo, pero se sentía agotada y estresada. Miró su reflejo con detenimiento, observando su cabello castaño oscuro que caía en cascada sobre sus hombros y sus ojos color avellana que reflejaban su cansancio.
Después de un día lleno de reuniones, papeleo y llamadas telefónicas, lo último que quería era tener que asistir a un evento social. Pero como una de las abogadas más exitosas de la firma, se sabía que tenía que hacer acto de presencia en la cena de gala de esa noche. Suspiró de nuevo y tomó su bolso para salir de la oficina.
Mientras se dirigía al evento, Emily se encontró pensando en su vida. A los 32 años, había alcanzado todo lo que siempre había deseado: una exitosa carrera, un apartamento en el centro de la ciudad, y una vida social activa. Pero algo parecía faltar en su vida, algo que había estado evadiendo durante mucho tiempo. De repente, se detuvo en seco al ver una figura familiar en la acera de enfrente. Era Kate, su primer amor de la adolescencia.
Emily no la había visto en años, desde que se habían graduado de la universidad y se habían separado para tomar caminos diferentes. Emily se quedó mirando fijamente a Kate, quien también parecía haberla reconocido. La fotógrafa le sonrió tímidamente y agitó su mano, y Emily sintió un cosquilleo en su estómago. A pesar de que habían pasado muchos años desde que se habían visto por última vez, Emily aún recordaba claramente los sentimientos que había tenido hacia Kate. Pero a pesar de los sentimientos que seguían presentes en su corazón, Emily sabía que no podía permitirse mostrar debilidad. Así que, con una sonrisa fingida, siguió caminando hacia la cena de gala sin decir una palabra. Durante toda la cena, Emily no pudo quitarse a Kate de la cabeza.
Recordaba los buenos momentos que habían compartido juntas en la universidad, las risas y las lágrimas que habían compartido, y el amor que había sentido por ella. Pero también recordaba el miedo y la confusión que había sentido en aquel entonces, y cómo había optado por vivir una vida que no era del todo suya.
Cuando finalmente terminó la cena, Emily se apresuró a salir del lugar. Pero cuando llegó a la calle, se encontró con Kate de nuevo. Esta vez, no pudo evitar sentir una oleada de emoción y nerviosismo al verla de nuevo después de tantos años. "Em, ¿puedo hablar contigo un momento?", preguntó Kate tímidamente. Emily se quedó mirándola un momento antes de asentir. Juntas caminaron por las calles de la ciudad, recordando viejos tiempos y hablando de cómo había sido la vida después de la universidad. Pero Emily sabía que había algo más detrás de la reunión de Kate con ella. Finalmente, Kate tomó una respiración profunda y dijo: "Em, lo siento mucho por lo que pasó entre nosotras en la universidad. Sé que te lastimé mucho y nunca me disculpé por ello".
Emily se quedó en silencio, recordando el dolor que había sentido cuando Kate la dejó sin ninguna explicación. Pero también recordaba el amor que sentía por ella, y cómo había sido incapaz de dejar de pensar en ella a lo largo de los años.
"Kate, no tienes que disculparte", dijo Emily finalmente. "Ha pasado mucho tiempo y ambas hemos seguido adelante con nuestras vidas".
"Pero eso es precisamente lo que quiero decirte", continuó Kate. "He estado pensando en ti todo este tiempo, y me di cuenta de que nunca dejé de amarte. Sé que suena loco después de tanto tiempo, pero todavía siento lo mismo por ti".
Emily se quedó sin palabras, mirando a Kate a los ojos. La emoción la invadió de repente, y se dio cuenta de que todavía sentía lo mismo por ella. Pero también sabía que su vida estaba en un camino diferente ahora, y que no podía permitirse dejar que sus sentimientos la arrastraran de nuevo.
"Kate, lo que estás diciendo es muy bonito", dijo Emily con una sonrisa triste. "Pero mi vida está en un camino diferente ahora, y no puedo permitirme dejar que mis sentimientos me arrastren de nuevo".
Kate pareció decepcionada, pero también entendió. "Lo sé, Em. Pero quería que supieras cómo me siento. Nunca olvidé lo que tuvimos juntas, y siempre te llevaré en mi corazón".
Emily se sintió conmovida por las palabras de Kate, y sabía que siempre la llevaría en su propio corazón también. Después de abrazarse y despedirse, se dio cuenta de que este reencuentro inesperado había cambiado algo en ella. Había recordado lo que era importante en su vida, y sabía que tenía que tomar decisiones importantes si quería ser fiel a sí misma.
Con eso en mente, Emily volvió a casa esa noche con una sensación de calma y determinación. Sabía que había muchas preguntas sin respuesta en su vida, pero también sabía que estaba lista para encontrar las respuestas y vivir la vida que realmente quería.
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El Silencio de mi Corazón
Teen FictionEn un mundo en el que la aceptación de la comunidad LGBTQ+ está en constante evolución, la vida de Emily, una exitosa abogada de 32 años, parece perfecta. Pero cuando se reencuentra con su primer amor de la adolescencia, Kate, una fotógrafa de renom...