Doy todo por ti [¡Temporada 2!] EN EMISIÓN

Octavo Capítulo

¡Yeosang, llegamos! – exclamó WooYoung cargando las bolsas del supermercado, San al costado suyo se apresuró el buscar las llaves para poder abrir la puerta.

Entremos – dijo San abriendo la puerta y pasando detrás de su novio. Sintió un pequeño dolor en la nariz cuando se chocó con la espalda de este – ¡Auch! ¿Por qué te quedas ahí parado? – preguntó irritado. Se hizo a un lado al no recibir respuesta alguna de WooYoung y se quedó congelado al ver a su querido hermano sentado en uno de los sillones de su sala – ¿Pero qué-

¡Eres un malparido, sinvergüenza! ¡Te atreves a venir aquí como si nada hubiera pasado! – insultaba Hongjoong con los ojos bien abiertos de la colera.

San y Jongho chocaron miradas y un extraño sentimiento invadió su corazón. No esperaba ver a su hermano tan pronto, pensaba buscarlo para rendir cuentas por Yeosang, pero más adelante cuando Yeosang pueda al menos, hablar del tema.

"¿Qué tienes en mente, Jongho?" se preguntaba viendo a su hermano a quien no le quitaba la vista de encima. Esa elegancia que lo caracterizaba, no estaba. Estaba desalineado y de algún modo, se le notaba triste.

Jongho siempre era serio, mostraba la misma cara para todo, raras veces lo veía efusivo o llorar, pero esta vez, sentía que su hermano necesitaba de alguien porque se le notaba perdido.

¿Qué mierda haces aquí? – esta vez era WooYoung el que gruñó, dejó tiradas las bolsas del super para tomar de la camisa a Jongho e insultarlo – Responde, maldito hijo de puta

Solo quiero ver a Yeosang – trató de responder el pelimarrón – Necesito hablar con él – completó zafándose del agarre de WooYoung.

¡Tú no hablarás con él! – replicó Hongjoong con ganas de matarlo.

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San salió de esa escena algo pensativo y fue a buscar a Yeosang enseguida.

El de mechones rojos estaba muy seguro de enfrentar a Jongho cuando lo vea, pero ahora estaba muy confundido. No quiso admitirlo, pero se partió un poco al ver a su hermano en esa situación, no, de hecho, ese chico no parecía su hermano.

Jongho siempre se había valido por él mismo, nunca le había pedido ayuda a nadie solo a papá, pero en lo que respecta a otras personas, siempre ha hecho las cosas solo, pero al mirarlo, sus ojos les pedían a gritos que lo ayude.

"Mierda" pensó San estando frente a la puerta de la habitación de Yeosang

¿Ayudar a su hermano o estar en contra de él?

Yeosang... – susurró entrando a la habitación despacio – Yeonnie, perdón por la demora

¡San! – exclamó el rubio corriendo a tomarlo de la cintura y darle un fuerte abrazo – San... Es Jongho, él vino aquí – dijo llorando.

Los ojos de Yeosang estaban muy hinchados, había papeles usados tirados por toda la habitación.

Lo sé, él está allá abajo – respondió San guiándolo al borde de la cama para que ambos pudieran sentarse y conversar a gusto.

¿Él está aquí? ¿Sigue aquí? – preguntó un poco asustado el rubio.

Sí – afirmó San suspirando – Cariño, nos hubieras avisado antes. WooYoung lo tiene de la camisa ahora y-