Día 3

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Se desarrolla en un universo moderno, Pudding va terminando la universidad mientras que Sanji trabaja en el Baratie que es un famoso restaurante de la ciudad

¿Reto de una noche?

Tópico: Apuesta

Todo estaba pasando tan rápido la mente de la chica estaba algo nublada, si no lo estuviera esto le causaría un gran conflicto ¿Cómo terminó sentada en el regazo de un desconocido? ¿Cómo terminó prácticamente devorando sus labios?

- Lamento eso ...

Fueron las torpes palabras que la chica soltó cuando el beso se acabó y tuvo que jadear ligeramente por aire, el rubio parecía perdido, la miraba como tratando de procesar las cosas ni siquiera había colocado sus manos sobre ella las tenía a los lados de sus caderas, pero sin tocarla lo cual le facilitaría las cosas a la joven

- Pero no fue malo ¿O sí?

Agrego con voz endulzada la joven antes de levantarse, la poca conciencia que le quedaba le decía que no podía permanecer ahí más tiempo, tenía que moverse antes de que el chico reaccionara y las cosas se volvieran difíciles

- ¡ESPERE SEÑORITA!

La voz de rubio resonó tras ella y aunque una parte suya quiso detenerse la otra se obligó a avanzar a través de la gente en la pista de aquel lugar para perderlo, tenía que volver a su mesa.

Y eso es lo último que la joven recuerda de su noche, lo siguiente que supo fue que estaba en el departamento de su hermana Flampe, lo supo por la peculiar decoración de la habitación donde despertó, su cabeza punzaba y su estómago se sentía tan revuelto, se sentía terrible como si un camión le hubiera pasado encima o algo peor.

- Carajo...

- ¿Cómo llegué aquí?...

- No debí aceptar salir anoche, maldita sea

Apenas podía con ella misma en ese momento, se levantó y fue al baño a lavarse la cara y lavarse la boca para quitarse ese sabor raro que tenía, nada más verse al espejo era suficiente para saber que habia hecho algo de lo que se iba a arrepentir, su labial carmín estaba corrido y ni hablar de sus ojos donde el rímel ya habia hecho de las suyas para terminar su sola expresión de dolor y cansancio deberían ser suficiente para decirle que clase de noche tuvo.

Una vez termino se alzó el cabello rápido en una especie de chongo desordenado y finalmente dejo el cuarto, miro a su alrededor, pero en el pasillo no habia nadie, le tomo unos momentos encontrar a su hermana recostada en el sofá con su perfecta cola de caballo y una sonrisa divertida en el rostro

- Buenos días, señorita perfecta ¿Cómo se siente haberte divertido por una vez en tu vida?

- Asqueroso, espero jamás volver a hacerlo

- Vamos, no me digas que no te divertiste, sé que es mentira además estuviste increíble chica, Creí que Yuen iba a levantarse de su silla y te llevaría de vuelta a la mesa arrastras

- ¿Qué? ¿Por qué iba a hacer eso?

- Sentarse en las piernas del desconocido no estaba dentro de tu castigo

- Las piernas me fallaron, claramente no lo hice a propósito

- mmm hum... se notó lo molesta que estabas, sobre todo cuando después no dejabas de buscarlo con la mirada

No hubo una respuesta verbal de parte de la castaña solo giro los ojos con fastidio, estaba segura de que su hermana menor la estaba molestando, ella no se interesaría en un desconocido en una fiesta además aun no estaba segura de que paso, tenía pequeños destellos de la noche anterior, como fue con algunos de sus hermanos y amigas a aquel club, todos riendo, bailando y luego ... ella recuerda estar sentada a horcajadas sobre un rubio que ahora recordándolo le parece algo familiar y eso la pone más nerviosa, no quiere que sea alguien que conoce sería muy incómodo de explicar.

Besos de chocolateDonde viven las historias. Descúbrelo ahora