WEST COAST || Kookmin

Capitulo 5

Jungkook

Nada estaba saliendo como debería hacerlo.
En los días siguientes, parecía que Jimin estaba entrando más en confianza, pero en vez de verlo como un alfa, sentía que lo percibía más como un cachorro. Le molestaba demasiado.

Tenía que admitir que a veces se sentía demasiado tonto, pero si aún no se había dado por vencido, era porque algunas veces, mientras él se encontraba distraído, ya sea ayudando a su mamá, leyendo algún libro o simplemente viendo su celular y levantaba solo un poco la mirada, siempre captaba unos ojos avellana mirándolo. Eso significaba algo, ¿no? Esperaba jodidamente que sí lo hiciera.

Demasiado conmocionado por el hecho de que había una gran probabilidad de no ser correspondido, bajo observando que el dueño de sus pensamientos estaba en la cocina, tomando un vaso de agua con una gran e inmensa tranquilidad, completamente absorto en sus pensamientos. Aun se encontraba con su ropa de estar por casa, pero se veía siempre demasiado hermoso.

Soltando un suspiro lento, se acercó teniendo una idea que esperaba saliera bien.

Dios, ayúdame solo esta vez más.

- Hyung.

Se acercó sorpresivamente al mayor, susurrando esa palabra llena de "respeto" en su oído, mientras tanto, lo cubría casi totalmente con su cuerpo. Lo que provocó es que el pequeño omega comenzara a toser estrepitosamente debido al susto que había recibido por parte del alfa.

Con una pequeña sonrisa, el menor empezó a dejar suaves caricias en la espalda contraria, intentando cambiar a una reacción un tanto más preocupada.

- ¿Estás bien, hyung?

- Joder, Jungkook, ¿quieres matarme?

- No, lo siento, solo estaba jugando – suspiró haciendo una carita de cachorro regañado, mientras el mayor lo miraba con cierta pena. Al menos usaría la ternura que le daba a Jimin a su favor.

- Bueno, no es para tanto – admitió un tanto culpable, limpiando un poco las gotas que habían caído en su camiseta.

- Quería saber si quieres salir conmigo, me aburro demasiado en esta casa.

- La verdad es que tengo algunas cosas que hacer – respondió – si gustas, puedes acompañarme para no quedarte solo.

- Me encantaría – respondió rápidamente, provocando una risita en el mayor – iré a cambiarme.

- Tómate tu tiempo, yo igual tengo que alistarme.

- Lo haré lo más rápido que pueda.

Saliendo como un alma en pena, corrió hasta su cuarto buscando algo que no dejara más opción a Jimin que mirarlo. Sabía que estaba jugando un poquito sucio al hacer este tipo de cosas, pero jamás en su vida había tenido que "luchar por alguien". Le costaría un poco, pero definitivamente lo lograría, de eso no tenía ni la más mínima duda.

Demasiado ansioso, empezó a buscar en su armario. Desearía haber traído todas las cosas de su departamento y no solo lo estrictamente necesario. Tomando unos jeans negros, junto con sus botas favoritas, comenzó a vestirse. Mientras acomodaba la ropa rápidamente, poco a poco se dio cuenta de que, por primera vez en muchísimo tiempo, no estaba controlando del todo sus feromonas.

¿Era un problema? Definitivamente sí. Los alfas dominantes tenían cierta tendencia a producir feromonas mucho más fuertes que un alfa normal. Si estas no estaban demasiado reguladas, podrían causar cualquier tipo de accidente en un omega. Intentando concentrarse más en esto, se percató de que la parte animal estaba tan emocionada que dificultaba la tarea.