WEST COAST || Kookmin

Capitulo 12

JUNGKOOK

Era notorio e inevitable, Jimin le gustaba cada día más. Aunque el mayor parecía pensar que bromeaba al decirlo, la verdad es que con cada segundo, minuto y hora que pasaba, solo hacía que sus sentimientos crecieran demasiado rápido.

Recapacitando, también podría decir que este "extraño" fenómeno se debía a que durante años había retenido sus sentimientos, ocultándolos con grandes olas de ego y superioridad, las cuales fueron totalmente derrumbadas tan solo con una mirada del mayor. Increíble.

Aunque como dicen ciertos dichos antiguos, no todo es color de rosa. A medida que su atracción crecía, parecía que también lo hacían los sentimientos de todos sus compañeros. Le dolía la cabeza de tener que estar reteniendo esas fuertes feromonas llenas de posesividad, pero lo que más le molestaba era la forma en que hablaban del omega en los momentos libres, lo cual él denominaría como nefasto. Ya había tenido más de una pequeña discusión, las cuales debía detener por orden del mayor.

Era muy difícil.

Toda su vida había luchado por tener las emociones y, en general, todo lo demás al límite, pero esto parecía un reto demasiado grande.

Quejándose por el dolor, tanto de cabeza como corporal, se dispuso a tomar una ducha. Caminando como un auténtico zombie, se arrastró hasta el cuarto de baño, pero justo antes, un pequeño ruido lo alertó, sacándolo de su estado y haciéndolo correr como un deportista.

Jimin.

¿Cómo lo sabía? Le había puesto un tono personalizado.

¿Raro? Posiblemente. Era lo que la desesperación podía hacer.

Tomando el aparato totalmente encantado, pudo ver la serie de mensajes del omega. Necesitaba verlo durante más de diez minutos. En estos últimos días, el rubio había estado tan ocupado con su pequeña mudanza y la compra de algunas cosas básicas que no tenían tiempo más que en la universidad para hablar durante un corto periodo. Luego, simplemente se despedían o compartían algunos besos y ya.

Jiminnie
Baja. Demos un paseo.

Tu
Voy corriendo , soy veloz, nací veloz

Jiminnie
Jungkook deja tus diálogos de película o me  iré ahora mismo.

Tu
Amargado

Sonriendo, comenzó a vestirse lo más rápido que pudo, ya mágicamente se sentía fantástico.

Después de terminar con su ropa, simplemente salió del lugar para encontrarse afuera con el auto de Jimin. Al entrar, pudo ver al mayor totalmente arreglado, lucía hermoso.

Este tenía varios pendientes puestos y parecía que en este último tiempo se estaba dejando crecer el pelo, ya que unas ondas desalineadas demasiado hermosas hacían presencia, y ni que decir de ese conjunto que llevaba.

-Jungkook - dijo Jimin mientras sacudía su pequeña mano justo frente a sus ojos - regresa a la tierra.

-Lo siento, me perdí en tu belleza - respondió de forma sincera, riendo por cómo Jimin revolvía los ojos. Mientras abrochaba el cinturón, esperó a que comenzara el recorrido- ¿Tenías algún compromiso?