¿Jugar a enamorarte?

Capítulo 16.

Fue un mar de lágrimas durante horas.
¿Hace cuánto había comenzado el ataque a la tierra?, ¿Hace cuánto la chispa de su abejorro había dejado de brillar?
Se sintió tan impotente e inútil: solo se quedó viendo desde una ventana como el arma de la nueva fortaleza Decepticon destruía la base Autobot con todos sus integrantes dentro, ¡Y él no pudo hacer absolutamente nada!

Su habitación era, una vez más, un enorme desastre, justo como él. La spark le dolía como si quisiera salir de su pecho, y si él tuviera las agallas suficientes la arrancaría con sus propias manos para dejar de sufrir el dolor que lo atormentaba.
Bumblebee había muerto y se sentía responsable, la culpa por no haber sido sincero con él desde un principio, por no irse junto a él cuando tuvo la oportunidad y sobre todo, porque jamás pudo disculparse, ahora ya no habría más oportunidades para hacerlo, ¿cómo iba vivir con eso?

«Knockout, a la sala médica de inmediato...», se escuchó la voz de Starscream desde su comunicador, «...nuestro líder aún necesita atención médica».

— Megatron puede irse con Unicron; no estoy de humor para la instalación de una extremidad.

«Más te vale que lo estés, Knockout...», fue ahora la voz de su líder, «Hay información que podría interesarte acerca del Autobot con designación de Bumblebee».

El médico lo dudó varios segundos, tragando un poco de saliva.

— ¿Qué... clase de información?

«Están vivos».

Su chispa casi se detiene con esas dos palabras.

¿Bumblebee estaba vivo?, ¡Vivo!, ¡Estaba vivo!, No tenía idea de cómo habían sobrevivido al ataque, pero eso era lo de menos, ¡La chispa de su abejita aún brillaba! Gracias a la allspark...

Limpió con torpeza el aceite que salió de sus ópticos, dando un enorme suspiro de alivio. Aún tenía otra, y posiblemente última oportunidad para enmendar las cosas, o al menos para asegurar el bien del Autobot explorador.

[°°°]

Fueron enviados a distintas coordenadas: Arcee y Jack, Bulkhead y Miko, Bumblebee y Rafael, Smokescreen y por último Ratchet; sin embargo Optimus se quedó en la base para asegurarse de que los Decepticons no fueran a rastrear a su equipo, más no contaba con que no se darían el lujo de negociar.

Bumblebee trataba de mantenerse optimista y no decaer para Rafael, pero honestamente, le estaba costando bastante.
Ya no quería seguir huyendo y escondiéndose a plena vista; haber invertido el color de su pintura ayudó muchísimo a eso. Estaba muy preocupado por el resto de se equipo, y sobre todo por su líder.

— ¡Bee, encontré algo!

El deportivo bajó la velocidad, esperando escuchar las noticias que Raf tenía.

— Estuve buscando, y creo que encontré una foto de Ratchet en la página de conspiraciones; fue tomada en un vertedero de vehículos en la siguiente ciudad ayer en la noche.

— Entonces debemos ir de inmediato.

Llegar al lugar les tomó varias horas: entre ubicar el lugar exacto y algunas paradas para que Raf pudiera comer algo, se hizo de noche, pero al fin habían llegado.
Encontrar al médico entre todo ese montón de chatarra no fue difícil.

— ¡Ratchet! —el pequeño se acercó feliz a la ambulancia cuando bajó de Bee—, ¿Ratchet?...

Bumblebee también se acercó una vez que tomó su modo robot, Ratchet lo imitó algunos segundos después.