Capítulo 4.

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En el final del capítulo anterior...

¿Qué hay de Optimus? Debe saber sobre esto.

— Concuerdo con Bulkhead. Debemos estar preparados por si esa chatarra intenta hacer algo con Bumblebee —habló la de colores azul y rosa, formando un puño con una de sus manos y golpeando la palma de la otra—.

¡No!, No pueden decirle a Optimus sobre esto.

¿Decirme qué?

La sala quedó en completo silencio. Nadie se había dado cuenta de la presencia de Optimus ahí.

Los cuatro soldados estaban nerviosos, y eso lo podía notar cualquiera. Entonces, Ratchet, Arcee y Bulkhead desviaron su vista hacia Bumblebee, quien solo se encogió de hombros en su lugar.

Decirte que... Creo que encontramos una mina de Energon abandonada. —mintió, sorprendiendo a los otros 3—

— Eso no... —Ratchet iba a desmentirlo—.

¡No quería que supieras! —interrumpió— Porque quería asegurarme primero de que no fuera una trampa.

El líder observó a su pequeño explorador unos segundos. Confiaba plenamente en Bumblebee, pero era extraño que esa fuera su estrategia.

— Si de verdad hay una mina de Energon abandonada, tenemos que ir y conseguir ese Energon. —habló serio—.

Todos dirigieron su vista hacía él, sorprendidos. ¿Le había creído a Bumblebee?

Con tu debido permiso, Optimus, me gustaría ser parte de la búsqueda. Puedo ir y explorar mientras preparan el equipo, y así me aseguro de que no sea una trampa.

Las sorpresas para el resto del equipo no cesaban. ¿En qué lío se estaba metiendo el explorador?, No comprendían lo que estaba haciendo, ni qué quería lograr con eso.

— Arcee te hará compañía. Si es una trampa Decepticon, será mejor que no estés solo.

— Por supuesto, señor —ya era responsabilidad de Bumblebee arreglar esta situación. Ella solo iba a seguirle el juego por ahora—.

— Ratchet, triangula las coordenadas y abre el portal terrestre.

— Eh... —por otro lado, Ratchet estaba dudoso—. Claro, Optimus —aunque accedió al final—.

Fue una suerte para todos que después de eso, Prime se alejara hacía la bodega.
Las vistas del médico, el wrecker y la soldado fueron de nuevo hacía el explorador.

— ¿Qué fue eso, Bumblebee? —le cuestionó la femme con clara desaprobación—

— Acabas de mentirle a Optimus. Nadie le miente a Optimus —dijo Bulkhead alarmado—.

— Además, ahora tú y Arcee tienen que ir a una misión que no existe. —recordó el de pintura naranja—. ¿Qué se supone que le diremos a Optimus?

— La verdad. Bumblebee hablará con él y le contará todo.

Ratchet y Bulkhead estuvieron de acuerdo con Arcee. No podían mentirle a Optimus por siempre, mucho menos guardarle un secreto tan grande como ese.

Una alerta sonó desde el computador, indicando una vaga señal de Energon.

Bueno, creo que ya hay una misión.

Bee estaba aliviado. Por ahora, podía tener algo de tiempo para acomodar sus pensamientos y aclarar todo en su procesador.

— Bien, pero cuando volvamos tendrás que decirle a Optimus la verdad.

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