𝕭𝖊𝖓𝖊𝖉𝖎𝖈𝖙𝖚𝖘

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Después del incidente en el baño, Jun se tranquilizó y ambos trataron de no hablar del tema por varias razones.

Bajaron a cenar con los padres de Wonwoo, los cuales adoraban a Junhui y estaban contentos de tenerlo ahí, pues era un chico muy agradable para ellos y solían tener conversaciones amenas con él.

Wonwoo sólo los escuchaba, ojos fijos en Jun en todo momento. Por supuesto que sus padres sabían de sus verdaderos sentimientos por el otro chico, pero nunca lo presionaban. Nadie los presionaba, aunque fuera obvia su situación. Ni sus amigos, ni su familia. Ellos tenían su propio paso, no tenían que apresurarse.

Al terminar la cena, ambos jóvenes subieron a la habitación de Wonwoo, el cual se dirigió a su armario donde tenía su sleeping bag para dormir en el suelo, pero Junhui lo detuvo.

Wonwoo se giró hacia él, manos extendidas para sacar el sleeping bag que usaría, pero ahora con su atención sobre Junhui, el cual no lo miraba directamente.

—¿Puedo...? —comenzó a decir, con la mirada desviada, mejillas rojas siendo delatadas por la luz de la habitación—. ¿Podemos dormir en la misma cama? Prometo no perturbar tu sueño.

Y Wonwoo no debió sentir la emoción como un revoloteo en su estómago y pecho, pero fue la respuesta de su cuerpo ante tal petición. Él también desvió la mirada, con repentina timidez. Era normal que dos amigos compartieran la misma cama. Lo había hecho en el pasado con Mingyu, aunque eran más pequeños y veía al menor como un hermano.

Aunque esta vez era diferente, Junhui no sólo era su "amigo", Había muchas excepciones en él. Pero aquello se lo estaba pidiendo y Wonwoo tenía una idea del porqué: Junhui tenía miedo.

Aún no habían hablado al respecto de la situación que el médium estaba enfrentando, pero Jun le dijo que se lo diría con más calma cuando el nuevo día llegara.

Si fuera por el azabache lo hablarían esa noche, puesto que había llegado al punto de afectar al médium de esa forma. Wonwoo podía rastrear el inicio del comportamiento extraño de Junhui cuando fue testigo del suicidio del chico en el metro.

—Claro, no te preocupes, aparte, yo cierro los ojos y duermo como piedra, no vas a perturbar mi sueño aunque me patees o me tires de la cama —dijo sonriendo, tratando de no hacer evidente lo que implicaba para ambos aquel gesto.

Sus sentimientos cada vez eran más difíciles de mantener a raya, ambos sabían que en algún momento tendrían que expresarlos.

No tenían prisa, pero no podían fingir.

Wonwoo ya no quería seguir fingiendo que Junhui no era la persona más maravillosa para sus ojos y que tenía una necesidad muy grande de protegerlo.

Junhui tampoco quería seguir reprimiendo su necesidad de estar junto a Wonwoo, de tener más gestos físicos con él y de decirle todo lo que le hacía sentir, que era tanto a veces que sentía, se le desbordaba de las manos.

Ambos se cambiaron y se pusieron sus pijamas. Wonwoo le prestó un conjunto decente a Junhui, pues sus pijamas per se eran ropas cómodas de casa que Mingyu insistía en llamar «vestimenta de vagabundo».

Cuando ambos estuvieron vestidos se dieron una mirada torpe y Wonwoo fue el primero en meterse en la cama, del lado derecho, dejándole libre el espacio izquierdo a Junhui, que también se subió a la cama, con las mejillas rojas tratando de no evidenciar su nerviosismo.

No era fácil compartir algo así con la persona que le gustaba, aunque para Junhui el otro chico era más que eso. Simplemente se había enamorado irremediablemente y Wonwoo tal vez no lo sabía o tal vez sí.

Dies Irae (WonHui/SeokSoo)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora