Capitulo 3: La princesa de Slytherin

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Sebastian y Anne son los primeros en bajar del tren, enseguida baja Alya buscando por todos lados a ver si podía ver al chico Gaunt, pero sus esfuerzos fueron en vano, exhala; --Ahh---.

Sebastian la voltea a ver y le pregunta; --- ¿A quién buscas?--- Alya se sonroja y pone una cara de apenada: --- ¡A nadie!--- responde con una voz algo quebrada, Sebastian levanta una ceja y pone una cara de incredulidad; ---¿Segura?---, ---Claro --- responde Alya algo decepcionada--- Anne inmediatamente se da cuenta de la situación, sabe que debe de estar buscando a un conocido, así que con ambos brazos agarra a Alya y le dice; --- Sea quién sea ya debe de estar en las carrozas, tal vez lo veas en el castillo -- Anne mira a Alya con una sonrisa; --- ¿De quién están hablando ustedes dos?, ¿De qué me perdí? --- Anne suelta a Alya y voltea a ver a Sebastian con unos ojos de frustración; --- ¡De nada Sebastian! --- Sebastian con una pequeña carcajada; --- ¿Si estas buscando a alguien verdad?, solo dinos que si y te ayudamos a buscarlo sea quien sea ---

Alya con una sonrisa; --- Gracias, vamos a las carrozas que se hace tarde ---, Anne empuja a Sebastian mientras van rumbo a las carrozas; ---No seríamos de los últimos en bajar del tren si ¡Alguien! no se hubiera quedado profundamente dormido--- Sebastian gira a ver a su hermana con una cara de molestia; ---¿Dormido?, solo acepte un panecillo de los de tercer año, no sabia que me harían una broma y le pondrían una poción para dormir--- Anne ríe y toma con sus dos manos a Sebastian del brazo; ---Jajaja, digamos que te recibieron con una novatada---.

Ya dentro del castillo en el gran comedor, el director Nigellus busca a su hija entre los de nuevo ingreso, ve a Alya a lo lejos llegar con otros 2 estudiantes inmediatamente se acerca a ella; --- ¡Ah, ahí estas! ... deprisa porque vas a ser la primera en pasar--- Mira a su hija con ojos de indiferencia, le acomoda sus pequeños lentes y las trenzas; ---Recuerda no poner en vergüenza a tu padre--- Alya decepcionada de como la recibe su padre suspira; --- Si padre --- Anne y Sebastian ven la cara de decepción de Alya; ---Al parecer amoroso no es --- le susurra Sebastian a Anne al oido, Anne con una cara de incredulidad le mete un sutil codazo al estomago de Sebastian; --- Pareciera que no aprendiste nada sobre modales --- susurra Anne esperando que Alya no los escuche.

Nigellus sube al podio y se para en frente de los estudiantes --- Orden, por favor... --- todos los estudiantes tanto los viejos como los de nuevo ingreso voltean a ver a su nuevo director. ---Como ya todos sabrán soy su nuevo director, mi nombre es Phineas Nigellus Black, anteriormente profesor aquí en Hogwarts, algo que no fue muy agradable --- (se escucha un silencio total de fondo salvo por un estudiante de Hufflepuff toser). Phineas con una sofisticada sonrisa soberbia, una postura imponente y muy egocéntrica, se da cuenta que los estudiantes no reaccionan a su presentación. --- Bueno, a los chicos de nuevo ingreso les deseo suerte --- dice Phineas con una cara de desagrado hacia los estudiantes, ya que es bien sabido que a Phineas no le agradan los jovenes, ya que él creía que eran tediosos y obsesionados con ellos mismos.

La profesora Matila Weasley lo interrumpe para romper la tensión que se sentía en el ambiente, ---- Bienvenidos a los alumnos de nuevo ingreso, como ya deben saber Hogwarts cuenta con 4 casas donde el sombrero seleccionador los seleccionará,  acorde a sus habilidades y deseos. Las 4 casas son ''Gryffindor, Hufflepuff, Ravenclaw y Slytherin'', durante su estadía en Hogwarts podrán acumular puntos mediante sus triunfos y si rompen las reglas, los perderán, y al final de cada ciclo escolar con la sumatoria de puntos podrán ganar la copa de la casa --- 

--- Ahora voy a nombrarlos de uno por uno, pasaran y se sentarán aquí al frente --- la profesora Weasley lee el primer nombre en la lista; --- ''¡Alya Black!''--- nerviosa camina al frente, cuando de repente una voz que ella conocía susurra; --- ''Suerte'' --- Alya voltea y se da cuenta que era el chico Gaunt, colorada por la situación y su nerviosismo, se tropieza con su capa al pisarla en el primer escalón y caen sus lentes al suelo, unos cuantos estudiantes comenzaron a reirse, ella los levanta y sigue adelante.

Traición a la sangreDonde viven las historias. Descúbrelo ahora