capítulo 39

580 80 6
                                    

Cuando la lluvia intensa de balas cesó, Aonung se inclinó unos cuantos pasos hacia mi para poder susurrarme sin peligro de que lo escucharan…

- ¿No dijiste que conocías este lugar?. habló bajo con las manos aún sobre su cabeza.

- Lo hago, no se que mierda fue eso. comenzaba a perder la paciencia ... .Cada minuto perdido aquí, cada maldito segundo me sentía más y más lejos de encontrar a Iam. Estaba seguro de que lo encontraría aquí, si no logramos entrar a esa base las posibilidades de encontrarlo disminuye…

- ¡Pues averígualo!

- ¡Cierra la boca! .- le grite a Aonung logrando que de verdad guardara silencio. Parecía ofendido por mi reacción, más sin embargo no dijo nada…

A lo lejos, después de ambos discutir unos segundos más, escuchamos las pisadas de alguien acercarse a nosotros…

- ¡Salgan con las manos en alto! .- alguien gritó con mucha fuerza…Aonung y yo compartimos una mirada, él tomó una roca grande del suelo entre su mano y yo tomé el cuchillo que aún mantenía en mi costado con fuerza. Mi arco descansaba en el suelo a unos cuantos metros pero las flechas ya no estaban en mi espalda así que no era una opción.

-¿Y tu cuchillo?.- le pregunté en cuanto vi la roca.

- No se a donde fue a parar.- se giró un poco dejándome ver su funda vacía.

Escuchamos el seguro de varias armas ser activado, en cuanto los pasos se escucharon de nuevo ambos levantamos nuestro cuerpo y con fuerza arrojamos nuestras armas.

Mi cuchillo dio justo en el pecho del avatar, la roca viajó más lejos hacia el rostro de otro tipo. En cuanto cayeron al suelo corrimos hacia ellos, tome el arma que dejó caer y con ninguna práctica anterior dispare hacia los otros dos. Aonung hizo exactamente lo mismo, al igual que yo trastabilló hacia atrás por la fuerza del arma y los disparos fueron en muchas direcciones sin algún tipo de control.

Ahora seis cuerpos se encontraban tumbados en el suelo, a pesar de no tener experiencia tuvimos bastante suerte.

- ¿Quienes son estos?.- Aonung retirar sus armas arrojandolas lejos al ver que ya no salían más balas.

-Son cascarones de Quaritch.- estaban uniformados y a estos jamás los había visto.

- ¿No dijiste que este lugar era seguro?

- También dije que Norm estaba mintiendo.- le recordé mientras sostenía aún entre mis manos el arma.

- Entonces, ¿crees que está dentro?.- retiro mi cuchillo del pecho de aquel cascarón y me lo ofreció.

- Eso espero.-Dije mientras negaba  con la cabeza permitiendo que el portara el cuchillo.

Nos aseguramos de que los cascarones no despertarán y decidimos entrar. En cuanto estuvimos en la entrada puse una mano en el pecho de Aonung pidiendo silencio y todo me pareció aún más extraño….

Ningún sonido provenía de adentro, es anormal considerando cuantos Avatares y científicos viven aquí dentro… Algo estaba mal…

Sin esperar más atravesamos las puertas entrando a la primera sección de la base, las hamacas y camas de los Avatares. No había nadie aquí, tomé una mascarilla y le entregué otra a Aonung.

- Parece que hubo alguna lucha aquí dentro.- comento mientras atravezabamos la habitación.

- Este caos es común.- comente sin importancia.- Lo extraño es que nadie esté acostado o perdiendo el tiempo.

Cuando llegamos a la puerta que dividía el inicio de los laboratorios, la empuje pero no cedió. Empuje con fuerza un par de veces pero parecía estar sellada por dentro…

Lo Que Pudo Ser (Adaptación)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora