_Feliz cumpleaños_

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Se sentía tan ansioso en ese momento, estaba portando un gorrito de cumpleaños sosteniendo el pastel que la tía de Taehyun había hecho por su cumpleaños.

Beomgyu llegó demasiado temprano a su casa ese día quería darle una fiesta sorpresa a su mejor amigo (aunque solamente estuvieran 3 personas involucradas en ello) mientras prendía las velas evitaba hablar de manera fuerte para que no fuera descubierto.

Como si fuera un ladrón entrando a una casa a robar, la mujer y él tomaron camino de manera silenciosa a la habitación de aquel adolescente el cual apenas se acaba de despertar, no le gustaba celebrar su cumpleaños por la vida que llevó anteriormente, pero esta ves tenía una pequeña esperanza de que fuera diferente a los cumpleaños restantes de su vida, con el corazón a tope rezaba por el pastel que no tocara el suelo antes de llegar, aquella mujer abrió la puerta, dejando ver a Taehyun con su pijama y sus cabellos revueltos, tallándose un ojo, ante los ojos de Beomgyu eso se veía tan bonito y adorable.

Taehyun era tan precioso, sea en el estado que se encontrara.

—Feliz cumpleaños, Tae— Sonríe de oreja a oreja donde pasó al otro adolescente que venía prendiendo las velas, su mirada en el centro del pastel lo habían hacer bizcos y Taehyun sonrió en grande con tan solo verlo, no podía describir lo reconfortante que era cuando Beomgyu estaba con él, sentía que estaba mereciendo mucho en su corta y vida.

—¡Felices 17!— Se acercó a él, sin dejar de sonreírle, tenía el pastel delante de sus narices, la llama de la vela lo hipnotizaba por completo, un poco de presión se instaló por debajo de su mandíbula por el hilo del gorrito que su tía le puso.— Pide un deseo— su voz es tan tenue que lo hace relajarse, cerró sus ojos juntando sus manos en el pecho, diciendo en su mente lo que mas anhelaba en el mundo.

—Listo...— abre sus ojos soplando la vela viendo como se apagaban de una sola, una vez que se apagaban no había vuelta atrás, tu deseo sería cumplido tarde o temprano.

—Es hora de que empiece la fiesta— La mujer hace un pequeño bailecito haciendo que los chicos rían al respecto, hoy será un gran día en lo absoluto, Taehyun dio una pequeña mordida a su pastel quejándose cuando Beomgyu aventó su mano contra este haciendo que se llenara de la crema hasta la nariz.

—¡Beomgyu!....—

—¡Taehyun!.....— la costumbre de decir sus nombres luego de hacer algo era lo que mas le gustaba escuchar, se lamentó pedir su mayor deseo, tomó en su dedo un poco de crema del pastel para llenar de este, la mejilla del contrario quien abrió en grande sus ojos por la sorpresa y luego soltó una carcajada al respecto.

Todo el día estuvieron comiendo, jugando y riendo, su alma y cuerpo se sentían tan tranquilos, como si estuviera navegando en un bote con aguas tranquilas a su alrededor, un clima agradable con todas sus provisiones, su tía tuvo que trabajar de imprevisto, así que no le molestó, al contrario querías pasar tiempo con Beomgyu y eso pasó, sus cuerpos acostados en la cama estando en silencio, uno muy cómodo, se sentía como su estuviera drogado, veía muchas cosas de colores y parecía que estaba entumecido ante los labios inexpertos de Beomgyu, quien estaba encima de su cuerpo sin llegar a aplastarlo, sus manos tímidas están en el pecho del contrario tomando la camiseta con fuerza tratando de seguirle el ritmo, sus labios hacían ese chasquido rápido, los amigos se podrían besar ¿Cierto? Era la segunda vez que se sentía tanta tensión entre sus cuerpos que no sabían a que se debía.

—¡Espera!....— Taehyun lo detiene cuando siente unas manos tratando de colarse en su torso con su voz jadeante.

—Solo... Solo quiero acariciar... — en su mirada estaba la excitación presente, unos adolescentes con las hormonas alborotadas.

Tragó saliva cuando Beomgyu acarició su abdomen plano, sentía leves cosquillitas haciéndolo soltar una pequeña sonrisa, deteniendo sus manos.

—Beomgyu..... ¿Lo vamos a hacer?— sus miradas, ambos expresan cierto temor, se puede notar a kilómetros, pero Taehyun no sabía ni como pensar, se lamentaría morir virgen, pero también se lamentaría mostrar su cuerpo y tener placer.

—No... No me siento listo aún... Patético— susurra para el mismo y el bajito sonrió un poco de alivio extendiendo sus brazos para abrazarlo, era raro que él hiciera esas acciones pero ahí estaba.

—Me encantan tus abrazos— cae por inercia arriba de Taehyun pero no le molestaba en lo absoluto, sus rostros estaban cerca, sus respiraciones se mezclaban haciéndose una, aún seguía pidiendo perdón por lo que deseó.

—¿Me perdonarás?....— su mirada cambia a una sin expresión alguna, Beomgyu pudo sentir que algo seguía sin cambiar, así que solo asintió, se estaba convenciendo a si mismo que nada malo iba a pasar.

—Claro que sí— susurra dejando un beso casto en aquellos labios de sabor menta que desaparecerían dentro de poco.

—Gracias por estar a mi lado— le da una sonrisa cansada abrazándolo con fuerza, mirando al techo.

Por favor, atiende mis llamados de dolor y agonía.... En cualquier momento los demonios vendrán por mi.



La vela fue apagada en cuanto pidió su deseo, los aplausos por parte de sus padres y de los 3 chicos que invitó por cortesía llenaron el lugar, se quedó mirando al pastel mientras prendían las luces, pero su rostro no mostraba alegría alguna, su mente estaba dándole una escena alternativa dónde Taehyun estuviera con él, ¿Qué le hubiera regalado? ¿Qué es lo que estuvieran haciendo en este momento?, Se agachó para morder el pastel y en un rápido movimiento tenía betún en su mejilla, Kai sonreía levemente con su dedo cubierto de betún, se supone que Taehyun solo podría hacer eso.

—¿Por qué lo hiciste?— lo mira de mala manera y de repente todo se tensa, no quería ser grosero con el menor de todos pero aún así no le gustó en absoluto lo que hizo.

—S-solo pensé que... Ya sabes una broma— lo mira apenado y con culpabilidad, pensó que realmente le iba a agradar.

—No puedes hacerlo.... Solo Taehyun puede...tu no— toma una servilleta limpiando su mejilla, los chicos se miran entre sí sin saber qué hacer.

—Beomgyu... Él ya no está, ya deberías dejarlo en paz.... no sé superarlo quizá— su madre lo reprende, no es que le cayera mal Taehyun, sino que su comportamiento no era agradable, Beomgyu no podía juntarse con un chico de problemas mentales, pensaba que se lo podía contagiar, dejó a su niño en un mal estado los primeros días de su muerte, le tenía un pequeño rencor.

—¿Superarlo?... ¡¿SUPERARLO?!— golpea sus manos en la mesa haciendo que todos peguen un brinco— ¡Taehyun no era ningún delincuente mamá! ¡Te lo dije Muchas veces! ¡Te expliqué lo que él valía para mí! ¿¡Cómo demonios quieres que lo supere?!... Cómo si fuera tan fácil.... No pensé que fueras así Choi....— mira con sumo dolor a su progenitora comenzando a llorar del enojo, se estaba volviendo muy llorón.

—Beomgyu no le hables así a tu madre— su padre defiende a su esposa la cual está en un pequeño trance por cómo estaba reaccionando, jamás le había alzado la voz.

—Pueden meterse mi cumpleaños por dónde quieran..... Ojalá estuviera con Taehyun ahorita— quita el gorrito de fiesta levantándose de dónde estaba caminando hacia su habitación, se sentía muy enojado y dolido en ese momento, no le importaba si los demás chicos estuvieran presentes.


Azotó la puerta haciendo que el dibujo pegado desde hace bastante tiempo que Taehyun le dió cayera a sus pies, si Taehyun no podía regresar.... El iría con Taehyun.


ᴰᵒᶰ'ᵗ ᴳᵉᵗ ᴴᵘʳᵗ ⁻ ᴮᵉᵒᵐʰʸᵘᶰ ✉Donde viven las historias. Descúbrelo ahora