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Capítulo 5

Este capitulo contiene contenido explicito  (18+) si no te gusta o no es de tu interés puedes omitir esa parte de la historia. De caso contrario disfruta. 

Pov Rindou

Caminaba por la Ciudad con la esperanza de encontrar a alguien, han pasado meses desde que estoy solo, no sé cómo paso ni porque, solo sé que estoy solo y sin esa persona.

Estoy en un punto en donde seguir adelante, ya no es importante para mí, me siento cansado, acabado y vacío.

¿Qué puedo hacer solo?

¿Cómo podré seguir?

La ciudad se veía tan abandonada, sin vida, vacía; antes adoraba el silencio, ahora añoro que se acabe.

En la noche creo escuchar voces, pero solo es mi imaginación, a este paso acabaré loco.

A lo lejos vi un centro comercial, decidí entrar para ver qué cosas puedo encontrar, con suerte y encuentre helado, desde hace días he querido comer un poco.

Al entrar sentí nostalgia, normalmente aquí estaría lleno de personas, niños corriendo y disfrutando, pero ahora solo está vacío y deteriorándose poco a poco. Fui buscando una heladería, con suerte aún no se han derretido los helados.

Al llegar vi que estaba cerrado, sentí tanta frustración.

— Ahora tendré que abrirlo, pero ¿Cómo? — estaba fastidiado.

Ninguna de mis cosas me ayudaría para abrir la heladería, así que tendría que buscar.

Iba por los alrededores buscando un lugar que tenga objetos que sean de ayuda, pero la mayoría eran inservibles. Había encontrado uno, hasta que a lo lejos vi una cabellera albina.

¿Acaso será otra persona?

Con sigilo me fui acercando, vi cómo entraba a una Sex-shop. Después de que entro, le seguí y entre también.

No la veía por ningún lado, ¿Será que fue mi imaginación? Pero si yo estaba seguro de haber visto a una persona entrar aquí.

Fui buscando en los alrededores, con suerte y se había escondido, aunque ¿De qué se escondería?

Me iba acercando poco a poco hacia el mostrador, cuando ya estaba cerca, salió una mujer de ahí, gritando y con una katana.

Podía haberla esquivado, pero si lo hacía podía lastimarse, sin más deje que cayera encima mío.

Casi me arrepiento en el momento en el que casi me degolla, pero por suerte, se dio cuenta de que era otra persona.

Me preguntó si era un humano a lo he yo respondí que sí. Me sentía feliz, aunque mi cara no lo demostraba era feliz de saber que ya no estaría solo, ya no.

Aunque deseo que no sea una ilusión. Sin permiso toque su rostro, es suave y lindo, acaricie sus cachetes esperando que no sea un sueño. Es una mujer muy hermosa, con unos hermosos ojos verde, semejante a las esmeraldas. Mismo que comenzaron a llorar.

Le pregunté porque lloraba, y me respondió que tenía miedo de ya no volver a ver a nadie. Yo tenía el mismo miedo, cada mañana me levantaba con la esperanza de ver a alguien otra vez o de simplemente ya no seguir más en este mundo.

Sin más la abrace, sentirla en mis brazos fue cálido, ya tenía tiempo que no abrazaba a alguien así. Me sentí seguro de que esto no era un sueño y de que ya no volvería a estar solo, ya no más.

Nos fuimos a el hotel donde se queda, la ayude con unas cosas que ella llevaba; Haruchiyo, así me dijo que se llama, un bonito nombre. Aunque le gusta que le digan Sanzu.