~9~

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-¿Qué...?- pregunta este desconcertado.

Poco a poco, me separo de Rodrick y me pongo de pie en el suelo.

-A mamá le dará un jamacuco- dice Oliver

-No, porque tu no dirás nada- le miro.

-Si claro- sonríe él- , lo llevas claro

-Oliver- le digo.

De repente el timbre de regreso a clase suena.

-Mejor me...- dice Rodrick. La chica pelirroja asiente e intenta decir que se va con él, pero Oliver les detiene.

-Quietos. Bueno, tú si que te puedes ir preciosa, llámame luego-dice guiñándole el ojo a la chica, que sonrie y sale por la puerta.

-¡No es de tu incumbencia con quien...!

-¡Los martes! ¡Grupo de estudio y una mierda!- exclama victorioso- Estabas con él, ¿verdad?

Me quedo en silencio y él suelta una carcajada

-Te vas a enterar, esta tarde en casa va a ser increíble

-Oliver, no...

-Y tanto que sí- responde él. Luego sale corriendo por la puerta.

-Bueno- digo-, si querias que fuera una relación abierta, no veo por que no podemos salir a la vez de aquí

Él asiente y me rodea el cuerpo entre sus brazos.

-¿Estás bien?

Asiento entre sus brazos.

-Gracias- le sonrío separándome lentamente de él. Me besa la frente y salimos del aula juntos, cogidos de la mano.

Todo el que pasa se nos queda mirando y Rodrick aprovecha para rodear mis hombros con su brazo hasta llegar al pasillo que separa las clases de ambos.

*   *   *   *   *

-¿No habían chicos en el instituto?- pregunta mi madre esa misma tarde.

-Bueno, yo...

-¡Silencio! ¡Esta es mi puta casa y tienes que permanecer callada si quieres que te perdone por esta!

-¿¡Qué me perdones?!- exploto- ¿Qué he hecho mal?

-¡Exactamente lo que te dije que no hicieras!

-¡Puedo salir con quien me de la gana, es mi vida!

-¡Pero somos tus padres, y nosotros decidimos si...!- interviene mi padre

-¡Sois mis padres para lo que os interesa!- exclama.

-¿Cuándo hemos hecho algo de lo que tu hayas podido sacar la conclusión de que no estamos para ti?- pregunta mi madre, con un falso aire de decepción.

-Oh, déjame ver- digo- tengo una lista... De acuerdo, el recital de violín del año pasado, el día de la poesía de hace dos años, todas las veces que voy de compras, o, de hecho, todas las veces que salgo de casa si no es para ir a misa...

Pero mi discurso se ve interrumpido por una violenta bofetada por parte de mi madre. Acto seguido, un hilo de sangre comienza a gotear mi nariz. 

La casa se somete a un silencio abrasador.

-Estás castigada- dice esta- .Sube a tu cuarto y que ni se te ocurra salir.

Les miro vacilantes y luego subo las escaleras a mala gana, para tirarme en la cama y llorar debido a la mezcla de emociones que revolotean en mi interior.

A la mañana siguiente, cuando me siento en el tocador de mi habitación para arreglarme el cabello, veo como la bofetada del día anterior se ha convertido en un morado enorme que ocupa todo mi pómulo derecho.

Intento cubrirlo con maquillaje pero no sirve de nada; el color es tan intenso que el maquillaje no es suficiente.

Cuando llego al instituto, todos preguntan sobre dicho moretón, e invento que es un golpe que me dió mi hermano sin querer mientras jugaba a baloncesto en el jardín.

Todos lo creen, pero por alguna razón, Rodrick no.

Cuando me ve llegar por el pasillo hacia mi taquilla, arruga el ceño.

-¿Qué ha pasado?- pregunta apoyándose en la pared mientras abro la taquilla y guardo un par de libros.

-Nada, ayer Olliver estaba jugando a baloncesto y pasé por ahí y...- respondo justo antes de cerrarla.

-Ahórrate el cuento- me interrumpe de mala gana, dice colocando sus manos en mis muñecas- ¿quién ha sido? ¿tu madre? ¿tu padre?... ¿Tu hermano?

Al ver que no respondo, él niega con la cabeza.

-Lo sabía- suspira cogiendo mi mentón y alzando mi rostro para ver la zona dañada más de cerca.

De repente, una mano arrugada en un puño interrumpe nuestra conversación y va derecha a la cara de Rodrick, que queda contra la pared, y hace que se haga un rasguño en la sien. De esta comienza a brotar sangre.

-Quítale las manos de encima- dice la voz de Brian, mirando desafiante a Rodrick

-¿Se puede saber que haces?- le exclamo

-¡Ha sido él! ¡Él te ha estado haciendo daño! ¡Mira tu brazo! ¡Ahora tu ojo! ¡Ha sido él todo el tiempo!

-¡Qué dices!- le digo- No ha sido él ¿qué coño te pasa?

Pero no le da tiempo a responder, porque Rodrick se ha lanzado sobre él y lo ha dejado boca arriba en el suelo y aprovecha para pegarle puñetazos.

-¡Rodrick! ¡Para!- intento cogerle de los hombros.

Sin querer, él me da un golpe en la pierna.

Brian se da cuenta.

-¡Capullo de mierda!- exclama- ¡No la toques!

Brian hace fuerza y coloca a Rodrick debajo suyo y comeinza a pegarle igual.

Para ese momento ya se ha creado un coro de gente a mi alrededor.

-Nea- escucho la voz de Ruby como si estuviera a kilómetros de mi, aunque solo esté a unos pasos, que me agarra del brazo con cuidado y me tira hacia atrás.

De repente aparece la profesora de gimnasia, que consigue separar a los dos chicos.

Me acerco a ellos y alejo más a Rodrick de Brian.

-Los tres, al despacho del director. ¡Ahora!- exclama esta.- ¡Y los demás, todos a clase!

Los murmullos de decepción llenan el pasillo y en menos de lo que canta un gallo, este se queda vacío.

-¿Estás bien?- pregunto a Rodrick sujetando su rostro con mi mano derecha.

-Sí... Sí, tranquila- dice este, colocando su mano sobre la mia.

Me sonríe y le sonrío.

-Pasen- dice el director, invitándonos a pasar.



One Night Only// Rodrick Heffley ♡Donde viven las historias. Descúbrelo ahora