CAPITULO 4

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Esperaba a que mis pescados se terminara de cocinar cuando escuche un ruido.

Chasqueé la lengua poniendo los ojos en blanco. Era definitivamente una molestia.

Con lo inteligente que era no podía creer que no pudiera esconderse mejor de lo que lo hacia.

Llevaba siguiéndolo desde antes de la hora del almuerzo, esperaba que en algún punto se aburriera y se fuera a casa pero esta muchacha no se rendía. Ya incluso pasaba la hora de la cena.

Él sonido de su estomago se volvió a escuchar por tercera vez mientras tomaba uno de los peces para fijarme si ya estaba bien cocinado.

-No haz comido nada en casi todo el día- hable en voz alta- El otro pescado es para ti.

Se tardo pero finalmente salió de su escondite algo apenada.

-Lo siento. Solo quería constatar que estuvieras bien-

-¿Por qué? No tienes ninguna responsabilidad conmigo-

-Estamos en el mismo equipo-

-Entonces imagino que también haz ido a constatar que Naruto este bien-

Ella abrió los ojos y desvió su mirada de mí con vergüenza.

-Lo sabia-

Seguí comiendo en silencio sin siquiera mirarla y ella me imito.

Debía aceptar que su compañía no me desagradaba.

Sakura no era como las demás, ella sabia cuando debía quedarse en silencio y a pesar que estaba igual de obsesionada conmigo que las demás siempre me daba mi espacio.

Levante la vista y la encontre mirándome, rapidamente desvio la vista a su pescado.

No pude evitar torcer el gesto con una pequeña sonrisa.

-Naruto siempre se recupera con mayor rapidez-hablo tímidamente buscando conversación.

-¿Quieres decir que soy más lento en recuperarme? ¿Por eso estas aquí?

Mi expresión era seria pero por dentro estaba divertido. Me gustaba ponerla en apuros.

-No. Claro que no. Es solo que...-

Sus ojos pasaban de un lado a otro preocupada por decir algo equivocado.

-No importa- respondí- De todos modos tienes razón. Su velocidad de recuperación es buena.

Ella asintió timidamente.

Termine de comer mi pescado y como no tenia nada mas que hacer me concentre en ella.

Era la primera vez que la observaba detenidamente.Cabello rosa y ojos verdes. Era una interesante combinación.

-Hasta ahora jamas he visto a nadie con tu color de cabello-

Ella se detuvo en el momento en que estaba por darle otro bocado a su pescado y me miro.

-Si lo se. Es horrendo-

-A mí no me disgusta. Es único-

Parpadeé confuso. ¿Lo había dicho en voz alta?

Por su expresión me daba entender que sí.

-Quiero decir que...- me aclare la garganta- Como te dije no se lo he visto a nadie mas hasta ahora- desvíe la mirada.

Gracias a Kami ella no hizo la situación más vergonzosa y termino de comer su pescado en silencio.

Una vez que terminamos el viento inicio a soplar y ella se acerco un poco mas al fuego.

-¿Puedo hacerte una pregunta?-

SIGUE RESPIRANDODonde viven las historias. Descúbrelo ahora