SIGUE RESPIRANDO

CAPITULO 3

-Esta deshidratada, tiene marcas de torturas y no hace más que repetir que ellos están muertos- señalo Tsunade una vez que salió de la sala de emergencias- Gracias a kami, ella y él bebe están a salvo y fisicamente se pondrá bien pero mentalmente no estoy segura.

-Necesitamos hablar con ella urgente- presiono Naruto.

-Lo siento pero no esta en condiciones de hacerlo-

-¿Ino no es capaz de entrar en su memoria y ya?-

Tsunade me miro con enojo.

Yo apreciaba a Karin y ciertamente quería que estuviera bien pero en este caso el tiempo era indispensable para encontrar con vida a Sakura. Karin era una mina de oro en información y el hecho de que no podían saber absolutamente nada porque Ino no era capaz de hacer su trabajo, era algo que me exasperaba.

-Es más difícil de lo que parece. No todos son prodigios- defendió la Senju.

-¿No hay nadie mas de su clan que si sea capaz?-

-Ese tipo de jutsus solo se mantienen dentro de la rama principal-

Chasquee la lengua con fastidio y la Senju alzo una ceja con reprobación.

-Hay algo que no puedo entender- intervino Naruto cambiando de tema- ¿Porque Sakura? Digo, es una gran kunoichi pero para qué le serviría a Kabuto raptar a Sakura.

Los cuatro presentes se quedaron en silencio hasta que sentí la mirada del hokage sobre mí.

-Es algo obvio. Obito esta herido de gravedad. Kabuto seguramente es su aliado y Sakura es la mejor discípula que tiene Tsunade, quién mejor que ella para sanar a Obito.

Mi discurso convenció a todos menos a Kakashi. Lo veía en su mirada.

-Ademas que mejor cebo que ella para atraer tu atención y hacerte salir de la aldea-agregue mirando a Naruto.

-Por esa parte no se equivoca- aseguro el Uzumaki.

-Como sea. Apresurare la recuperación de la chica para que nos dé información sin necesidad de entrar a su cerebro.

-.-.-.-.

-Hay algo que he pospuesto por unas semanas debido a la búsqueda de Sakura- hablo el Hokage.

Ambos nos giramos extrañados hacia él.

-Zetsus blancos han invadido los exteriores de Iwagakure. Mis anbus están investigando pero me gustaría que vayas de persona.

-No se preocupe Kakashi-sensei no lo...

-Hablaba con Sasuke.

El rubio hizo un puchero y puso los ojos en blanco.

-Siempre es Sasuke-

Un pequeño golpe en la puerta atrajo la atención de todos. Kakashi autorizo y entro Sai aun con la mascara de Anbu raiz.

-La encontre-

Mi reacción fue casi inmediata. En unos segundos estuve delante de él.

-¿Dónde esta?-

-La lleve al hospital. Tienes marcas de tortura pero Tsunade dijo que no era tan grave, se encargara personalmente.

-.-.-

Cuatro horas en la que no se sabia nada de ella solo que Tsunade la estaba curando.

No entendía que tanto tenían que curarla si supuestamente estaba bien.

-¿Donde la encontraste?- le pregunte a Sai.

-En la guarida que me indicaste, donde esta la estatua de los huesos-

Había algo extraño en su mirada lo cual me inquieto.

-¿Que sucede?-

-No lo sé. Hay algo que me tiene extrañado-

-¿Qué cosa?- pregunto el Hokage.

-Verán. No había ninguna protección en la entrada del lugar. Ningún sello. Nada. Ademas el cuerpo estaba encima de una mesa de piedra atada con unas cuerdas, algo simple. Es como...

-¿Como?- presiono Naruto.

-Como si hubiese querido que la encontráramos... O al menos me dio esa sensación.

Obito dijo que le haría comprender lo que él sentía, en otras palabras, que lo haría sufrir, entonces, ¿Porque dejarla ir sin mas? Era contradictorio.

Mi cabeza se lleno de dudas hasta que la luz roja encima de la puerta se apago y las puertas se abrieron dejando ver a Tsunade exhausta.

-Tenia que recuperarse un poco antes del interrogatorio. Las medicinas aun le están haciendo efecto así que no exageren- advirtió Tsunade.

-No veo las horas de abrazarla- comento Naruto entusiasmado.

-Nada de sacudirla por los aires ni darle dolores de cabeza con los gritos de tu voz chillona- pidió la rubia.

-Mi voz no es chillona.

Un cosquilleo se formo en mi estomago, quería entrar a verla pero a la vez no, no sabia qué cosa podría decirle.

-¿Que dices si es Sasuke el primero en entrar?- pregunto Kakashi desviando toda la atención hacia mi- Después de todo no creo que pueda darle dolores de cabeza por sus gritos de alegría.

Naruto rio y yo torcí el gesto disgustado.

Mire a Kakashi una ultima vez y tras un leve asentimiento entre a la habitación.

Ella estaba sentada en la cama dándome la espalda. Conforme iniciaba a caminar a su alrededor notaba la palidez de sus brazos, los cuales estaban llenos de cortes y heridas, su cuerpo estaba aun mas delgado de lo que recordaba, incluso haciendo que su mandíbula se marcara aun mas dandole un aspecto enfermizo lo cual me revolvió el estomago. La culpa inició a carcomerme porque sabia que todo lo que le había pasado fue gracias a mi.

No quería asustarla así que inicie a moverme lentamente hasta llegar frente a ella.

Sus ojos conectaron con los míos y sentí tanto remordimiento al ver que su brillo había desaparecido completamente de estos, ahora tan solo parecían dos pozos vacíos.

Las ojeras pintaban la parte de abajo de sus ojos y sus mejillas reflejaban diferentes colores que variaban entre negro, verde y morado, exponiendo los abusos a los cuales fue sometida.

-Sakura- susurre con temor.

Unas ganas inmensas de abrazarla me invadieron. Quería hacerlo, quería sentir su calor, quería repetirle que nadie jamas volvería a hacerle daño, que esta vez no la abandonaría como lo había hecho antes. Quería decirle que esta vez él seria su lugar seguro como una vez ella fue la de él.

Apenas alce ligeramente mis brazos hacia ella  sentí algo clavandosé en mi pecho.

Era un bisturí.

Toda mi zona del pectoral derecho me quemaba, la camisa que llevaba se empapo en unos segundo mientras Sakura seguía haciendo presión sobre este.

Me costaba respirar. Apenas pude darme cuenta de lo que estaba sucediendo cuando inicie a perder la consciencia.

Sakura me estaba matando.