Ja Tonto Ml (𝔸𝔹𝔸ℕ𝔻𝕆ℕ𝔸𝔻𝕆)

Capítulo 23

Wei Chi Li no dio un paso adelante precipitadamente, sino que la siguió pacientemente hasta la puesta del sol. Solo entonces, Wen Qiong se despidió felizmente de sus amigos, caminando contenta hacia el este de la ciudad.

Ella solo había traído dos sirvientes pequeños, y ambos cargaban varios artículos, se rezagaban y caminaban con grandes dificultades.

Esto hizo que las acciones de Wei Chi Li fueran excepcionalmente suaves.

Inspeccionó el área y dentro de 2-3 pasos, saltó a la pared y corrió por el techo por un tiempo, luego saltó y aterrizó en la entrada de un callejón al lado de Wen Qiong.

Luego extendió la mano y tiró, capturándola. Wen Qiong fue tomada por sorpresa y estaba a punto de gritarle a alguien, pero su boca estaba cubierta con fuerza, por lo que no pudo decir una palabra.

Wei Chi Li la abrazó y se retiró al fondo del callejón en silencio sin que nadie se diera cuenta.

“¡Cinco es gris (!)! Dare WuWuWuWuWu...” Wen Qiong luchó desesperadamente, pero Wei Chi Li no se movió. Con una mano cubriendo su boca con fuerza, otra mano metió la mano en sus mangas y sacó el brazalete y lo colocó cerca de su cuerpo.

(!)五是灰 Wu shi Hui: Cinco es gris. Creo que quería declarar su estado o testamento diciendo que gritaría o algo así. Porque en mandarín 'Wu Shi Hui' suena como 'Wo Shi Hui', también conocido como 'I am hui/I will'

Después de pensarlo un poco, sacó 3 taels de plata de su bolso y los volvió a guardar.

Wei Chi Li negó con la cabeza. Originalmente era una ciudadana joven y de buen comportamiento con un buen avance profesional. Pero desde que llegó a la antigüedad, había golpeado a la gente cada dos días y ahora, en realidad estaba robando en medio de la calle.

Después de pensarlo, parece ser principalmente para Liu Luo Yi.

Wei Chi Li se había resignado a su destino y le dio otro tael de plata para tranquilizarla. Luego soltó su mano y en el siguiente segundo, saltó al techo y desapareció.

Wen Qiong, que fue liberada repentinamente de la restricción, rápidamente jadeó varias veces y luego se sostuvo la cabeza mientras gritaba: “¡Alguien venga! ¡Hay un ladrón! ¡Alguien venga!"

Wei Chi Li lo ha hecho con agilidad y pulcritud, por lo que cuando regresó a la calle principal, volvió a ser una heroína íntegra, sin dejar evidencias de delitos.

Después de haber vagado y regresado a tientas a la posada, la luna ya colgaba sobre los sauces, rociando rayos límpidos y solitarios como el agua. Wei Chi Li levantó el brazalete contra la luna y miró, suspirando profundamente.

¿Qué le pasaba? ¿Por qué estaba tan preocupada por Liu Luo Yi? (𝙴: 𝚍𝚎𝚜𝚙𝚞𝚎́𝚜 𝚍𝚎 𝚛𝚘𝚋𝚊𝚛 𝚙𝚘𝚛 𝚎𝚕𝚕𝚊 𝚝𝚎 𝚍𝚊𝚜 𝚌𝚞𝚎𝚗𝚝𝚊??)

Bajo la luz de la luna, el brazalete de color blanco plateado ya no tiene su apariencia arcaica habitual y parecía tener una capa de plata recién recubierta, envolviéndola en una luz y una sombra nebulosas. Wei Chi Li lo limpió y se lo volvió a poner en las mangas.

Liu Luo Yi debería estar dormida en este momento; se lo daría mañana.

Wei Chi Li entró y estaba pensando en acostarse en la cómoda cama y dormir hasta el amanecer. Sin embargo, cuando subió las escaleras, escuchó un leve sollozo.

Wei Chi Li dejó de caminar cuando empezó a sudar frío.

Podría ser... Wei Chi Li negó con la cabeza. Descartando los pensamientos extraños en su mente. Respiró hondo mientras caminaba lentamente hacia el sonido de los sollozos.