ᴇʟ ɴᴜᴇᴠᴏ ʟᴇɢᴀᴅᴏ ── "ᴇsᴛᴏʏ ʟɪsᴛᴀ ᴘᴀʀᴀ ᴅᴇsᴄᴜʙʀɪʀ ǫᴜɪᴇɴ sᴏʏ"
¿Que pasara cuando una niña que creció oculta bajo maltratos y una vida que no era real encuentre una familia, una verdad y un poder?
Elizabeth no estuvo en el lugar para ella al crecer, pero...
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. . . el cáliz de fuego
Durante toda la mañana de Halloween de lo único que se hablaba en Hogwarts era sobre el torneo.
Todo el mundo se mostraba ansioso por saber quien ganaría y también por poner sus nombres en el grandioso cáliz.
Elizabeth y sus amigos se dirigían al gran comedor para la cena y así mismo para ver a los elegidos de las escuelas.
—Krum será quien gane en Durmstrang—aseguró Blaise mientras se dirigían a la mesa de Gryffindor.
—No hay duda de eso, además su director básicamente le prohibió a los otros participar —murmuró la castaña mientras tomaba asiento junto a Luna, frente Rolf y Blaise.
—¿Quién creen que ganará en Hogwarts?—preguntó la rubia.
—Para ser honesto, no le tengo mucha fe a nadie —respondió Rolf.
Durante toda la cena no hubo ni un solo momento de silencio, pues todo el mundo estaba aún más ansioso que durante la mañana.
Finalmente, cuando todos terminaron de comer, el profesor Dumbledore se puso de pie y habló.
—En tan solo unos minutos el cáliz estará listo para anunciar a los campeones.
Una serie de gritos de emoción empezaron a soñar cuando el director hizo apagar todas las velas, dejando al comedor únicamente iluminado por el fuego del cáliz.
Elizabeth sintió una extraña sensación cuando las llamas del cáliz brillaron con mayor intensidad y un trozo de papel voló y fue atrapado por Dumbledore.
—El campeón de Durmstrang —leyó con voz alta y clara— es Viktor Krum.
Gritos de los estudiantes de su escuela sonaron a gran escala mientras este se dirigía a una sala tras la mesa de profesores.
