Damian y la puerta secreta. [EDITANDO]

11#

.

.

.

-¿Cómo llegaron acá?__ preguntó olvidando que seguía en los brazos de su mejor amigo.

-La verdadera pregunta aquí es "¿Qué mierda haces vos en este lugar?!"__ dijo con ironía Jason.

-Ah, no lo sé quizás tratando de escapar!__ exclamó con el mismo tono que el mayor, si le hablaba de ese modo él respondería igual.

-¿No te enseñaron en la liga que no debes entrar a sitios que no sabes a donde llevan?__

-No, pero me enseñaron a desfigurar gente ¿quieres que te muestre Drake?__  finalmente bajo de los brazos del alien para encararlo.

-Oh vamos! Vinimos hasta aquí y así nos agradeces?!__

-Nunca les pedí que vinieran, nisiquiera entiendo como se dieron cuenta de mi ausencia!__

-Dami, claro que lo notariamos, eres nuestro hermano menor y porque nos importas estamos aquí__ el mayor se agachó a la altura de su hermano para colocar una mano sobre el hombro de este.

El moreno permaneció en silencio sin desviar la mirada de los ojos de Richard, buscaba la mentira, buscaba el engaño, la broma, la duda pero no encontraba nada y no lo entendió.

-Estaba por salir de aquí yo solo, no debieron venir__ se apartó de su hermano unos pasos antes de continuar__

Entonces antes de que cualquiera pueda evitarlo salio corriendo, no le importaba que lo hayan venido a buscar, solo lo confundía, siempre sintió que no les importaba, que era una carga o una molestia y el que de la nada vengan a ese lugar para llevarlo de vuelta a casa provocaba un molesto sentimiento en el que no deseaba indagar, así que siguió corriendo hasta volver a la puerta de la casa, no había tiempo para hermanos idiotas o sentimientos desconocidos, ahora lo importante era rescatar a su amigo.

Pero cuando iba a abrir la puerta está lo hizo por si misma, sabía que lo estaban esperando, sabía que posiblemente terminara cayendo en una trampa pero no importaba porque si es a él a quien quieren, a él lo tendrán con tal de que aquella copia estuviera bien porque ya no era una copia, era su amigo.

A cada paso que daba se sentía observado como si cada rincón, cuadro o mueble estuviera infestado de ojos, ya no era el lugar que vio al llegar, estaba descuidada y oscura, con cada paso que daba sentia la madera bajo sus pies crujir.

Y nuevamente llegó a donde todo empezó a esa maldita cocina, carecía de brillo pero eso no le era importante, miró a su alrededor esperando la llegada de alguno de esos seres y entonces lo vio, el otro Drake que se acercaba poco a poco a él.

-Mi querido...hermanito Damian__ llamó arrastrando sus palabras__ ¿Finalmente decidiste volver a casa?__ cuestionó una vez frente al moreno.

-Iba a volver pero tomaron algo que me pertenece__ aseguró sin inmutarse ante  la presencia del otro.

-Hermanito, te extraño ¿por qué no te quedas con nosotros? Para siempre...__

Damian ya no contestó, pero en su mente se obligaba a no creer en aquellas palabras. Su madre lo había entrenado, quizás cayó la primera vez pero no volverá a pasar.

No tenían ojos, sino botones pero aún así podía leer muy bien sus expresiones así que cuando el rostro que parecía suplicante cambió a uno serio se aseguró a sí mismo que tenía que descubrir lo que pasaba, esto no era normal y la curiosidad lo estaba asfixiando.

-Si quieres a aquella marioneta recuperar con Richard debes hablar__ comunicó dando media vuelta.

-<tt>__ observó como la figura de quien tenía la apariencia de uno de los adoptados se alejaba poco a poco.