Damian y la puerta secreta. [EDITANDO]

16#

•

•

•

—DAMIAN?! — ambos cubrieron la boca del otro, ese grito había sonado más fuerte de lo que debía en la situación en la que estaban.

Poco a poco ambos dieron un paso dentro de la habitación.

—Por qué Dami está aquí? — preguntó Jon desconcertado mirando el cuerpo del niño colgado inconsciente.

—Esto no puede ser, se supone que Damian debe estar jugando ahora mismo — replicó el mayor dudando si acercarse o no, ya que podía ser una trampa.

—Puedo oír los latidos de Dami a la lejanía, estos no son sus latidos — comentó el niño activando nuevamente su visión láser.

Red Robin permaneció en su sitio tratando de analizar la situación, no entendía que estaba pasando por la cabeza de los brujos, quizás solo era una distracción y estaban viniendo por ellos pero, el problema era que aquel ser frente suyo idéntico a su hermano menor aún tenía un corazón latente.

—Jonathan, espera — pidió colocando una mano en el pecho del niño evitando que avanzará hacia el cuerpo inconsciente  — Podrías revisar sus signos vitales y ver de qué está hecho? — preguntó a lo que el menor asintió.

Poniendo pie en el suelo el kriptoniano hizo uso de su visión de rayos x para analizar el cuerpo ajeno y frunció el ceño desconcertado.

—Es humano — susurró a lo que Tim se mordió el labio inferior con incertidumbre.

—Pero, si no es Damian, quién es él? — ese era el pensamiento en las mentes de ambos.

•

•

La negra cola se meneaba con complacencia mientras observaba la casa en la que estaba su dueño, maulló con gusto y empezó a caminar usando su flexible cuerpo para adentrarse por la ventana de la casa.

Hace un rato había visto lo que quedaba del cuerpo de la anterior marioneta de las arañas siendo incinerada, ese debió haber sido Jason sin duda y si no le fallaba la memoria eso solo podía indicar que ahora todos los hermanos de Damian debían estar en manos de las arañas.

—Cómo piensan ayudarlo así? Solo son un estorbo — refunfuñó mientras se metía en la casa — Yo si lo ayudaré— afirmó orgulloso.

Levantando la mirada se detuvo abruptamente ante lo que veía, ahí estaba Damian y en sus manos yacía el amuleto que se suponía tenían las marionetas que interpretaban a las figuras maternas de su amo.

—Amo Damian — llamó a lo que el menor se volteo a verlo, su rostro y manos estaban cubiertas de líquido negro — Lamento llegar tarde

El menor negó con la cabeza y se acercó guardando en su ropa en amuleto.

—Pensé que esos tipos te habían capturado, me alegra ver que estás bien — dijo sonriendo ligeramente agachándose a la altura del felino para darle una pequeña carician la cabeza — Vámonos Pennyworth, es hora de ir a visitar a padre— afirmó empezando a salir de la casa a lo que el felino lo siguió.

El felino miró una última vez el interior de la casa antes de que la puerta de ésta se cerrase completamente solo pudiendo darle un vistazo a los cuerpos desmembrados que se deshacían con rapidez.

— Y el muchacho? — preguntó avanzando a la par del Wayne.

— Esas cosas lo separaron de mí cuando inició está mierda — contó sin detener el paso.

— Bueno, igual eso no importa — dijo el felino restándole importancia.

— No importa? — preguntó abruptamente el moreno deteniendo sus pasos.