Damian y la puerta secreta. [EDITANDO]

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Pov: ?

La puerta era golpeada de forma constante, mi corazón latía como loco, sabía lo que ocurriría y no podía permitirlo, volteé a ver a mi hermano mayor podía notar su cuerpo tenso y como sus manos temblaban, yo tampoco estaba mejor posiblemente estaba peor pero eso no importaba, tenía que encontrar una solución, no podíamos dejar que entrase, tome aire y fui por mis hermanos menores, allí estaban ellos acurrucados entre sí, estaban bajo la cama temblando ligeramente, en sus ojitos solo resplandecía el miedo, no los culpaba.

__Oigan...cambien esa cara, nada malo les va a ocurrir__ esperaba mis palabras al menos los tranquilizará un poco, tan solo un poco__ Estamos aquí, los vamos a proteger__ dirigí mi mirada en los ojos Jade que ya se encontraban inundados de lágrimas__ pequeño, estarás bien, no llores porfavor__ si, estaba suplicando, suplicaba que olvidaran, que siguieran ignorantes a lo que ocurría.

__¿Nos viene a matar?__ la pregunta de Maicol me hizo temblar.

__Mira...todos morimos en un punto Maicol, pero mientras este aquí mientras Ricky y yo estemos aquí nada malo les va a pasar, no morirán!__

El felino negro escapó de los brazos del moreno que al ya no sentirlo exclamando el nombre de esté.

__Mierda! Dami, Dami quédate aquí yo iré por él ¿ok?__ pedí, lo último que quería es que saliera de su sitio.

__¡¡Si no abren la maldita puerta malditos infelices juro que la mandaré abajo!!__

Los gritos de aquel hombre seguían, mis brazos temblaban, todo mi cuerpo si era sincero, los golpes y gritos continuaban y no me dejaban pensar, escuchaba como Damian me decía que le trajera a negrito, oía los murmullos de Ricky buscando alguna forma de protegernos y los sollozos de Maicol, maldita sea!

__Jack..Jackson...¿Estas llorando?__

Cuando escuche aquello volví a mirar a los pequeños los cuales me veían sorprendidos ¿yo llorando? Nunca lo he hecho al menos no enfrente de ellos, dirigí una de mis manos a mi mejilla y si, era cierto estaba llorando.

__Solo...ocúltense!__ exclamé levantándome para así sentarme en la cama.

__La única solución es la ventana!__ no podía respirar correctamente, sentía mi cabeza palpitar pero la idea de Rick me hizo enojar.

__¡¡Estamos en el tercer piso!! ¿Cómo carajo saldríamos por allí? Además Maicol le tiene miedo a las alturas!__ mi garganta picaba mientras mis lágrimas no dejaban de mi rostro manchar, solo quería desvanecerme de una vez, olvidar todo esto y vivir en paz con mis hermanos.

Todo me daba vueltas, quizás me iba a desmayar o a morir, no podía respirar, sentía como me ahogaba con mis propias lágrimas, mi cuerpo temblando y el lugar dando vueltas, solo quería vomitar y desaparecer.

Fue entonces en qué lo pude ver aún con las lágrimas de por medio pude ver al gato sentado viéndome, como podía estar tan tranquilo, mire a su lado.

__Mierda...__ susurré acercándome rápidamente a donde estaba el gato, en la pared parecía...golpee unas cuantas veces y si, quizás no sea grande pero al menos podrían caber Damian y Maicol__ ¡Rick! Movamos la mesa a la puerta lo retendrá un rato y luego ven a ayudarme!__ dije yendo a la mesa, por suerte mi hermano me siguió sin preguntar.

Movimos la mesa y algunas cosas  frente a la puerta para así tomar la mano de mi hermano.

__Dame el cuchillo__ le pedí a lo que me miró sorprendido, era algo que habíamos robado en una de esas noches en la que teníamos que salir.

__Bien...__saco el cuchillo y me lo entregó.

Corrí hacia la parte de la pared y empecé a darle algunos cortes hasta que finalmente pude mover lo que suponía era la puerta, si, que felicidad, no me había equivocado. Moví la puerta y lo que me encontré no era lo que esperaba, era algo mucho mejor.

__Ricky! Ven a ver esto rápido!__

__¡¡UNO POR UNO LOS MATARÉ!!

El mayor se acercó a su hermano y sonrió, no sabía que había del otro lado pero cualquier cosa sería mejor que lo que ocurría ahora mismo.

__Ve por Maicol y Damian, yo pasaré y les diré desde el otro lado si es seguro__

Asentí con la cabeza y fui en busca de los pequeños.

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__Ese enano!__ exclamó el mercenario pateando un árbol.

__Debemos buscar una forma de entrar sin que se den cuenta...__

Jonathan soltó un suspiro, el ambiente era tenso pero lo que le inquietaba era que su instinto le decía que ya sabían que estaban ahí. No podía explicarlo pero era como si los mismos árboles los espiaran.

Y allí lo entendió, estaban en un territorio, miro a uno de los hermanos y fue por Tim, lo cargó y sobrevoló alto aún si este se aguantó el grito.

__Jon! ¡¿Qué mierda?!__

__Escucha, debes susurrar, abajo no estamos a salvo y aquí apenas, el cielo no nos espía pero todo lo demás si.__ susurro esperando a que el chico le entendiera y por el rostro de esté podía notar que si lo había hecho.

__¿Puedes escuchar los latidos de Damian?__ preguntó a lo que Jon asintió.

__Estan en la mansión pero aquí está el tema, no hay más latidos, estamos solos, si los descarto a ustedes y a Damian te puedo asegurar que no hay nadie más con un corazón latiendo en este lugar...aunque__

__Eso es normal, aquellas cosas no están vivas, son cascarones vacíos__

__Tim....es que, si hay otro latido, es débil pero esta aquí__

El detective se sorprendió ante ello, eso no debería ser posible.

__Dices...que hay otra persona viva aquí? __

__Si, como dije es débil pero esta presente y dentro de la mansión__

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Nos vemos!