MI LIBERTAD ┆km ඞɞ

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NARRA jimin

Yo solo quería agradecerle a Jungkook, pero como siempre él es un mentiroso. No quiero que me vuelva a tocar nunca más.

-Minnie amor, fue una equivocación-no puedo controlar las palabras que salen de mi boca.

-¡Me quiero morir! ¡Ya no quiero vivir! ¡No quiero sufrir más! ¡Te odio Jungkook! ¡Te odio, te odio, te odio! ¡Ya no quiero vivir más! ¡Mátame como tu padre mato a tu madre! ¡Mátame a golpes!

Jungkook me mira con furia mucha furia, me toma desde mis hombros con mucha fuerza, sin embargo, no separo mi brazo de mi pecho.

-Te enseñare a temerme Jimin, no voy a dejar que menciones a mi madre.

Me arroja bruscamente al suelo, mientras que comienza a patearme. Intento alzar un poco mi brazo para que no lo golpee, pero todo es en vano ya que su golpee me lastima más.

Levanto la mirada y veo cómo va quitándose su cinturón.

-¡No Jungkook! ¡Po-por favor no! -pero demasiado tarde su cinturón golpea mis piernas.

Pero lo tira al piso para levantarme y rasgar el polo que traigo encima alzando mi brazo lastimado, me arroja a la cama y luego vuelve a tomar el cinturón.

Golpea muy fuerte mi espalda, ruego a que se detenga, pero se hace de oídos sordos. Lloro a mares por lo horrible que se siente.

-Po-por favor Jungkook .

Sigue azotándome hasta cansarse. Oigo como deja caer el cinturón, al fin me dejara. Intento sonreír, sin embargo, siento como baja mi pantalón junto a mis boxer.

-Otra violación no, porfa-favor.

Otra vez entro en mí, demasiado brusco. Mi vida es un infierno y será así hasta mi muerte y solo espero... no anhelo que hoy lo sea.

NARRA JUNGKOOK

Salgo de jimin bruscamente, el no deja de derramar lágrimas, aún sigue evitando mirarme. Esta de esa manera desde hace cuatro horas.

Acaricio su vientre esperando poder tener otro hijo, gracias a mi el perdió a tres bebes... todo gracias a mis golpes.

-Desde ahora todas tus noches serán así, desde ahora siempre vas a temerme-el solo tiembla soltando un sollozo.

Me levanto aun desnudo para apagar la luz. Vuelvo a la cama para acostarme con mi pequeño. El se da la vuelta dejando ver su espalda el cual esta tornada de color rojo.

No debo arrepentirme de lo que hice, el insulto a mi madre... el dijo que me parecía a mi padre ¿Me parezco a él? Tal vez, pero además me estaba faltando el respeto así que no, no me voy a arrepentir.

Me quedo mirando el techo, mientras que jimin mira a un punto fijo y aun apegado con su brazo a su pecho. Debo hacer que un doctor lo vea, estoy seguro que rompí su hueso y deben ponerle un yeso.

Pasan las horas y veo que aun jimin no se duerme. Solo siento que se remueve y me hago el dormido.El se levanta de la cama soltando algunos gemidos que intenta callar, pero claramente se escuchan. abro un poco mis ojos para ver como sale de la habitación desnudo.

Voy tras de el, mientras que  jimin se apoya para seguir caminando. Hasta que llega a la puerta de la habitación de Seoyeon. Lo toca suavemente solo pasaron unos segundos cuando sale por la puerta.

-¿Mi niño que sucedió? —lo mira de arriba y abajo viendo como de sus muslos aparecen sangre y otros fluidos.

-Po-podría dormir hoy contigo Seoyeon, so-solo por esta noche por fa-favor-tartamudea.

Seoyeon limpia una lagrima que sobresale de su ojo. Asiente en respuesta, y ayuda a jimin a entrar a su habitación.

De esa forma fue una semana, jimin escapa por las noches a la habitación de Seoyeon. Mi pequeño no dejaba que ningún doctor o doctora vea su brazo lo cual me preocupaba.

Desde hoy los empleados empezaron sus vacaciones por lo cual todos tenían que irse incluyendo Seoyeon.

-Por favor Seoyeon no te va-vayas-le dijo jimin a Seoyeon mientras la tomaba desde su brazo.

—Mi niño -acaricia su mejilla, la fulmino con la mirada ya que hemos hablado sobre esto.

Desde ayer tiene prohibido hablarle o tocar a jimin, el solo debe tenerme a mi a nadie más, yo soy su hombre, yo soy la única persona que lo amo.

-Seoyeon por favor, me va a ser mucho daño, el me va a matar- llora a cantaros.

Ruedo los ojos y me acerco a el, lo separo haciendo que Seoyeon salga de la casa con todas sus cosas.

-¡Seoyeon por favor! -grita, pero demasiado tarde ya ella se había ido.

Suelto a jimin, cuando lo hago el voltea a verme asustado. Y no duda ni un segundo mas en correr. Voy tras el hasta llegar a nuestra habitación.

-jimin debemos hablar-el solo se apega mas a la esquina de la habitación- jimin, amor-no responde se queda en silencio.

Me acerco a el, lo tomo y lo levanto desde sus brazos. Sus ojos me miran con miedo, o con terror mas bien.

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-¡Traga! -grito apegando su rostro al plato hasta tal punto de llegarlo a destruir con él.

El solo llora negando con su cabeza a tragar la sopa que le prepare. No me habla, ha estado callado desde hace cuatro días y eso me molesta y desespera.

-¡Traga jimin! -levanto su rostro para ver que el plato esta destruido y su cara tiene algunos cortes-¡Porque no me hablas!

Lo zarandeo para que hable sin embargo lo único que escucho son sus sollozos y eso hace que lo haga con mas fuerza.

-¡Carajo!

Tomo su cabello enredándolo entre mi mano, para abrir la puerta trasera y lanzándole haciendo que caiga sobre la nieve.

—¡Te vas a quedar ahí hasta que me hablas! —grito.

Vuelvo a entrar a la casa ya que me estoy congelando, cierro la puerta para que no entre y confiado me voy a mi despacho ya que las rejas están electrificadas y mi hambre se fue a la mierda.

Cuando llego, voy directo a mi escritorio para ver desde las cámaras como jimin, mi pequeño esta apoyado en la pared abrazando sus piernas con un brazo y el otro en el pecho. Mañana haría que si o si le coloquen un yeso no me arriesgare a que pase a mayores.