9

845 78 0
                                    

NARRA JUNGKOOK

Salgo bruscamente de la boca de Jimin para yo mismo masturbarme haciendo que mi semilla se esparza por todo su cara y cuerpo.

Mi pequeño al ver que he termino, abraza sus piernas ocultando su rostro entre ellas. Se escuchan algunos sollozos que me destruyen.

-No le hare nada a Min -le digo esperando que ya no se sienta mal.

Solamente se remueve al sentir mi mano encima de su hombro desnudo.

-M-me qui-quiero ir de aquí-susurra.

-No, te quedaras aquí conmigo-contesto seriamente.

No pienso que se vaya y me deje aquí solo, somos esposos y el debe estar aquí a mi lado.

-Sabes amor he pensando en renovar nuestros votos.

El solo niega con la cabeza, el día de nuestra boda fue el mas feliz de mi vida, pero para el...creo que fue todo lo contrario.


M-N-no Seoyeon, no me quiero casar con ese señor le dice mi pequeño a la empleada.

-Jimin, vamos. Los invitados están afuera, el señor Jungkook se molestara.

-No, yo no le quiero casarme con el, no lo conozco. No se nada de mi, no me quiero casar con un desconocido.

Abro la puerta bruscamente haciendo que Jimin y Seoyeon se asusten.

-Fuera Seoyeon - habló, ella solo asiente hace su reverencia y sale de la habitación dejandome junto a mi futuro esposo --- deja de hacer tu rabieta Jimin, vamos al altar ahora.

-No me quiero casar contigo - doy un paso haciendo que el retroceda - T-tu me haces mu-mucho daño, yo no qui-quiero  que me golpees.

-¡Vamos Jimin!  - exclamó.

Le dormir una bofetada tan fuerte haciendo que se tropiece y caiga. La tomó de ambos brazos y empezamos a salir.

-Pon una puta sonrisa, o juro que esta noche deseadas querer que el tiempo regrese- el solo mueve su cabeza asustado.

Regreso otra vez al altar donde debo esperar a Jimin, mientas tanto veo a Seoyeon, mi padre y algunos del equipo de seguridad y el padre claro. Nadie más podia venir a mi boda, no me arriesgaría que Jimin pidiera ayuda.

Lo amanezo con  la mirada haciendo que camine a pasa lento, en su rostro no tiene una sonrisa más bien es una mueca que muestra que no quiere casarse conmigo.

Cuando llega al altar lo tomó de ambas manos apretandolas haciendo que suelte un gemido de dolor. El padre hizo que dijéramos nuestros votos los cuales el mio fue algo único sin embargo Jimin.... dijo cualquier mierda.

Mi padre y yo empezamos a tomar algunos tragos mientras que Jimin permanece sentado a mi costado con la mirada agachada y llorando. Luego de varías horas todos se fueron, mi esposo me miraba aterrado.

-N-no- susurro.

Me acercó a el  y rápidamente empecé a quitar su traje sin preocupación de que alguien nos vea ya que todos se fueron.

-T-te lo su-suplico -tartamudea.

-Te dije que tuvieras una puta sonrisa en el rostro y no lo hicistes - golpeo su mejilla - ahora pagarás.

Empecé a golpear su cuerpo desnudo. El intentaba hacer de un ovillo, pero no podía cada golpe era más guerra que el anterior.

-Me las-lastimas.

Sigo golpeando hasta que qued casi inconsciente, sin embargo, de la cocina traigo una cubeta de hielo y se lo arrojó encima.

-Haremos el amor.

Jimin intenta levantarse, pero no puede, doy eso a mi favor para empezar a hacerlo mio otra vez. Penetrarlo de una sola estocada haciendo que llore.

-M-me lastimaste feo, jungkook -lo penetro con mucha brusquedad- , me e-stas destruyendo.

Ambos nos acostarnos. Jimin se acuesto en el lado izquierdo, yo al acercarme a el se aleja haciendo que me siento mal.

-Descansa amor -aun ambos desnudos, solamente apago la luz.

Jimin mira cada uno de mis movimientos con terror. Abro la boca para hablar, pero el cierra sus ojos.

-Solo descasa -es lo único que digo, agarro la frazada y tapo a ambos.

-¿Puedo ir a la Sa-sala? -pregunta -así podrás dormir mejor so-solo y yo con Min.

-No Jimin, entiende. Desde hoy solo dormirás conmigo, ya se acabaron tus paseos nocturnos a la sala.

Jimin solamente se queda en silencio y ya no dice nada más. Pasan las horas y ninguno de los duerme, pude ver que los ojos de mi pequeño en más de una ocasión, pero el rápidamente los abrió.

Sin embargo, ya a las cuatro de la madrugada los cierra algo que me tranquiliza. Cuando estoy a punto de hacer lo mismo una voz se hace presente.

-No Yoon, no hagas eso -dice seguido de una risa—, eres muy lindo Yoon... gracias por hacerme feliz.

Me levanto sobresaltado viendo como Jimin tiene una puta sonrisa en su rostro por soñar con ese tal "Yoon" sigue riendo mientras que sus ojos se mantienen cerrados.

Mis celos empiezan a salir a flote y no dudo en darle una bofetada a Jimin haciendo que rápidamente se despierte.

-¡Ahora puto zorro me dirás quien es esa mierda de Yoon!

MI LIBERTAD ┆km ඞɞDonde viven las historias. Descúbrelo ahora