Él capitán de la armada revolucionada se aventura a desenmascarar el tráfico de armas precisamente de la isla en "Desrrosa" en la que se encontrará una muñeca rota.
Ustedes se preguntarán, ¿Por qué sabo se interesaría en una muñeca rota?
Bueno, es s...
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La batalla contra Donquixote había acabado de forma repentina ante la resistencia de mugiwara no Luffy, el cuál se encargó de acabar con el pirata de un solo golpe, cumpliendo su palabra como tal.
Todo esto pasó tan rápido que cierto rubio estaba realmente sorprendido.
Hace unas horas Dessrosa corría el riesgo de ser partida en varios pedazos junto con toda su gente (Incluyendole) a manos de Doflamingo. Y ahora yacía frente al ya inconsciente de su hermano menor.
—Demonios, ojalá se la hubiese enseñado.— murmuró mirando a la destrozada muñeca.
Sabo terminó contándole a los mugiwara lo que había Sido de él hasta ahora. Por supuesto revivir aquellos recuerdos le resultaba doloroso, de tal manera de que estaba seguro que aquella noche no podría dormir por falta de aire pero aún así había tomado la decisión de contarles.
Aquella noche se la pasó descansando en una casucha vieja, sin tomarse la molestia de avisarle a koala o a alguien más, simplemente necesitaba estar solo.
El rubio cerró los ojos por unos segundos antes de notar los movimientos de la muñeca en su bolsillo.
—¿Otra vez tú?— inquirio alzandola en sus brazos hacia su rostro, —Eres tan fea sin piernas.
El rubio recibió un golpe en su mejilla.
—Auch, ¿Otra vez?
La muñeca detuvo sus movimientos.
—a veces creo que me entiendes..— murmuró pensativo antes de entrecerrar sus ojos y acercarla a su rostro, —Fea.
Sabo por segunda vez recibió un fuerte golpe y esta vez fue en su ojo izquierdo.
—¡Auch eso me dolió!
El rubio enmudeció al observar una diminuta curba en lo que parecía ser la boca de la muñeca.
Incrédulo la acercó más.
—¿Te estás riendo?
La boca de la muñeca volvió a la normalidad.
Sabo frotó sus ojos con sus dedos.
—Debo estar muy cansado..— murmuró dejándose caer perezosamente en una vieja colchoneta.
La pequeña muñeca acabó encima del fornido pecho del rubio, quién soltó una pequeña risita al notar que la muñeca había detenido cualquier clase de movimiento.
—Parezco un niño...— Susurró posando su antebrazo sobre su frente, —Estoy loco..
La muñeca se preguntó la razón por la que el einko murmuraba extrañamente lo que pensaba en algunas ocasiones. «Él es extraño.»
!["Mujercita" [Sabo x Lectora]](https://img.wattpad.com/cover/338234856-64-k854880.jpg)