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Capitulo cinco.

______ estaba tumbada en lo que parecía ser el suelo, en un estado de agonía ante los punzantes dolores de cabeza que parecían aumentar más y más con el pasar de los segundos

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______ estaba tumbada en lo que parecía ser el suelo, en un estado de agonía ante los punzantes dolores de cabeza que parecían aumentar más y más con el pasar de los segundos. No sabía si el rubio estuviera cerca, es más, no tenía ni la más remota idea de dónde estaba en esos momentos.

Los dolores parecieron eliminar cualquier indicio de inteligencia en esos momentos.

— Veo que despertaste.— Resonó la voz del rubio a unos pocos metros de ella.

Sabo se acercó con lo que parecía ser un vaso con agua.

—Ten, el agua ayuda en los momentos de resaca.— añadí entregandoselo en la mano.

Ella no tardó en aceptarlo y beberlo de una sola vez. Permaneció unos segundos en silencio antes de mirar al rubio quién bebió de un segundo vaso lo que parecía ser agua.

—¿Que fue lo que pasó ayer?

El pobre rubio casi se atragantó con la pregunta.

—Ejem nada en especial, solamente tomaste por error el vino.— respondió desvíando la mirada notablemente.

Ella ladeo la cabeza hacia un lado antes de asentir un tanto dudosa.

—¡Hemos llegado, repito, hemos llegado! — resonaron los gritos de un hombre paseándose por los pasillos.

Los ojos de la muchacha se iluminaron ante la noticia.

—¿En dónde estamos?—pregunto levantándose rápidamente.

—¡Hey si te paras así-

La de cabellos dorados no tardó en perder el equilibrio y acabar en los brazos del ya nervioso rubio.

—Eres como una niña..— Murmuró ayudándole a ponerse de pie.

Ella sonrió.

—Estamos en Bélica.—añadio entre suspiros, —Cuando bajemos de este barco, iremos a dónde se supone que debería haber llegado sólo. Te quedarás unos días y luego yo mismo me encargaré de traerte de vuel-

La de cabellos dorados ya estaba fuera de la habitación para cuando el rubio siquiera había iniciado con las indicaciones. Sabo miró a sus alrededores en busca de la joven, pero era demasiado, ella ya se encontraba en la borda del barco.

—Oh no...— se quejó entre dientes antes de tomar sus pertenencias y prácticamente correr en busca de la extraña muchacha a la cuál no le costó mucho encontrar ya que esta se encontraba caminando descalza, llamando de inmediato la atención de los demás.

—Ven aquí..— le Susurró cogiendo su mano antes de sonreír y bajar del barco rápidamente.

Sabo sin soltar la mano de _____ inició caminando.

"Mujercita"  [Sabo x Lectora]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora