LA SIRENITA (BL)

08: Primera perla

El pasillo estaba cubierto de gruesas alfombras y era silencioso mientras subían, nadie se dio cuenta de que Qin Shen se acercaba. Jiang Yu giró la cabeza para ver la cara de Qin Shen y sus ojos se abrieron de sorpresa.

Qin Shen retrocedió un paso ligeramente, la parte superior de la cabeza del joven apenas le llegaba a la barbilla, estaba en un ligero trance, le resultaba algo familiar, como aquella noche en el crucero .......

De repente se le hizo un vacío en los brazos y el joven fue arrollado por el hombre de mediana edad que se abalanzó sobre él y le maldijo: "Le eché el ojo a este chico primero, ¡cómo te atreves a robarme a alguien, lárgate!".

Una cosa era no meterse en sus asuntos y otra regañarle. Qin Shen hizo una mueca de desprecio, alargó la mano y tiró del joven hacia su lado, le tiró de la chaqueta y se la llevó con él, se subió los puños de la camisa, tiró del hombre de mediana edad como si fuera un pollo y entró en la caja detrás de él.

Jiang Yu esperó en la puerta del compartimento con la chaqueta del hombre en los brazos, el compartimento estaba insonorizado, por lo que no podía oír ningún movimiento en el interior. La chaqueta estaba llena del aroma del hombre, y Jiang Yu la abrazó un poco más fuerte entre sus brazos, estirando la mano para tocar su vientre plano. Por el rabillo del ojo, vio un objeto en el bolsillo superior de la chaqueta, también manchado de olor a hombre, y sus ojos se iluminaron de repente.

Al cabo de un rato, Qin Shen salió del compartimento, salvo por el ligero desorden de pelo en la frente, no era diferente de antes de entrar. Cogió su chaqueta de la mano de Jiang Yu y lo miró. Era un chico guapo, no era de extrañar que se dejara embaucar por aquel viejo grasiento.

Pensando en lo que acababa de sentir, miró a Jiang Yu de arriba abajo y estaba a punto de preguntar cuando la puerta de un palco al fondo de la habitación se abrió y un hombre con gafas gritó: "Jiang Yu, es hora de enviar al director y a los demás de vuelta, entra".

Qin Shen vio cómo el niño pasaba corriendo en un abrir y cerrar de ojos, y la puerta del compartimento se cerró.

Resultó ser un animador. Qin Shen se frotó la frente y descartó al instante la idea de ir tras él. Era un hombre sin fetiches, pero tenía un principio: nunca tocar a un artista de la industria del entretenimiento. La noche del crucero, todos los artistas que fueron estaban en cubierta para la fiesta, aunque él estaba drogado y delirantemente despierto, evitó deliberadamente a esos artistas y se escondió en el piso de abajo donde vivían los camareros y el personal del crucero, la persona que estaba debajo de él esa noche no podía ser un artista.

Además, todos los artistas que iban en el crucero estaban dispuestos a enrollarse con el maestro dorado. Si realmente se trataba de un artista aquella noche, era imposible que se hubiera escapado a primera hora de la mañana siguiente sin esperar a que se despertara. Estaba tan borracho y hechizado que cuando se encontró con una persona cualquiera que se le parecía, pensó que era el de aquella noche.

Qin Shen se dio la vuelta y se dirigió al lavabo sin pensárselo.

Dentro del palco, Fang Miao pidió a su ayudante que liquidara la cuenta, el director ya se había emborrachado sobre la mesa, su ayudante le ayudó a levantarse, y los pocos miembros del personal que aún estaban sobrios ayudaron al guionista y al productor, que llevaban mucho tiempo borrachos, a salir. Lin Cheng fue empujado por Zheng Ming para que le siguiera por la puerta y preguntó a Jiang Yu, que estaba a su lado: "Yu'er, ¿adónde has ido hace un momento? No te has metido en ningún lío, ¿verdad?".

El club que había contratado Fang Miao era de clase bastante alta, y esta planta era un palco VIP, por lo que había gente rica entrando y saliendo. Jiang Yu tenía buen aspecto y era propenso a atraer a esa gente, lo había aprendido de su experiencia anterior.

Había tenido problemas, pero no importaba, también se había encontrado con una gran sorpresa. Jiang Yu tocó algo en el bolsillo de su pantalón y sus ojos se curvaron en media luna con una sonrisa.

Después de que Qin Shen se lavara la cara y volviera a su palco, no tenía ganas de quedarse, saludó y salió del club y condujo de vuelta a casa.

Cuando regresó a su casa, Qin Shen arrojó despreocupadamente su chaqueta al sofá y acababa de sentarse cuando un objeto redondo rodó desde el bolsillo superior de su chaqueta hasta sus pies. Se agachó a recogerlo y vio que era una perla.

¿Cómo podía haber una perla en su chaqueta? Qin Shen se levantó la chaqueta y miró el bolsillo superior, que estaba vacío, y faltaba un pañuelo que había estado doblado dentro.

El autor tiene algo que decir: ¿Qué?