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"Amigos „

—¿Qué hacen esas personas? —Gulf pregunta mirando por la ventana como un grupo de chicos, aparentemente, estaba parado en el borde del acantilado. Entonces, sin creerlo, ve como este mismo grupo empuja a uno de ellos al agua. —¡Para el auto! —grita asustando a Mew, quien frena de golpe mientras Gulf sale del vehículo corriendo.

El grupo de chicos estaba muy alto, una caída así al agua podía ser peligrosa, y más si eras empujado.

—¿Vistes eso?

—Calma, no se estaban peleando. —Mew llega a su lado y le tranquiliza. —Saltan acantilados, es aterrador pero también estimulante.

—¿En serio?

—Muchos saltamos desde más abajo. Dejamos las payasadas para Sam y sus discípulos. —Gulf nota el tono familiar e irritado en el que Mew menciona el nombre.

—¿Sam? ¿Los conoces? —pregunta girando la cabeza para verle. Y como era mucho más alto, también debe alzarla.

—Son de la reserva.

—¿Tienes problemas con ellos? —nota el ceño fruncido y la expresión de molestia.

—No lo sé, se sienten los dueños del lugar. —comienza a decir, contando como sus amigos se burlaban del grupo de Sam para luego irse con él y comenzar a comportarse extraño, apartándolo. Era la primera vez que Mew hablaba de sus amigos, y Gulf entendía por qué no lo había hecho antes. Se notaba como le afectaba que sus amigos le hubieran abandonado por el tal Sam, quien al parecer también le intimidaba.

—Bueno, sólo evítalo. —es lo único que se le ocurre decir, nunca había tenido un amigo tan cercano que le contara parte de sus problemas o inquietudes.

—Es lo que hago. —Mew menciona con una mirada no tan convincente, pero el tema queda allí, ambos volviendo al auto para ir al lugar donde probarían las motos.

Gulf se sentía un poco inútil de no poder ayudar a Mew de una mejor manera, pero al menos podía acompañarlo y animarlo pasando un buen rato juntos.

[...]

—Te ves asustado. —es lo primero que dice Mew Suppasit cuando ve a Gulf luego de bajar las motos de la camioneta.

—No lo estoy. —el chico una cabeza más bajo que él dice, más no es lo que parece.

—De acuerdo. —acepta con una sonrisa que denota que no le creía para nada. —Freno, embrague, arranque. —explica cuando Gulf está sobre la moto, sosteniendo sus manos y guiándola a los lugares que mencionaba. Sin embargo, por un segundo se distrae por el toque, es la primera vez que tienen contacto directo. Y las manos de Gulf se sienten frías pero suaves. —Ahora bien, suelta el embrague despacio.

Mew reacciona de su pequeño momento soltando las manos ajenas para alejarse y darle espacio a Gulf, quien se había sorprendido por el toque inesperado y cálido de las manos del azabache.

Entonces Gulf intenta hacer lo que dijo Mew, pero a la primera comete un pequeño error que le avergüenza. Quería impresionar al azabache.

—Trataré de nuevo. —dice tomando una gran respiración para calmarse, frunciendo el ceño demostrando lo concentrando que estaba ahora.

La moto arranca y avanza sin problemas, Gulf cree que todo está bajo control hasta que ocurre algo con el volante y pierde el control.

—¡Aprieta el freno! —escucha a Mew gritar cuando se da cuenta del problema, así que lo hace, causando que saliera disparado de la moto por la velocidad en la que iba. Rueda por la tierra hasta estrellarse con unas rocas.

"¡Cuidado! Lobos sueltos" |Mew Suppasit| FINALIZADADonde viven las historias. Descúbrelo ahora