16.- Hyogo

71 8 0
                                    

Hyuga Neji

Debía regresar al trabajo a las 8:00 am junto con Tenten, pero ella ni siquiera escucho su alarma en las tres veces que sonó. Tuve que ser yo quien entró a su habitación apagarlas, me pareció mejor dejarla dormir un poco más. Después de todo es una Hyuga, y tiene el permiso de ir a la hora que ella quiera.

Sólo lleve el papeleo más indispensable para hoy, el resto se quedo en la oficina de padre, pero gracias a Tenten ya era menos trabajo el que tengo.
Tan sólo ingrese al lugar, mis trabajadores me comenzaron a llenar de información nueva que debía resolver.

Una de las trabajadoras de las tiendas está en días de dar a luz a su bebé, así que tiene derecho de descansar, pero ahora tengo un puesto que debe ser ocupado temporalmente; para ello hay personas que tenemos en lista para ocupar esas vacantes temporales, el problema es que están esas chicas en días de escuela todavía, entonces necesitó una persona que lo cubra por al menos un mes, mientras llegan sus vacaciones escolares de las chicas.

Pero ese problema no es el único, hay más que no se han resuelto y necesito urgentemente resolverlos antes de que llegue mi padre de su viaje.
Un portazo de la puerta al ser abierta fue lo que me hizo apartar mi vista del papeleo por un segundo.

– ¡Oye Hyuga tonto! - Sonreí.

Era Tenten bastante enojada, cerró nuevamente la puerta con otro portazo.

– Buenos días para ti también. - se cruzó de brazos.

– Tuve que venir casi corriendo porque  apagaste mis alarmas.

– Y yo me tuve que levantar más temprano por culpa de tus ruidosas alarmas.

– Bien, entonces pediré a padre un cambio de habitación.

Me puse de pie para estar a su lado, yo mantenía mi sonrisa, pero ella me seguía mirando como si me quisiera matar.

– Asi te cambies de habitación, yo te voy a seguir como perro detrás tuyo.

La volví abrazar, ella se mantuvo quieta sin replicar de nuevo.

– Vamos Neji, nos van a ver si alguien entra.

– ¿Y qué hay de malo en eso? Eres mi esposa y puedo abrazarte. - me separe de ella – ¿Acaso hay alguien más? ¿Quién es? ¿Lo conozco? ¿Trabaja aquí también?, tendré que despedirlo de ser así.

– Oye no, no lo dije por eso. No tienes porqué exagerar.

La mire de arriba-abajo, se veía muy linda, y más con la coleta alta y ese flequillo de lado. Pero más allá de ver lo hermosa que estaba, recordé que su madre se encargaba de administrar las tiendas del negocio de los Amma.

– ¿Tienes algún trabajo importante que estés haciendo?

– No, ya lo termine.

– Ayudame. - arqueó una ceja – Necesito que me ayudes administrando una de las tiendas en Hyogo.

Tenten es de la región de Chugoku, más específicamente de la zona centro de Hiroshima. Nosotros estamos en Chubu, en la prefectura de Shizuoka. Se ha mudado desde muy lejos por el matrimonio que se le ocurrió a mi padre, de no ser por él, dudo mucho que haya podido conocerla.

– Acepto. - sonrió.

El tiempo que se haría desde la estación de tren en Hyogo hasta la de Hiroshima es de aproximadamente hora y media, le conviene bastante ir a visitar a su familia.

– La chica de quien cubrirás el puesto trabaja de lunes a viernes, el fin de semana se encarga de la tienda otra chica. Te voy a rentar un departamento cerca de la tienda, necesito que hagas maleta para un mes. ¿No hay problema?

– Ninguno, con gusto me voy desde hoy mismo.

– Sí necesitó que lo hagas, requiero que mañana te encargues de todo.
Le pediré a la secretaria que te haga llegar los papeles para que veas los estado de cuenta, y yo mismo te voy a dejar en... - mire mi reloj – dos horas.

– Perfecto, me voy a preparar entonces.

– Dile a Lee que te lleve a casa.

Salio de la oficina muy contenta, me hizo creer que está muy feliz de estar lejos de mi durante un mes.

******

A la hora acordada fui por Tenten para llevarla, subí sus maletas en espera de que ella bajara para irnos.
Bajo cambiada con un pans ligeramente suelto, un top y una sudadera delgada.

– Pareces muy feliz por no tener que verme durante todo un mes. - me crucé de brazos.

– Estás en lo correcto.

Se subió al auto sin decirme más, ahora ya me arrepiento de haberle dicho que fuera.
Negué con la cabeza y me subí al auto también.

– Ni creas que te vas a librar de mi tan fácilmente.

– Por el momento lo haré.

– No me provoques niña, soy capaz de irme yo también para allá.

– No Hyuga, si me vas a espiar me voy lejos. - bufé.

– Bien.

No quería buscarle más, sé que es capaz de hacerlo y no quiero que lo haga.

********

Pasada una semana desde que se fue Tenten a Hyogo, me he mantenido en contacto por mensaje con ella. Por lo normal, me envía fotos con casi todo lo que está haciendo allá, la excepción son en sus horas de trabajo.

Por el momento tuve que dejar a medias las prendas que tengo el dibujo, tan sólo como vuelva mi padre podre regresar con mis cosas habituales que hago, pero actualmente no me da ni tiempo.

Estaba ordenando el papeleo de importación para la zona sur del país, y note que habían reporteros en la entrada del edificio. Revise mi agenda y no, no hay nada que diga sobre una entrevista o algo parecido.
Seguí leyendo mientras intentaba recordar algo que estaba olvidando hacer, y justo entro Lee sin tocar la puerta.

– Lee, te he dicho que no soy Tenten para aguantar esas informalidades tuyas.

Levante la mirada para escuchar la excusa que me daría está vez.

– Señor, debe mirar esto. - se acercó con su celular en mano.

Lo primero que pensé es que me mostraría otra foto de su mascota, que es lo que ha estado haciendo desde que no tiene a Tenten aquí para molestarla.

– Lee, vuelve al trabajo. - regrese la mirada al papel en mia manos – Molesta a Tenten por mensaje.

– No mi señor, de verdad tiene que leer esto... Están ofendiendo a mi florecita en internet.

Sin pensarla le quite a Lee el celular de la mano, leí con mucha atención lo que está escrito en ese chisme. Y efectivamente, me están criticando a mí por tener a Tenten en la tienda y a ella por ser "insuficiente" en la empresa Hyuga. Finalmente, una foto de ella atendiendo a las personas en la tienda en Hyogo.

Esto había salido hace apenas un par de horas, pero porqué criticar por tener a mi esposa en la tienda. Ella me estar ayudando, no es como que la haya enviado ahí por ser incompetente, al contrario, la envíe por que sé que es capaz de administrar una tienda como esa.

Le devolví el celular a Lee. No logró entenderse porqué le dan importancia a que Tenten esté atendiendo la tienda Hyuga, ¿qué hay de malo en ello?

– Lee, llama Guy.

Por el momento sólo haré que los hagan irse de aquí, no hay necesidad de hacer tanto alboroto por ellos. Tengo mucho trabajo como para pensar en una entrevista por un chisme sin sentido como este.

Matrimonio Anhelado Donde viven las historias. Descúbrelo ahora