Creo que debería de olvidar mi amor unilateral por un ídolo que a sus ojos solo me vería como una fan más, siendo que en los míos es el único hombre.
Debo de poner a dormir mi loca ilusión de llegar a conocer a Yong Hwa, pero que puedo hacer si mi corazón no quiere entender.
En las últimas semanas que he pasado con William han sido divertidas, al parecer le gusto pero no me ha dicho nada hasta ahora. Hoy me tocaba chequeo, William quedo en recogerme después de la escuela para hacerla pasar por una "cita".
Cuando llegó el momento de ir por mis análisis, me pasaron al consultorio de William el cual estaba sentado tras de su escritorio con una cara de seriedad que hasta me daba miedo entrar. Me senté enfrente de él, y un silencio reino entre los dos.
-¿Cómo salieron mis estudios?- Por fin ese silencio desaparecio.
-Tengo una mala noticia para ti.- Eso definitivamente no me agradaba.
-Por favor no te quedes en silencio.- Ya no quería más silencios ante mi situación.
-Creo que... Nada, no es nada importante, solo es que sigas con tu tratamiento.- Sus ojos comenzaban a tornarse rojos, sabía que me estaba ocultando algo pero la verdad parecía muy malo y era mejor evitarlo mientras pudiera. Nuevamente un silencio sepulcral reino entre los dos.- Bueno... Amm como decirlo... Este...- Por alguna extraña razón William empezó a sonrojarse, parecía un adolescente siendo que él era mucho mayor que yo, tal vez quería decirme algo vergonzoso; definitivamente era todo un adolescente.
-¿Qué es lo que quieres decir?- Pregunte algo fría.
-Quisiera llevarte a un lugar muy especial para mi, y de ahí te llevaré a tu casa ¿De acuerdo?
-No tengo otra opción, ¿Cierto?
-Creo que no.
-Entonces vamos antes de que se haga más tarde y mi mamá empiece a imaginar otras cosas que no son.
-Tienes razón vamos.- Como yo era la última pasiente, se quitó su bata y se puso un saco ajustado de color azul oscuro que quedaba deacuerdo a su pantalón del mismo color, camisa blanca con corbata y zapatos negros; realmente se veía muy...muy...guapo.
Yo iba un poco más casual o más bien iba con el uniforme de la escuela que consistía en calcetas largas hasta las rodillas, falda de tablones negra, saco negro, camisa blanca, corbata azul y zapatos negros. La verdad yo amaba mi uniforme pero creo que era algo raro para una escuela.
Cuando llegamos al estacionamiento, William me hizo esperar en la entrada hasta que encontrará el auto, después de un par de minutos llego con su auto del cual bajo para llegar hasta donde me encontraba con el propósito de poder abrirme el lado del copiloto.
En el transcurso del hospital al lugar especial de William nadie dijo palabra alguna, solo se escuchaba las baladas de CNBlue, yo las tarareaba en mi interior, mientras pesaba en como decirle a mi mamá sobre mi enfermedad; realmente me lastimaba mucho pensar en que le dañará mucho cuando lo sepa.
Cuando menos pensé William ya se había estacionado, en un restaurante parecía muy elegante y yo no iba nada elegante. Me mire en el espejo del auto para acomodar lo que fuera posible, tales como mi cabello calcetas entre otras cosas. William lo había notado y solo formó una gran sonrisa de esas que matan.
-Solo suelta tu cabello, ya eres bella, además tu informe te hace lucir elegante por que es de un colo oscuro. En pocas palabras te vez hermosa.- William me tomo de la mano y se volteó para segur viendo el camino.
Yo... Bueno creo que me ruborice por que lo que me dijo y esas palabras resonaban mucho en mi mente: "te vez hermosa". Tan sólo de volver a pensarlo sentía el gran rojo en mis mejillas, por estar entretenida no percaté de cuando llegamos a un mostrador donde William dijo que tenía una reservacion especial para ese día. La camarera nos guió hasta un sitio más aislado, más privado; antes de entrar William hizo que me tapara los ojos con una venda. Ya adentro solo sentí que retiraba una de las sillas y hacia que me sentará, después de eso me destapó los ojos y quede muy sorprendida por lo que tenía delante de mi...
Una hermosa cena para dos personas, en la mesa se encontraba unas velas en el centro al lado derecho unas cuantas rosas blancas y los distintos tipos de cubiertos en cada extremos de la mesa. William se sentó al otro lado quedando enfrente mío, lo cual me ponía algo necreviosa...pero ¿Porqué?.
Después de unos minutos incomodos, llego una camarera pidió nuestras ordenes, William pidió un platillo fuerte y yo pedí algo ligero; una ensalada ya que no comía tantos carbohidratos, pues mi enfermedad no me lo permitía.
-Deverías de haber pedido algo como lo mio.
-No lo creo, sabes que yo no como carne.
-Pero este no tenía sales y era bajo en carbohidratos.- Creo que esto empezaba a hacer una pelea.
-Pero no puedo por mi enfermedad.- Me defendí.
-Yo soy doctor y te digo que si podías haber comido algo más pesado, por una vez.
-Pero no puedo dejar mi tratamiento y mis reglas en la comida.
-Te estas volviendo loca.
-Si eso es por cuidar de tu vida, entonces si soy loca.
William se quedo callado tal vez pensando en lo que no me quiera decir en el consultorio.
-Sabes tengo algo que decirte, pero no se como lo tomes.
-Adelante te escucho.
-Despues de la comida, ¿Te parece?
-De acuerdo.
La camarera llego con nuestras ordenes y empezamos a comer, después del platillo fuerte. Nos dieron el postre pero yo me modere por que era chocolate y eso afectaba mi corazón.
Mientras William pagaba la cuenta yo fui al baño en donde sólo me acomode la corbata y un poco mi cabello. Mientras caminaba hacia donde se encontraba William pensaba en que me quería decir, pero por más que pensaba solo daba a la conclusión de cosas malas.
-¿Lista?- Me saco de mis pensamientos
-Amm claro.
-Entonces vamos.- Agarro mi mano y la entrelazo con la suya, por más que intentaba safarme no pude.- Por favor... - Me miró en forma de súplica, por ello accedí.
Empezamos a caminar y yo solo pensaba en la poca vida que me quedaba en como decirle a mi madre de todo esto en mi amor por un ídolo y en como moriría. William me vio por el rabillo del hombro y formó una hermosa sonrisa cosas que me derritió por dentro; de lo avergonzada que estaba voltee a ver el paisaje el cual era hermoso y más por el atardecer que se encontraba el contraste de los tonos rojizos en los árboles verdes realmente era un espectáculo digno de ver... William se detuvo enfrente de mi y se arrodilló, me sorprendí al verlo así... Nunca soltó mi mano; se apreciaba como se iba ocultado el sol...
-____ ¿Quieres... Ser... Mi... Novia?....
-William... Yo....
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Una Ilusion antes de morir.
FanficEsta historia es un fanfic entre el vocalista de la banda sur coreana CNBlue: Jung Yong Hwa y tu. "Nunca pensé que mi loco sueño se convirtiera en realidad".