He publicado con editorial y te cuento todo

EMOSIDO ENGAÑAOS

Vaya por delante que escribo estas líneas con el primer café del día en las manos y que si queréis leer una redacción limpia y elaborada, aquí no es (para eso podéis echarle un ojo a los relatos que tengo colgados en esta misma plataforma). Vaya por delante también que, como he dicho antes, lo que explico es mi experiencia y no es extensible a la de los demás. Y Vaya por delante una vez más que con estos artículos no pretendo que nadie se venga abajo, sino más bien poner sobre la mesa varios temas que queman los chats de WhatsApp, los DMs, los telegrams y hasta, por increíble que parezca, las tertulias cara a cara en la cafetería junto a cualquier feria del libro.

En fin, al lío.
HEMOS SIDO ENGAÑADOS.
No sé si exactamente nos engañan, pero sí nos ocultan cosas. Hoy voy a hablar de NÚMEROS: cuántos ejemplares se imprimen de cada título, cómo se justifican las ventas, etcétera.
Pongámonos en contexto. La tirada más grande que me han publicado constaba de 400 ejemplares (os puede parecer poco, pero con el tiempo veréis que es un pasote). Yo firmé un contrato de cesión de derechos durante tres años (creo recordar) y una tirada de 400 libros. Como novata que era entonces, pensaba que 400 unidades eran fáciles de vender (tenían que serlo). España es muy grande, hay librerías en cada esquina, grandes almacenes, cadenas exclusivas del libro y quioscos. En tres años, apenas eran 130 o 140 libros por año, 11 al mes... Ya ves tú, muy a las malas, once libros al mes es una cifra asumible.

*Insertar meme de la chica riéndose mientras bebe café. *

Vale, era un poco tonta entonces, no conocía el mercado, pero echaba cuentas y pensaba de verdad que cualquier empresa que no pudiera conseguir eso, no podría seguir en pie, no le rentaría el negocio. Pasaba a euros el montante de esos libros y parecía ridículo. Contad conmigo y sacad conclusiones: si cada libro costaba 15€ y al autor le pagaban el 10% menos el IVA:

15 - 21% = 11.85€ x 10% = 1.18 €

Esas eran las cifras que yo ganaría por libro. Si multiplicas 1.18€ x 130 libros al año, más o menos ves por donde voy. Pero yo aún pensaba más allá. Pensaba en las ganancias de la editorial y en cómo de rentable era esa tirada. 400 libros x 15€ = 6000€. Réstale los gastos de corrección, maquetación y diseño de cubierta y/o ilustraciones interiores. Réstale también los royalties del autor y el porcentaje de la distribuidora y el de la tienda (suele ser un 30% respectivamente). Hagamos la cuenta: 6000 - 70% (30 distribución + 30 tienda + 10 autor) = 1800. De esos 1800 es bastante probable que se queden en 800 (si llega) después de descontar los gastos que he descrito antes más los de impresión y el iva. Si divides 800/12 meses del año son 66€ por título publicado al mes (contando que vendas la tirada en un año). ¿Qué quiero decir con todo esto? QUE CONFIABA. Confiaba en que estos números irrisorios eran fácilmente alcanzables, confiaba en que una editorial no imprimía 400 copias si no creía que era capaz de venderlas, confiaba en que alguien que lleva un negocio lo hace para ganar dinero y no para perderlo o para pasar el tiempo. Y tenía que confiar porque como autora iba a ser la última en cobrar.

Sorpresa: me equivocaba en todo.

JUSTIFICANTES DE IMPRESIÓN QUE NUNCA VERÁS

Aquí es donde quería llegar con todo este rollo. La revelación no llegó el primer año junto al primer "informe" de ventas. Ni siquiera al segundo. Pero en algún momento empecé a desconfiar. No fue solo porque los informes de ventas siempre eran desastrosos (tipo, vender 10 ejemplares en un año, de los cuales 6 eran en digital), sino porque empecé a conocer casos de compañeros (de esa y otras editoriales) que tenían las mismas dudas que yo: ¿Cómo podía subsistir un negocio con tan pocas ventas? A día de hoy todavía no me lo explico y prefiero no especular al respecto, pero la verdad de mi experiencia es esta: los autores recibíamos informes de ventas en los que quedaba claro que nuestros libros se vendían poco y no eran rentables, pero la editorial seguía en pie y editando nuevos libros. Podríamos pensar que tenían best sellers y que con eso cubrían gastos. Pensemos que sí.  Sin embargo, una que ya peina canas, decidió informarse un poco más y acabó por darse cuenta de que no tenía por qué confiar ciegamente en ninguna editorial.

¿Te fías acaso de tu jefe cuando te dice que te va a dar vacaciones tal semana o lo firmas porque es la manera correcta de hacer las cosas?

El tema es que averigüé que la manera correcta de hacer las cosas en una editorial es, para empezar, presentarle al autor un documento que justifique la impresión de los ejemplares que se han firmado por contrato. Un papel de la imprenta en el que conste la fecha, el título y el número de copias. Así que lo pedí. Lo pedí en mi primera publicación. Y en la segunda. E incluso en la tercera. ¿A ti te ha llegado ese justificante? Pues a mí tampoco.

¿Quiero decir con esto que nos engañan? ¿Que venden más de lo que dicen? NO. Quiero decir que no son transparentes. Y la opacidad crea desconfianza.

Dónde y cuándo se han vendido tus libros: otro misterio sin resolver

Siento que se está haciendo muy largo este "artículo" así que voy a ir abreviando (el café ya se me ha acabado).

Una de las cosas que todavía echa más sombras sobre la contabilidad editorial son los informes de ventas. He recibido informes en los que se mezclan las ventas de los libros con su PVP normal con las ventas de los mismos títulos cuando han estado en promoción o liquidación. Esto ya es bastante confuso porque te sueltan que se han vendido 40 libros (me lo invento) y de esos 40 no sabes cuántos son a precio reducido por campaña de sant Jordi, de black friday o de lo que sea y cuántos son a pvp normal. Una vez más has de confiar en que la editorial haga bien los números (demasiada confianza piden ya). He recibido informes de ventas en negativo cuando nunca he cobrado un adelanto. Esta historia fue muy graciosa (spoiler: no), pero no da para contarla ahora. Y lo peor de todo: no tienes ningún medio como autor de certificar que las ventas de las que te informan son reales o no.  
Una vez más tienes que confiar en que la editorial está traspasando bien los datos. Que está repasando las ventas de tus libros en esta librería, aquella y la de más allá; que tiene bien controlados los que están en depósito aquí y allá y los que han sido devueltos y están en mal estado.

Señores, es un negocio, y en los negocios se justifican todas los movimientos y se detallan las facturas.

Uff, es que me enfado, me supera este tema. ¿Que es mucha faena ser más concreto? SÍ, POR SUPUESTO, ES QUE ESTO ES UN TRABAJO Y LOS TRBAJOS DAN FAENA. No me imagino yo yendo al súper y que me digan el montante a pagar sin que presenten el ticket de compra detallado con el pvp de cada artículo. Salvando las distancias, un poco más de seriedad no estaría mal.

Vale algunos os estaréis llevando las manos a la cabeza porque las editoriales son muy grandes y eso sería una locura de trabajo. Pero ¿es que acaso ese trabajo no han de hacerlo igualmente para su propia contabilidad? ¿Es que no saben donde tienen los libros y cuántos se venden o se dejan de vender? ¿No saben usar excel o control c + control v?

*Insertar meme de Elmo en el infierno*

Pues se ve que no saben, amigos autores. Ni siquiera a pequeña escala, con las editoriales pequeñas con las que he trabajado, que no tienen gran distribución y llevan los libros a las mismas librerías (nada de FNACs y Casas del Libro) ha sido posible tener un desglose de la cantidad de libros distribuidos, qué cantidad hay en cada librería y cuántos están en la distribuidora cogiendo polvo. [Por cierto, desde aquí muchas gracias por poner mis libros en Gigamesh; aprecio el esfuerzo; que piense que se puede mejorar no quiere decir que no aprecie las cosas que se hacen bien -y algunas se hacen muy bien].

No vamos a tener ese documento. Ni el justificativo de imprenta. Ni el de destrucción de ejemplares no vendidos después del cese de contrato. Pero, aunque quería hablaros de eso también, va a tener que ser en otra ocasión porque creo que necesito otro café.

Un apunte antes de irme sobre las grandes tiradas en editoriales pequeñas: recordad que muchas no tienen sede, no tienen despacho ni almacén, no tienen gente en plantilla y trabajan desde casa. ¿No te preguntas dónde almacenarán tus 400 libros y los 400 de cada título que sacan?

Venga, ¡hasta la próxima!